Telefónica vive su peor sesión en Bolsa desde diciembre de 2020 por el pacto de uno de sus principales clientes alemanes con Vodafone
Las acciones de la teleco cierran la sesión con un descenso del 7,03%
Telefónica ha cerrado este miércoles como el peor valor del Ibex con una caída del 7,03% que ha dejado sus acciones en 3,55 euros, en mínimos de febrero de 2023. Para ver una jornada bursátil peor que la de hoy para Telefónica, hay que remontarse hasta el 11 de diciembre de 2020, fecha en la que el precio de la teleco retrocedió un 8,1%. Al principio del día, los recortes de la cotizada eran suaves, pero a partir de la una de la tarde hora peninsular, el anuncio de un acuerdo en Alemania entre Vodafone y la operadora 1&1 Mobilfunk para una alianza exclusiva de servicios de roaming en todo el país que serán provistos por la primera a la segunda desencadenó el fuerte descalabro. 1&1 Mobilfunk era hasta el momento uno de los principales clientes de Telefónica en Alemania y tenía un pacto de carácter similar con la compañía española, ahora, 1&1 se dispone a cambiar de proveedor de servicios asestando un golpe a la importante división germana de Telefónica.
Según el comunicado hecho público por el operador virtual alemán 1&1, como parte del pacto exclusivo que tiene visos de durar a largo plazo, ella y Vodafone se han comprometido a cerrar su cooperación lo antes posible. La citada cooperación incluirá la prestación de servicios de roaming en áreas que no estaban cubiertas aún por la nueva red móvil de 1&1. Con el pacto, la empresa ganará acceso a la red de Vodafone, incluyendo los estándares 2G, 4G y 5G, “así como a futuras tecnologías y estándares móviles”.
La fecha de inicio del acuerdo con Vodafone se ha fijado una vez concluya el anterior pacto que 1&1 mantenía con Telefónica, pero como tarde, fijan el límite del 1 de octubre de 2024, con lo cuál, se desprende que pretenden acabar con el acuerdo de Telefónica antes del tiempo que estaba inicialmente estipulado. El trato que 1&1 mantiene con Telefónica se remonta a mediados de 2020, entonces, ambas compañías firmaron un documento en el que se fijaba el acceso a la red de Telefónica en Alemania durante como mínimo cinco años. Como no había exclusividad, ahora 1&1 aprovecha para cambiar de proveedor.
“A partir del lanzamiento de la red móvil de 1&1 basada en la nueva tecnología OpenRAN, previsto para finales del próximo mes, todos los clientes de la red 1&1 con tarifas móviles 4G recibirán inicialmente servicios de itinerancia nacional de Telefónica hasta que Vodafone provea los servicios de itinerancia nacional. A partir de ese momento, las tarifas móviles 5G podrán ofrecerse a escala nacional en la red 1&1. En el período de transición hasta la prestación de itinerancia nacional 5G por Vodafone, 1&1 prestará a sus clientes servicios móviles 5G en el marco del modelo OMV anterior. 1&1 obtendrá los servicios móviles necesarios para ello de Telefónica o Vodafone. El requisito previo para ello es una prórroga de la operación paralela aprobada por la Agencia Federal de Redes hasta el 31 de diciembre de 2023, que 1&1 solicitará hoy”, detalla el comunicado.
Respuesta de Telefónica
A través de un comunicado oficial compartido por su filial alemana, la teleco ha respondido al movimiento manteniendo sus previsiones de ingresos de cara a lo que queda de ejercicio y haciendo un llamamiento a la calma. “En los últimos trimestres, Telefónica Alemania ha disfrutado de un fuerte momento comercial y financiero gracias al atractivo de su marca O2. Telefónica Alemania continuará con su ritmo de crecimiento sostenida por su propia fortaleza comercial, su calidad de red y su probada trayectoria como socia de otras empresas”, comienza el documento.
“Independientemente del movimiento que ha anunciado hoy 1&1 sobre su cooperación con Vodafone, 1&1 tiene obligaciones contractuales con Telefónica Alemania bajo el acuerdo existente hasta el 30 de junio de 2025. Esto asegura los flujos de ingresos para Telefónica Alemania. Telefónica Alemania puede usar su valiosa capacidad de red para su propia operadora o para otros socios. Frente a este contratiempo, Telefónica Alemania confirma su previsión de crecimiento para el ejercicio 2023, tanto como para ingresos como para los ingresos operativos antes de depreciaciones y amortizaciones y la mantiene en el rango superior de un crecimiento de un solo dígito. También se mantiene el compromiso de un dividendo de 18 céntimos por acción”, expresa el comunicado.
Telefónica está siendo sin duda la gran perjudicada a ojos del mercado. Tras conocerse el cambio de bando, las acciones de Vodafone han subido un 0,03%. Las de 1&1, un 17,19%. Además de las pérdidas del 7,03% que han marcado las acciones de Telefónica en España, las de la filial alemana de la compañía se han desplomado un 17,87%. Fuentes de Telefónica insisten en que la filial alemana ha confirmado sus previsiones para el conjunto de 2023, así como el pago de un dividendo de 18 céntimos por acción. “La compañía ha mantenido un fuerte crecimiento en el primer semestre del año gracias al negocio móvil, así como a las ventas de terminales con el impulso del 5G”, exponen estas mismas fuentes que también ponen el foco en que el contrato de 1&1 expira el 30 de junio de 2025. Con todo, el comunicado no fue suficiente pare frenar la caída en Bolsa.
Según las cuentas publicadas por Telefónica la semana pasada, Alemania es el tercer mercado de la teleco, por detrás de Brasil y España. En la primera mitad de 2023, la primera economía de Europa aportó el 18% de los ingresos del grupo. Un 17% del beneficio antes de depreciaciones y amortizaciones. A través de su marca O2, Telefónica contaba allí a finales del primer semestre con 42 millones de conexiones móviles, habiendo registrado un crecimiento neto de más de 600.000 nuevas en los primeros seis meses de 2023. Usman Ghazi, analista de Berenberg, afirmó en un comentario del que se ha hecho eco Bloomberg que la noticia es “materialmente negativa” para Telefónica Alemania porque el contrato con 1&1 aporta el 40% del flujo de caja libre de la firma.
“El esfuerzo de 1&1 para construir su red propia y erigirse como la operadora con la cuarta mayor red de Alemania es una puesta que puede salir rentable, dados los 12 millones de clientes que el operador virtual tiene. Mientras que los riesgos de ejecución son elevados dado el uso de una tecnología Open RAN que está sin probar, acceso a torres y espectro limitados, el nuevo acuerdo con Vodafone aportará un colchón de seguridad muy significativo, dando acceso a una red de 5G de calidad mientras resuelve los problemas de su red propia. El reemplazo de Telefónica, que también estaba lista para ofrecer 5G, sugiere que los costes ofrecidos por Vodafone pueden ser más atractivos”, escribe Erhan Gurses, experto de telecomunicaciones que trabaja para Bloomberg Intelligence.
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