Luciano Poyato: “Los proyectos subvencionados tienen como objetivo acabar con la pobreza”

Si todas las empresas marcasen la Casilla Empresa Solidaria (CES) en el impuesto de sociedades, se recaudarían en torno a 186 millones de euros

Luciano Poyato nació en Cartagena (Murcia). La situación de conflicto social que se vivía en su barrio por el consumo de heroína le marcó para entender la importancia de la colaboración y solidaridad ciudadana. Llegó a ser presidente de la red de atención a las adicciones UNAD, ya en Madrid. En 2012, se crea la Plataforma del Tercer Sector, de la que hoy Poyato es el presidente. Una organización de ámbito estatal que defiende los derechos e intereses sociales de la ciudadanía, especialmente de las personas en situación de pobreza o riesgo de exclusión. Diez años después cuentan con la Casilla Empresa Solidaria (CES) en el impuesto de sociedades para financiar sus proyectos por una sociedad más “justa e igualitaria”. La CES se podrá marcar hasta el 25 de julio.

R. ¿Cuál es el valor de la Casilla Empresa Solidaria?

R. El objetivo principal es canalizar la solidaridad empresarial de una forma sencilla, eficaz y eficiente. Con esta iniciativa pretendemos que las empresas se involucren en la búsqueda de una sociedad más justa e igualitaria. La casilla consiste en aplicar un 0,7% de la recaudación del impuesto de sociedades. Es decir, cualquier empresa puede marcar el 0,7% de la base imponible del impuesto de sociedades. Esto no tiene ningún coste para la empresa.

R. ¿A qué se destina lo recaudado?

R. Los proyectos subvencionados tienen como finalidad acabar con la pobreza, las desigualdades y la exclusión social. En especial, en colectivos en situación de vulnerabilidad en nuestro país. Los proyectos han ido destinados a financiar iniciativas sociales, de medio ambiente y sobre todo a garantizar los derechos de la ciudadanía. Entre muchos ámbitos tratamos temas ecosociales, promoción de la salud, de la vida independiente, de la inclusión, formación, reinserción laboral, prevención de la delincuencia, atención a las personas con problemas de adicciones, proyectos de igualdad de género, entre muchos otros.

R. ¿Cuáles son las expectativas para la recaudación del último ejercicio?

R. La expectativa es que poco a poco los empresarios sepan que existe esta posibilidad, lo ideal es que cada vez sean más las empresas que marquen esta casilla. Las cifras del año 2019 fueron de 33 millones de euros y en 2020, de 36,3 millones de euros, y el objetivo es que cada vez más empresas pudieran marcar esta equis. Si todas las empresas marcasen la Casilla Empresa Solidaria, la recaudación estaría más o menos en 186 millones de euros. Pero lo importante de esta campaña es que las empresas sepan que pueden marcar esta casilla.

La CES recaudó en 2020 cerca de 36,3 millones de euros de los 186 millones posibles

R. ¿Cree que las empresas son conscientes de lo que supone marcar la casilla en el impuesto de sociedades?

R. Creo que no, hace falta mucha más información. La campaña tiene ese objetivo, que las empresas conozcan la casilla y sepan que pueden marcarla. En el caso de esta casilla necesitamos una mayor información y concienciación. La campaña está diseñada para repercutir en redes sociales y se está usando la figura de embajadores que ya han marcado en otra ocasión esta equis, para que conciencien a otras empresas para hacerlo. En la presentación de la campaña el pasado miércoles, CEOE, Cepyme, Ceaje, ATA o Cepes, tanto organizaciones representativas de lo empresarial y de la economía social, expusieron en escena lo que supone esta casilla.

R. Respecto al impuesto de las eléctricas anunciado por el Gobierno, con el fin de hacerlas solidarias con la situación económica, ¿cree que las empresas españolas son solidarias?

R. Yo creo que la mayoría de empresas de este país van creciendo en solidaridad, porque se muestran preocupadas por el empleo y por generarlo y además se muestran preocupadas por lo que ocurre socialmente. Hay muchas empresas que lo han demostrado en la pandemia, se han mostrado preo­cupadas por problemas sociales que hemos tenido. Una cosa es el impuesto de las eléctricas para que la ciudadanía pueda abaratar los costes y otra cosa distinta, que no podemos decir, es que las empresas no sean solidarias en general.

R. ¿Qué otra vía de recaudación tiene la Plataforma Tercer Sector?

R. Fundamentalmente se nutre de fondos privados, a través de donaciones, también de subvenciones, de servicios que hace a las entidades públicas, sobre todo en las comunidades autónomas. Hay una parte que viene de fondos privados y otra de la Administración pública.

R. ¿Qué acogida tuvo la Casilla Empresa Solidaria por parte de los sindicatos?

R. Los sindicatos lo apoyan y lo conocen. Los sindicatos lo deberían conocer más, porque reitero, este tema está muy desconocido (Casilla Empresa Solidaria). Pero los grandes líderes del sector sindical lo conocen.

España también está formada por autónomos que generan producción y empleo

R. ¿Qué papel desempeñan los ­autónomos?

R. Los autónomos, muchísimo. Hay que tener presente que este país no solo está formado por grandes y medianas empresas. También está formado por autónomos que generan producción y empleo. Además, si han tenido beneficio y pueden marcar esta casilla, serán muy solidarios. Ahora estamos haciendo la recaudación de 2022 respecto al año anterior.

R. ¿Cómo se gestiona la recaudación?

R. Eso no lo recaudamos nosotros, el dinero va a Hacienda y le hace una transferencia al ministerio correspondiente, que es el ministerio de Derechos Sociales. De ahí sacan una convocatoria con carácter competitivo para las entidades del tercer sector.

R. ¿Fue complicado en 2018 conseguir la creación y aprobación de la casilla?

R. Llevábamos un año y pico diciendo que necesitábamos financiación y con el ministerio de Hacienda conseguimos la Casilla Empresa Solidaria. La casilla es independiente al partido político, está legislada y estoy convencido de que todos los partidos con representación parlamentaria la apoyan.