La mitad de los contratos firmados en 2022 siguen activos, un éxito anticipado de la reforma laboral
Los trabajadores fijos pasan del 70% del stock total al 75% en tres meses
De todos los datos conocidos ayer sobre el comportamiento del mercado laboral en marzo, los más relevantes fueron, sin duda, algunos efectos que ya ha empezado a tener la reforma laboral –vigente parcialmente desde el 31 de diciembre pasado y plenamente desde el pasado 31 de marzo–. Precisamente, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, destacó ayer que la reforma laboral aprobada con el acuerdo de los agentes sociales ya está permitiendo “mejorar sustancialmente” la creación de empleo y está reduciendo de “manera histórica” la precariedad del mercado laboral, que es uno de los elementos “más lesivos” y que “más debilita” la productividad del país.
Desde luego la cifra de firma de nuevos contratos indefinidos es una muestra incontestable del éxito anticipado de estos cambios legales, sobre todo porque no han entrado plenamente en vigor hasta la semana pasada. Pero ya durante todo el mes de marzo la contratación fija se ha vuelto a disparar por tercer mes consecutivo. Esta vez se han firmado en un solo mes 516.000 contratos indefinidos, lo que ha supuesto que prácticamente uno de cada tres nuevos contratos del mes pasado (el 30,7%) fue fijo, tras el 20% (también inédito) alcanzado en febrero.
Así, en la actualidad hay casi un millón de nuevos contratos fijos más que hace un año. Esto ha supuesto modificar el reparto del stock de empleos fijos y temporales del mercado en solo tres meses. En este tiempo se ha pasado de tener un 70% de trabajadores indefinidos y un 30% de temporales a un 75% de fijos y un 25% de eventuales.
Junto a este cambio, es significativo que la anticipación de las nuevas limitaciones a la contratación temporal, junto a la penalización de los contratos de menos de un mes de duración (una sobrecotización de 27,53 euros por cada uno de estos contratos), hayan prolongado ya la vida media de los contratos y atajado algo la elevada rotación del mercado.
Eso se observa en varios datos conocidos ayer. En primer lugar, a finales de marzo, la mitad de los contratos firmados en este primer trimestre (50%) seguían activos, frente a un porcentaje del 10% de contratos que tras el primer trimestre continuaban vivos habitualmente en el mercado español.
El segundo de estos datos es que la duración media de todos los contratos que se firmaron entre enero y marzo este año fue de 11,4 días, frente a los 9,2 días de media en los primeros trimestres de 2017-2019.
Igualmente, en los primeros trimestres completos de este mismo periodo los contratos de un solo día de duración representaban el 31,8% de todos los nuevos firmados entre el 1 de enero y el final de marzo, pero este porcentaje se ha recortado al 13,1% este año. De idéntica manera, los contratos de entre 2 y 7 días representaban el 30.7% de los nuevos en los primeros trimestre de entre 2017-2019, frente al 17,3% que ha representado en lo que va de año.
En otro orden de cosas, el secretario de Estado de Seguridad Social, Israel Arroyo, avanzó ayer que la reforma del sistema de cotización de los autónomos “en ningún caso se hará por decreto” sino que se pactará con los agentes sociales. Para ello, el Gobierno se muestra dispuesto a hacer más suave la adaptación durante los nueve años de transición que se han pactado. Asimismo confirmó que las pensiones se revalorizarán con el IPC medio anual pese a la elevada inflación.