Libros contables obligatorios en las pymes
Las empresas tendrán que disponer de un libro de inventarios y de cuentas anuales y de un libro diario
Las pequeñas y medianas empresas (pymes) deben disponer de libros contables. La norma mercantil les exige disponer de un libro de inventarios y de cuentas anuales y de un libro diario.
Por un lado, el libro de inventarios y cuentas anuales se abrirá con el balance inicial detallado de la empresa. La empresa trimestralmente tendrá que transcribir con sumas y saldos los balances de comprobación. Se transcribirán también el inventario de cierre de ejercicio y las cuentas anuales.
Por su parte, en el libro diario se registrará día a día todas las operaciones relativas a la actividad de la empresa. Será válida, sin embargo, la anotación conjunta de los totales de las operaciones por períodos no superiores al trimestre, a condición de que su detalle aparezca en otros libros o registros concordantes.
Presentar los libros en el Registro Mercantil
De acuerdo con el Código de Comercio los empresarios tendrán que presentar los libros que obligatoriamente deben llevar en el Registro Mercantil del lugar donde tengan su domicilio.
En ese sentido, tendrán que hacer los asientos y anotaciones por cualquier procedimiento sobre hojas que posteriormente tendrán que ser encuadernadas de manera correlativa con el fin de se formen los libros obligatorios y deben legalizarse antes de que transcurran los cuatro meses siguientes a la fecha de cierre del ejercicio.
Una vez se produzca el cierre del ejercicio el empresario tendrá que formalizar las cuentas anuales de la empresa y estas tendrán que redactarse con claridad y deberán mostrar una imagen fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los resultados de la empresa.
Hay que tener en cuenta que las cuentas anuales deben estar formadas por el balance, en el que figurarán de forma separada el activo, el pasivo y el patrimonio neto; la cuenta de pérdidas y ganancias, que recogerá el resultado del ejercicio, separando debidamente los ingresos y los gastos imputables al mismo; el estado que refleje los cambios en el patrimonio neto del ejercicio; el estado de flujos de efectivo, que pondrá de manifiesto, debidamente ordenados y agrupados por categorías o tipos de actividades, los cobros y los pagos realizados por la empresa y la memoria, que completará, ampliará y comentará la información contenida en los otros documentos que integran las cuentas anuales.