Santander sería el banco que destruiría menos capital en una gran crisis
Bankinter y Kutxabank se sitúan como los más solventes de España, con ratios por encima del 11%
Los grupos bancarios españoles que han participado en los ejercicios de estrés llevados a cabo por la Autoridad Bancaria Europea (EBA en sus siglas en inglés –en cooperación con el Banco Central Europeo (BCE) y la Junta Europea de Riesgo Sistémico (JERS)–, Santander, BBVA, Sabadell y Bankinter “muestran resistencia, con niveles de capital satisfactorios en el escenario adverso, a pesar de la mayor severidad de este escenario”, señala el Banco de España en su comunicado.
Los cuatro bancos superan así el examen de solvencia incluso en el escenario económico más adverso, pero consumirían más de 29.000 millones de capital en apenas tres años (hasta 2023). Pese a todo, con la excepción de Bankinter, Santander, BBVA y Sabadell (el peor parado de los cuatro) quedarían a finales de 2023 con un ratio de capital de máxima calidad por debajo de la media europea, que sería del 10,2%.
En el escenario más severo que abarca tres años hasta 2023, que provocó una prolongada secuela de Covid, el índice básico agregado de capital a activos ponderados por riesgo se redujo en casi 500 puntos básicos, lo que empujó el índice a un 10,2% desde un 15%. En conjunto, los 50 bancos europeos analizados , y que representan el 70% del sector, verían caer su capital de máxima calidad CET1 fully loaded del 15,01 al 10,16% en el año 2023 bajo un escenario de crisis agravada, con una pérdida de 4,85 puntos porcentuales o equivalente a ver diluidos sus recursos propios en 265.000 millones por absorción de pérdidas.
Estas pruebas han sido claves para que el BCE levante el veto al dividendo, vigente desde que se inició la pandemia a finales de marzo de 2020, y para exigir más o menos colchón de capital a los bancos de forma individual.
En el escenario adverso en 2023 Santander tendría un ratio de capital CET1 fully loaded, el de máxima calidad, del 9,31% (-2,58%), con una destrucción de capital de unos 14.319 millones. Pese a ello, el banco que preside Ana Botín es el más resistente de todos los grandes bancos de Europa, pues es el que menos capital destruye en el periodo de tres años del escenario adverso en porcentaje.
En el caso de BBVA su ratio CET1 fully loaded al cierre de 2023 rebajaría su solvencia en un 3,03%, hasta el 8,69%, con un consumo de capital de 10.695 millones de euros.
Aunque los dos gigantes españoles acaben con una nota inferior a la media de la banca europea, los test constatan que su diversificación geográfica y su modelo de negocio les permite aguantar mejor las crisis, con un consumo de capital más bajo que Nordea (3,69) BNP Paribas (4,40), ING (4,43), Intesa Sanpaolo (4,66), Commerzbank (5,02), Société Générale (5,62), Unicredit (5,92), Deutsche Bank (6,20) y Crédit Agricole (6,34). Tanto Santander como BBVA son los dos bancos más resistentes de Europa ante una recesión económica.
Sabadell es el peor parado en estos test entre los bancos españoles. Su ratio CET 1 fully loaded a 31 de diciembre de 2023 descendería en el escenario adverso en 548 puntos básicos, hasta el 6,54%, que en cifras absolutas suma 4.220 millones de euros. Los expertos explican que Sabadell es uno de los bancos más penalizados por su peso del 25% de su balance en Reino Unido, país que junto a España ha sido el que ha contado con los escenarios macro más duros, como consecuencia del Brexit.
Bankinter es el banco español con menor capital depreciado en del ejercicio dentro de los cuatro grandes españoles analizados por la EBA y el tercero de la muestra del total bancos europeos participantes en el ejercicio, explica la propia entidad. Consumiría 104 puntos básicos y se quedaría con un ratio del 11,25%, lo que supone perder solo 346 millones de euros, y queda por encima de la media europea.
Pese a la buena nota de Bankinter, en general, los bancos europeos más enfocados en el mercado nacional sufrirían mayores impactos en el capital en la prueba en comparación con sus homólogos transfronterizos.
Fuera de este análisis se encuentra CaixaBank, que ha quedado exento al haber estado inmerso en un proceso de fusión desde septiembre de 2020 hasta el pasado mes de marzo.
Los bancos españoles han tenido que hacer frente a un hipotético escenario en el que el PIB español caería el 0,9% en 2021, ahondaría en la recesión en 2022 con un retroceso del 2,8%, para crecer un 0,5% en 2023, frente a la previsión de que la economía avance un 6,8% en 2021, un 4,2% en 2022 y un 1,7% en 2023 España, por su dependencia del turismo que ha caído a consecuencia del Covid, Reino Unidos, por el Brexit, y Perú, son los tres países más penalizados en los escenarios macro diseñados por los supervisores europeos en estos test de estrés.
Banca mediana
El resto de los bancos españoles supervisados por el BCE también han llevado a cabo estas pruebas, pero ha sido el banco central quien les ha examinado. Kutxabank vuelve a situarse como el banco más solvente de España. Superaría a Bankinter, aunque en este caso el BCE solo da rangos, por lo que no concreta el capital que consumen estos bancos medianos. o del resto de los bancos medianos. Así, KutxaBank parte de un ratio del 17,44% y se quedaría en el escenario adverso en el peor de los casos por encima del 11,4%, en concreto (el BCE concreta que entre un máximo del 14% y un mínimo del 11%).
El ratio de la banca española se diluiría en 2,90%, hasta el 8,95%, quedando por encima de la irlandesa (8,44% y con un impacto de 6,07 puntos porcentuales), de la italiana (que restaría un 5,59% y bajaría al 8,60%) y de la alemana, cuyo ratio se situaría en el 8,78% y perdería 5,58 puntos porcentuales.
A diferencia de otros exámenes aquí la EBA no plantea suspensos ni aprobados, pero sí publica una lista los mejores y peores posicionados en varios rankings.
En el caso de las 89 entidades supervisadas directamente por el BCE, estas alcanzarían un 9,9% de ratio CET1 fully loaded al final del ejercicio en el escenario adverso, lo que representaría un impacto medio de 5,2 puntos porcentuales.
En este grupo, además de Kutxabank, están Abanca, que tras partir de un ratio de solvencia del 12,9% en 2020 se colocaría en un rango del 8% al 11% en el escenario adverso de 2023. Ibercaja, con un ratio CET! fully loaded de partida del 12,60%, sufriría un impacto en su capital en el peor de los escenarios de un 3,60%, para situar su rango del 8 al 11%.
En el caso del Banco de Crédito Cooperativo (Cajamar), que parte de un ratio de capital de máxima calidad del 13%, sufriría un impacto superior a 5 puntos porcentuales.
Otras claves de las pruebas de resistencia
Solvencia. La solvencia de partida de los bancos de la Unión Europea en esta prueba es superior a la de ejercicios anteriores, lo que refleja el continuo reforzamiento de su posición de capital, explica el Banco de España en su comunicado con los datos de la EBA.
Test. El ejercicio de estrés cubre un horizonte temporal de tres años (2021-2023), y utiliza el balance estático de cada entidad a 31 de diciembre de 2020 como punto de partida, sin considerar estrategias de negocio ni acciones de gestión posteriores a esa fecha.
Desde 2009. Este ejercicio de estrés a la banca es el séptimo que realiza la EBA desde 2009.
Sin nota. El BCE publica por primera vez información individual de los 51 bancos que no forman parte del ejercicio de la EBA por sus siglas en inglés. El BCE ha informado de que la prueba de resistencia no es un ejercicio que se aprueba o se suspende, ni se fija un umbral que marque si los bancos lo superan o no. Pero “sus resultados formarán parte del diálogo supervisor continuado”.