Cuando el banco tradicional también quiere ser neobanco
BBVA pretende crecer en Europa a través de una plataforma, con el gancho de regalar dinero. Esta vía la inventó hace más de 20 años ING y fue muy criticado
Esta visto que nadie puede decir de esta agua no beberé. Cuando desembarcó ING en España, en 1999, el banco de origen holandés revolucionó el sistema bancario. Llegó al país sin mochilas costosas y con una oferta bancaria sencilla y con premios. Era el primer banco extranjero que llegó a España sin oficinas para operar por teléfono y por internet. Como gancho ofrecía altas remuneraciones por los ahorros depositados por los clientes, y carecía de comisiones.
Su fórmula le hizo crecer como la espuma en poco tiempo y sin atadura de costes de gestión. No tenía oficinas ni cajeros automáticos propios y su plantilla era pequeña. Su fórmula fue criticada por todos los bancos tradicionales. Incluso le calificaron de banco parásito para el sistema.
Ahora, ING ya no ofrece esas altas remuneraciones que le hicieron triunfar hasta no hace mucho tiempo y se ha visto en la necesidad de incluir el cobro de comisiones en sus servicios para mejorar sus ingresos ante los bajos tipos de interés imperantes desde marzo de 2016 en el mercado por la política para reactivar la economía del Banco Central Europeo. Ahora, 22 años después de entrar en España, la banca comienza a imitar su fórmula para desembarcar en otros países.
Este es ahora el caso de BBVA, uno de los bancos que más criticó el modelo de ING, pero claro, eran otros tiempos. También ha criticado, como el resto del sector, la entrada de los neobancos en su negocio con reglas de juego más laxas, según dicen.
BBVA anunció el jueves su apuesta por desarrollar su modelo de banca minorista en Italia. Eso sí, sin oficinas, sin cajeros y con una plantilla de solo 100 personas. Y cómo no, con una agresiva oferta comercial para captar clientes. Desembarca con un banco móvil que ofrece hasta 180 euros por cliente si se cumplen una serie de requisitos. El objetivo de BBVA es extender este modelo a otros países de Europa y puede que a otros continentes, ¿por qué no? Es una fórmula barata y cada vez más popular y que cuenta con todo el apoyo de los supervisores, que insisten en el cierre de más oficinas y el recorte de costes para que la banca gane rentabilidad.
Por cierto, no es casualidad que BBVA eligiera Italia para inaugurar su nueva estrategia de crecer en Europa en banca minorista. En 2005 intentó la compra de BNL, pero tras una dura batalla, el entonces presidente de la entidad española, Francisco González, no tuvo más remedio que darse por vencido y abandonar su objetivo.
Respuesta de Dancausa sobre los ERE: “No estoy de acuerdo en que las personas tengan que ir en consonancia con las cuentas de resultados”
Solo un apunte en favor de la nueva estrategia de BBVA. En el año 2000, el banco, entonces presidido por González, constituyó el primer banco online de España y casi de Europa, Uno-e. En un principio, Uno-e estaba participado por BBVA y Terra, aunque en 2006 el gigante bancario español se convirtió en su único accionista tras la salida de Telefónica.
Antes que BBVA, otra entidad española, Banco Sabadell, ya puso en marcha esta forma de hacer banca en México en 2016. Creó un banco online con ofertas comerciales agresivas que mantiene.
Y mientras BBVA avanza en su conquista europea, con un banco sin oficinas, el sector sigue con su jibarización en España. CaixaBank, Sabadell, Ibercaja y BBVA ya han aprobado sus planes de ajuste de sucursales y plantilla. Ahora le toca el turno a Unicaja, que en estos momentos negocia con los sindicatos su reestructuración.
Pero los cierres no acabarán una vez que Unicaja llegue a un acuerdo con su plantilla. Todos los expertos, supervisores e incluso los propios bancos no descartan tener que llevar a cabo más ajustes en un futuro no muy lejano.
Solo Bankinter mantiene desde hace décadas una política laboral estable. No ha aplicado ningún expediente de regulación de empleo (ERE) ni cierre de red pese a las adversidades. Y mantendrá esta estrategia, según ha reiterado nuevamente su consejera delegada, María Dolores Dancausa.
Su primera ejecutiva no solo lo tiene muy claro, sino que ni entiende ni comparte los procesos de ajustes que se están llevando a cabo en el sector, nada contracorriente, y pese a ello, Bankinter es el banco más rentable de los que cotizan en el Ibex. Su ROE es del 9,4%, cerca ya al coste de capital.
“Efectivamente, Bankinter es la única entidad que no está metida en procesos de reducción de plantilla, todo lo contrario. A lo largo de estos 10 últimos años, el banco ha ido creando empleo y creciendo en plantilla. Nosotros no crecimos en exceso ni en oficinas ni en número de empleados en tiempos de bonanza y, consecuentemente, no hemos tenido que hacer esas reducciones… De todas maneras, yo tampoco estoy muy de acuerdo en que las personas tengan que ir en consonancia con que un año la cuenta de resultados vaya mal y entonces haya que despedir a unas cuantas. Yo creo que el empleo es algo fundamental, es un tesoro cuyo valor va más allá de la mera retribución de la persona. Y por tanto, hay que tener mucho cuidado. La pérdida de empleo es un drama y eso hay que tenerlo muy en cuenta. Nosotros estamos orgullosos de seguir creciendo y queremos seguir haciéndolo. Nuestra cuenta la hacemos por la parte de los ingresos, tratando de ser más eficientes, pero a la vez contando con todos los empleados”, declaró Dancausa el miércoles en la presentación de resultados del banco de los nueve primeros meses del año, y en el que la entidad presentó un beneficio de 1.250 millones de euros por las plusvalías de Línea Directa. Pero espera llegar a unas ganancias de 550 millones en 2023 sin distorsiones por los atípicos, y sin contar con los ingresos de ya su exaseguradora.
Un último apunte. La guerra por captar banqueros para gestionar grandes fortunas está en su punto álgido. El hecho de que UBS quiera abandonar en breve su actividad de grandes patrimonios en España ha activado nuevamente la palanca de los fichajes. La salida de un grupo destacado de directivos de Credit Suisse en España también ha contribuido a agitar estas aguas tras el verano. Habrá que ver cuál es el desenlace, los ganadores y los perdedores.
De momento, eso sí, este negocio sigue siendo uno de los más rentables del sector financiero, de ahí estos movimientos, que incluyen, incluso, la creación de nuevas marcas.