Los acreedores de Pronovias pactan inyectar 100 millones para reflotar el grupo
Bain y MV Credit tratarán de poner en marcha un plan de negocio para reflotar la compañía
Bain y MV Credit, los dos fondos que lideran el sindicato de acreedores de Pronovias, tienen un plan para reflotar la compañía. Han pactado inyectar 100 millones en la compañía con el objetivo de poner en marcha un plan de negocio que reflote el grupo.
Los acreedores de Pronovias han atendido el SOS que envió su hasta ahora accionista, BC Partners. A cambio, ha tenido que ceder sus acciones a los acreedores para conformarse con una participación minoritaria.
Tras la operación, la empresa reducirá su deuda en un 68%, hasta 125 millones de euros. Y los vencimientos del pasivo que queda se prolongarán para que la compañía tenga tiempo de acometer un giro estratégico. Kirkland & Ellis ha asesorado a Pronovias, mientras que Houlihan Lokey y Latham & Watkins ha trabajado de la mano de los fondos.
El objetivo del plan es que Pronovias logre aprovechar la resurrección de las bodas. Y que los ingresos crezcan un 40% interanual. Bajo la batuta de BC Partners, la compañía puso el foco en crecer en EE UU y adquirió en 2018 la firma italiana Nicole y en 2019 la holandesa Lady Bird.
Desde que BC Partners compró Pronovias nada le ha salido bien con la histórica compañía catalana. Adquirió la firma al empresario catalán Alberto Palatchi por 550 millones, pero la pandemia cambió el rumbo de la inversión. Con el negocio de las bodas prácticamente a cero durante dos años, el fondo se vio obligado a respaldar a la compañía con varias inyecciones de capital.
En octubre, Bain Capital, el principal acreedor de Pronovias, ya inyectó 15 millones de euros en la compañía a través de un préstamo concedido con un descuento de hasta el 30%, según detalla Bloomberg. También este año fue la propia BC Parnters la que aportó ocho millones en la compañía.
La semana pasada la agencia Bloomberg publicó que BC Partners negociaba con los acreedores un nuevo rescate a la compañía. En este caso, penalizada por las subidas de los tipos de interés y el incremento en el coste de la deuda. Pese a que se ve obligada a ceder el capital de la compañía por cero euros, lo cierto es que el fondo británico de capital riesgo ha podido recuperar parcialmente su inversión a través de dividendos. Solo en 2018 se embolsó un macrodividendo de 141 millones y trasladó a la compañía la deuda con la que la adquirió.