Roig gestiona el imperio Mercadona con un 40% menos de directivos que en 2018
Inmo Alameda, el ‘holding’ del empresario, alcanza un patrimonio récord de 8.307 millones
Inmo Alameda, el holding a través del que Juan Roig gestiona Mercadona y sus distintas ramificaciones empresariales, se ha convertido en un trasatlántico corporativo que año tras año sigue incrementando sus dimensiones. Algo que consigue, paradójicamente, con una progresiva reducción en los puestos directivos de las distintas sociedades que componen el grupo.
Las cuentas anuales consolidadas de Inmo Alameda muestran cómo, a cierre del ejercicio 2022, el personal directivo era de 38 personas. Son siete menos que un año antes, una reducción que consolida una tendencia que empieza en 2018, cuando alcanzó un pico de 62 empleados identificados con la etiqueta de directivos. Desde entonces, estos se han reducido un 38,7%, y la cifra de 2022 es la más baja desde 2011.
Pese a ello, los salarios repartidos entre el personal directivo no se han reducido. Ahora son menos, pero están mejor retribuidos. Así al menos lo dicen las cifras de la memoria financiera de Inmo Alameda. Los sueldos devengados por esta parte de la plantilla alcanzaron un récord de 39 millones de euros, dos más que en 2021, entre todos los conceptos. Son 100.000 euros más que en 2018, pero entonces con 24 directivos más. Si la comparativa se realiza con 2012, el gasto es del doble. A eso hay que sumar los 11 millones que el año pasado percibió Juan Roig como sueldo: cinco como administrador de Mercadona y seis como administrador de Inmo Alameda.
Como personal directivo, el holding de Juan Roig identifica, entre otros, a los 14 miembros que forman parte del comité ejecutivo de Mercadona. Personas de plena confianza del presidente y propietario, y que son el núcleo duro del grupo. En febrero de este año, la compañía anunció una reestructuración que incluyó la salida de Patricia Cortizas, hasta entonces responsable de recursos humanos, función que absorbió José Jordá, director general de tiendas.
En esa lista también se incluyen las personas que ejercen responsabilidades de dirección en el resto de participadas, como Angels, Lanzadera, o la filial portuguesa, entre otras.
La empresa explica como uno de los factores del menor número de directivos los diferentes criterios que se han utilizado en los últimos años para identificar al personal directivo. También hay que tener en cuenta que, en los últimos ejercicios, Mercadona se ha desprendido de empresas como Caladero o Sothis, esta última el año pasado. Pero también han surgido otras, como Licampa 1617, encargada de la construcción del pabellón Juan Roig en Valencia, o algunas como la filial portuguesa ha ido ganando tamaño.
Mientras, Inmo Alameda sigue alcanzando cifras récord. Esta cerró 2022 con un patrimonio neto de 8.307 millones, un 8% más, tras un beneficio 691,7 millones, un 7,3% superior al de 2021. De esa cantidad, 361,8 millones corresponden a la sociedad dominante, es decir, a la parte que está bajo la propiedad de Juan Roig.
El empresario vuelve a invertir en cotizadas
Durante el ejercicio 2022, Inmo Alameda recuperó la inversión en empresas cotizadas, como parte de su estrategia de inversión financiera. Como reflejan sus cuentas anuales, la compañía destinó un total de 9,35 millones de euros para adquisiciones de participaciones minoritarias, una partida que dejó a cero en el ejercicio anterior. Inmo Alameda valora en 26,6 millones su inversión en cotizadas, un 14% menos que en 2021. Esas participaciones minoritarias, explica la memoria, experimentaron disminuciones en su valor razonable por un importe de 7,45 millones.
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