Deliveroo abandona España antes de la entrada en vigor de la ley de 'riders'
Asegura que alcanzar una buena posición de mercado requeriría un nivel de inversión muy elevado con "un potencial muy incierto a largo plazo" que podría afectar a la viabilidad del proyecto
Deliveroo, la plataforma británica de reparto de comida a domicilio, abandona España. La compañía ha anunciado este viernes, cuando faltan pocos días para la entrada en vigor de la nueva ley de riders, su intención de cesar su actividad en el país. Argumenta dificultades para la viabilidad de su negocio en el país, tras no alcanzar el rendimiento esperado. La empresa asegura que tiene 113 de empleados en España, que colabora con unos 3.800 riders y 9.000 restaurantes en 70 ciudades.
La compañía, que ya reconoció el pasado marzo durante su salida a Bolsa que podría salir de España por los riesgos regulatorios, ha emitido esta mañana una nota en la que comunica su intención de realizar una consulta a sus empleados, riders afectados e instituciones sobre el cese de sus operaciones en el país. Un mero formalismo previo al cese de su actividad en España, puesto que la decisión ya está tomada según confirman varias fuentes.
Deliveroo explica que actualmente opera en 12 mercados de todo el mundo, y la gran mayoría del valor bruto de las transacciones (GTV) de la empresa procede de mercados en los que Deliveroo ocupa la primera o segunda posición. En España, donde compite con Glovo, Uber Eats y Just Eat, la compañía ocupa el tercer o cuarto puesto, dependiendo de las ciudades. Un puesto insuficiente para mantener los márgenes.
La plataforma de delivery, participada por Amazon, detalla que España representó menos del 2% del GTV de Deliveroo en el primer semestre de 2021." La compañía ha llegado a la conclusión de que alcanzar y mantener una posición de mercado de primer nivel en España requeriría un nivel de inversión muy elevado con un rendimiento potencial muy incierto a largo plazo que podría afectar a la viabilidad económica del mercado para la empresa", indica en el comunicado.
La nueva ley, un factor determinante
Aunque en su nota Deliveroo no habla de la ley de riders, el cambio que esta acarrearía en su operativa parece determinante en la decisión de la multinacional, pues desde el sector siempre se ha indicado que la nueva normativa va a elevar los costes de las empresas de delivery, al tener que contratar directamente a los repartidos o subcontratar flotas de riders a terceras empresas. Deliveroo, de hecho, había estado negociando acuerdos con algunas compañías de reparto de última milla, según explicaron a este periódico el pasado mayo fuentes conocedoras.
Desde la compañía explican que España es el único país de Europa donde se ha hecho una reclasificación laboral de los riders. Según detallan, en Reino Unido no hay ninguna ley específica para estos trabajadores; en Bélgica y Holanda existe un debate, pero de momento no se ha legislado; en Francia hay una consulta abierta para dar más protección a los repartidores pero no contemplan su reclasificación, y en Italia hay un tipo de regulación que reconoce a los riders como autónomos.
"La propuesta de poner fin a las operaciones en España refleja la intención de la empresa de centrar las inversiones y los recursos en los demás mercados en los que opera, continuando con el crecimiento de su red de consumidores, de socios de restaurantes y supermercados, así como de riders, y ampliando su cuota de mercado tanto en nuevas ciudades como en ciudades en las que ya desarrolla su actividad", remarcan desde Deliveroo.
Deliveroo, fundada por William Shu en 2012, prevé que el proceso de consulta colectiva comience a principios de septiembre y asegura que trabajará con todas las partes interesadas y preparará toda la documentación necesaria para ello.
"En caso de que la empresa decida poner fin a sus operaciones tras la conclusión del proceso de consulta, que durará aproximadamente un mes, la empresa se asegurará de que los riders y los empleados dispongan de un adecuado paquete de compensación que cumpla con todas las normativas y la legislación local", añade.
Presión de los sindicatos
Tras conocerse la noticia, CC OO ha emitido un comunicado en el que reclama que el impacto en términos laborales sobre las personas que prestan servicio en Deliveroo, "en su gran mayoría como riders bajo la figura de falso autónomo", se afronte con "plenas garantías, reconociendo su estatus laboral como han señalado múltiples actas de Inspección de Trabajo y sentencias de los tribunales españoles".
El sindicato, que ya ejerció como asesor de los trabajadores en el ERE ejecutado en esta empresa en 2020, se ha puesto a disposición de la plantilla afectada de cara al periodo de consulta, "que entendemos como el periodo de consultas preceptivo de un procedimiento de despido colectivo (ERE)".
La plataforma aclara que esta propuesta no afecta a las orientaciones para todo el año comunicadas anteriormente sobre el crecimiento anual del GTV del grupo y sobre el margen bruto de beneficio.
“La decisión de plantear el cese de nuestras operaciones en España no ha sido tomada a la ligera. Queremos dar las gracias a todos los restaurantes que han trabajado con Deliveroo en España, así como a nuestros apreciados clientes. Mostramos un especial agradecimiento a los miles de riders, excepcionales y siempre voluntariosos, que han escogido trabajar con Deliveroo, así como a nuestros empleados, llenos de talento y totalmente comprometidos. Todos recibirán apoyo durante el periodo de consulta”, señala Hadi Moussa, Chief Business Officer Internacional de Deliveroo.
El negocio de Deliveroo en España se desconoce, ya que la compañía no presenta cuentas en el Registro Mercantil desde 2016. En 2020, el grupo inyectó 5,1 millones de euros para financiar sus operaciones. La empresa sufrió un duro revés cuando el pasado mayo el Tribunal Supremo avaló que sus riders son falsos autónomos y rechazara a trámite su recurso sobre un caso que afectaba a 532 repartidores de Madrid.
Los rivales pelearán por su negocio
La salida de la compañía de España beneficiará a sus rivales, que tratarán de hacerse con su cuota de mercado con el fin de mejorar sus márgenes. El sector del delivery se ha visto impulsado durante la pandemia, llevando comida de restaurantes a domicilios. Shu reconoció el pasado marzo que la crisis sanitaria había dado un gran impulso al sector de la entrega de comida a domicilio. "Hemos visto un fuerte comienzo de 2021 y solo estamos en el comienzo de un viaje emocionante en un mercado de entrega de comida a domicilio todavía incipiente, en rápido crecimiento y lleno de oportunidades". El viaje, sin embargo, de Deliveroo en España parece que acabará antes de que finalice este año.
El anuncio de Deliveroo se produce apenas dos días después de que Glovo anunciara cómo planea ajustarse a la nueva ley de riders. La plataforma española desveló este miércoles que renuncia a subcontratar flotas de reparto. Por contra, contratará directamente a 2.000 repartidores antes de que acabe el año y lanzará un modelo "inédito" con autónomos que "cumplirá" los criterios que establece la normativa y los tribunales.
Según indicó a CincoDías Diego Nouet Delgado, director de Glovo para España y Portugal, este modelo tendrá nuevas características para cumplir con los criterios de ajenidad y dependencia del Estatuto de los Trabajadores, y permitirá simultanear otras aplicaciones y actividades “con total flexibilidad, autonomía e independencia”.
Aunque la compañía no quiso desvelar todas las novedades que incluirá este nuevo modelo con autónomos, sí avanzó algunas como la libre conexión (el autónomo podrá decidir qué día y a qué hora se conecta a la plataforma), la capacidad de establecer sus propios precios y de subcontratar la entrega de pedidos, y la total independencia del rider a la hora de coger o no un servicio, sin penalización. El modelo elimirá el sistema de puntuación que Glovo usaba para primar a unos repartidos frente a otros.
CC OO: Glovo desobedece la ley
Pese a lo defendido por Glovo, CC OO se ha mostrado hoy también preocupada por la decisión de esta compañía y ha reclamado al Gobierno una "especial implicación" con el cumplimiento y despliegue del Real Decreto-ley 9/2021 del 11 de mayo, conocido como Ley Rider, "por el que modifica el Estatuto de los Trabajadores para garantizar los derechos laborales de las personas dedicadas al reparto en el ámbito de plataformas digitales".
El sindicato critica a la plataforma española "ante su intención de desobeder la ley y seguir operando sin garantizar la laboralidad y, por tanto, sin respetar los derechos tanto individuales como colectivos de una mayoría de sus repartidores". CC OO señala que la propuesta de Glovo "contrasta con el posicionamiento de otros operadores del sector que cumplen con la legislación laboral española y son rentables económicamente".
Noue, sin embargo, aseguró a este periódico que la nueva regulación no obliga a laboralizar. “Lo que hace es articular una presunción de laboralidad en el delivery, que es algo que en última instancia ya está regulado por el Estatuto de los trabajadores. Y, como en cualquier sector, hay criterios de ajeneidad y dependencia para el trabajo que determinan si una actividad puede ser operada por un profesional autónomo o no”. El directivo añadió que, en este caso, se establece una presunción iuris tantum, es decir, que admite prueba en contra.
Desde Uber Eats España aún no han hecho público cómo planean cumplir con la ley. Sí explican que están "comprometidos con ser un socio a largo plazo en España" y que están trabajando para adaptar su negocio de comida a domicilio a la nueva normativa. Lo que sí remarcan es que confían en que "el Gobierno garantice que todos los operadores del sector cumplan con las mismas regulaciones y compitan en igualdad de condiciones".
Precarización y destrucción de empleo
Desde la Asociación Profesional de Riders Autónomos (APRA) y RepartidoresUnidors.org, han asegurado hoy que las predicciones que manifestaron estos meses atrás de "precarización y destrucción de empleo" ante la Ley Riders "se están cumpliendo a escasos días de que entre en vigor".
Según ambas organizaciones, se está consolidando la propuesta de contratos precarios para los riders, a través de ETT, "de unas 15-20 horas semanales, con un mes de duración, y unos ingresos máximos de de 400-500 euros. En los que el propio repartidor debe aportar su vehículo de reparto y el combustible".
Además, advierten que la mayor parte de repartidores que han accedido a firmar un contrato laboral con las citadas condiciones, no han sido renovados, alegando la bajada de demanda de negocio en el mes de agosto.
Las dos asociaciones aseguran que están planeando llevar a cabo nuevas movilizaciones contra el Gobierno y los sindicatos que han apoyado la nueva ley, tras conocer también que Deliveroo dejará de operar en España, "lo que supondrá más destrucción de empleo tanto directo como indirecto". Ambas organizaciones siguen mantiendo que el modelo de autónomos "es el más flexible tanto para el sector, y posiblemente el único que permita garantizar con cierta estabilidad el futuro de ambos en España".