Gabriel Escarrer Jaume se hace con todo el poder en Meliá
La hotelera revisa al alza sus previsiones de negocio y augura un ebitda de 475 millones en 2023
El consejero delegado de Meliá, Gabriel Escarrer Jaume, se hace con todo el poder en la compañía y asume también la presidencia del Consejo de Administración, que hasta esta mañana ocupaba su padre y fundador de la compañía, Gabriel Escarrer Juliá. En un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, la hotelera informó de los acuerdos adoptados en la reunión del Consejo de Administración, previa a la Junta General de Accionistas que tuvo lugar a las 12.00 horas, en la que se aceptó la renuncia de Gabriel Escarrer Juliá (Porreras, 1935) a su cargo de presidente no ejecutivo del Consejo. El fundador de Meliá será nombrado presidente de honor de la sociedad, con funciones de representación y de asesoramiento al Consejo de Administración y al presidente del mismo, y mantiene sus cargos como consejero externo dominical y vocal del Consejo.
“Como continuación a los anteriores acuerdos, siguiendo lo establecido en el Plan de Sucesión del presidente del Consejo y a propuesta de la Comisión de Nombramientos, Retribuciones y Sostenibilidad, el Consejo de Administración ha decidido designar como presidente del Consejo a Gabriel Escarrer Jaume (Palma de Mallorca, 1971), que seguirá manteniendo sus facultades como consejero delegado para dirigir la Sociedad”, recalcó la compañía en un comunicado.
Ese plan de sucesión se activó en diciembre de 2016, cuando el fundador de Meliá renunció de forma voluntaria a sus funciones ejecutivas como presidente y las traspasó a su hijo Gabriel. Y un segundo capítulo se produjo en octubre de 2018, cuando Escarrer Juliá anunció una serie de transmisiones patrimoniales y pactos parasociales para ceder el control de la compañía. Gabriel Escarrer Juliá dejó en manos de su familia la participación del 46,969% que tenía en las distintas sociedades de la compañía, operación que no le obligó a lanzar una oferta pública de adquisición (opa),
Estas sociedades, en las que se mantienen como socios Escarrer, su esposa y sus seis hijos sin que ninguno ejerza el control, eran Hoteles Mallorquines Consolidados (23,379 %), Hoteles Mallorquines Asociados (13,206 %) y Hoteles Mallorquines Agrupados (10,388 %). En esas mismas fechas, Escarrer Juliá comunicó que a través de Majorcan Hotels Exulux, sociedad que controla, mantenía indirectamente el 5,025 % de los derechos de voto en el grupo hotelero.
Revisión al alza de los planes de negocio
Pocas horas después de anunciar el cambio en la cúpula, Escarrer Jaume avanzó ante la Junta General de Accionistas de Meliá una revisión al alza de las previsiones de negocio para este año como consecuencia de la reactivación del turismo. Ya en el primer trimestre, la compañía alcanzó el hito de recuperar los ingresos previos a la crisis, tres años después de que estallara la pandemia, con una cifra de negocio de 396,1 millones de euros, lo que supuso un alza anual del 46%. “Como recordarán, hace un año me comprometí con ustedes a incrementar nuestro ebitda anual hasta los 400 millones de euros en 2022, objetivo que superamos con creces, con 430 millones, y este año me gustaría comprometerme a superar de nuevo el consenso de mercado, hasta un mínimo de 475 millones, cifra con la que nos sentimos cómodos, de mantenerse las proyecciones actuales sobre la evolución de la temporada”, aseguró. Esta nueva previsión supone una mejora de 25 millones respecto a la anterior previsión.
Asimismo, el consejero delegado también mantuvo el objetivo de abrir 30 nuevos hoteles, lo que aportará 8.000 habitaciones nuevas a la cartera en 2023, en línea con lo conseguido el pasado ejercicio. Escarrer Jaume destacó que las prioridades se centrará en crecer en los segmentos de lujo y premium, con tres grandes focos: Caribe, sudeste asiático y Europa. En el primer caso destacó los proyectos en Cuba, donde ha anunciado la apertura de cuatro nuevos hoteles, y en México, donde garantizó “que se duplicará el tamaño de la cartera pasando de 7 a un mínimo de 14 hoteles”. Los tres destinos prioritarios en Asia serán Tailandia, Malasia y Vietnam, mientras que en el caso de Europa, el crecimiento se centrará en Albania, donde será la mayor hotelera en 2025, Malta y en España.
Una de las asignaturas pendientes de Meliá ha sido el fuerte castigo de los títulos en bolsa, del que ha empezado a recuperarse este año tras quince años de derrumbe. A finales de 2007, los títulos de la hotelera cotizaban a 18 euros y tocaron suelo dos años después al rozar los 2 euros. Posteriormente inició una lenta recuperación que le llevó a superar los 13 euros en 2017 y desde allí se mantuvo en esos niveles hasta que la pandemia hundió la acción hasta los tres euros. En los tres años siguientes ha sufrido varios episodios de subidas y bajadas, aunque en ningún caso el valor de la acción ha superado los ocho euros. “Es destacable nuestra evolución en bolsa, ya que la acción se ha apreciado un 38,05% en lo que va de 2023, superando a la media del Ibex 35, que subió un 14,7%, convirtiéndose en el tercer título que más se revalorizó en el Ibex 35″, resaltó Escarrer Jaume. “El mercado respalda la recuperación y buena prueba de ello es la apuesta de los dos mayores accionistas por seguir ganando tamaño”. Hoteles Mallorquines Agrupados, sociedad que comparte la familia Escarrer, compró un millón de acciones hasta llegar al 54,48% del capital y el fondo canadiense Global Alpha duplicó su participación pasado del 5,118% al 10,14% del capital a enero de 2023″. Las acciones de Meliá se apreciaban un 3,5% a mediodía tras los anuncios de la hotelera hasta rozar los 6,4 euros.
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