Los bancos occidentales se enfrentan a un triple golpe de riesgos
Les afecta el deterioro económico general, la exposición a firmas rusas y el riesgo para sus filiales de allí
Los ejecutivos occidentales vieron con horror cómo los tanques rusos entraban en Ucrania el jueves. Jefes de bancos como Frédéric Oudéa, de Société Générale, y Andrea Orcel, de Unicredit, tienen más que temer que la mayoría. La caída del 8% del índice Stoxx Euro 600 Banks del jueves y el descenso del 3% de las acciones de bancos estadounidenses como JP Morgan reflejan un triple golpe de riesgos.
Las ventas se deben en parte a un panorama económico más sombrío. Un conflicto prolongado podría hacer subir los pr ecios de la energía y los alimentos, mermar la confianza de los consumidores y frenar el ritmo de las subidas de tipos de los bancos centrales.
Los precios del mercado monetario sugieren que los inversores piensan ahora que es menos probable que la Reserva Federal de Estados Unidos suba los tipos de interés oficiales en 50 puntos básicos en marzo. Los retrasos pospondrían una ganancia inesperada para los bancos occidentales, cuyos márgenes de crédito mejoran con los tipos de interés más altos.
Las sanciones suponen un problema adicional. Los bancos de Italia, Francia y Austria tenían 68.000 millones de dólares de exposición combinada a Rusia en septiembre de 2021, casi cinco veces el total de los estadounidenses, según datos del Banco de Pagos Internacionales.
Gran parte de esa cantidad son préstamos transfronterizos a grandes empresas rusas. Si las dificultades económicas internas aumentan o el valor del rublo se desploma, los prestatarios rusos podrían tener dificultades para devolver los créditos. La exclusión de Rusia de la red bancaria Swift podría dificultar el cobro de intereses por parte de bancos como Unicredit y SocGen. El grupo francés tenía 3.000 millones de euros de exposición a grandes empresas rusas a finales de 2020, según datos de la Autoridad Bancaria Europea, mientras que su rival italiano tiene unos 5.000 millones de euros de préstamos rusos transfronterizos. Los bancos ya están aumentando sus provisiones contra posibles impagos, según un alto directivo de banca.
Un último riesgo afecta a las filiales rusas de los bancos occidentales. La unidad local de Raiffeisen, por ejemplo, aportó un tercio de los beneficios de su matriz el año pasado. Estos negocios se enfrentarían a fuertes pérdidas si la economía se hunde.
También existe el peligro de que las autoridades rusas respondan a las sanciones occidentales sobre bancos como Sberbank y VTB confiscando entidades de propiedad extranjera en su país. En el peor de los casos, cuando los prestamistas tuvieran que amortizar el capital de sus filiales rusas, el coeficiente de capital común de nivel 1 de Raiffeisen se reduciría en un punto porcentual, calculan los analistas de JP Morgan. El golpe equivalente para Unicredit sería como máximo de 40 puntos básicos. Estos escenarios son lejanos ahora mismo. Pero es claramente suficiente para mantener a los inversores en alerta.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías