ACS busca ir con capital italiano a por ASPI mientras Atlantia decidirá la venta en una junta
La concesionaria convocará para antes del 28 de mayo y la española reitera por carta que se alineará con el interés del Gobierno
El consejo de Administración de Atlantia ha tomado hoy la decisión de someter a la opinión de la junta de accionistas la oferta vinculante de Cassa Depositi e Prestiti (CDP) por la filial de autopistas Autostrade per l’Italia (ASPI). La fecha está aún por definir, pero será antes del 28 de mayo. Ese día vence la propuesta lanzada por la entidad pública en consorcio con los fondos Macquarie y Blackstone. ACS, por su parte, busca jugar sus bazas en el intento de hacerse con la mayor concesionaria italiana de autopistas, pero sin desairar al Gobierno de Mario Draghi, tal y como anunció el pasado 8 de abril
El órgano de decisión de Atlantia elude referirse al acercamiento del grupo ACS con una propuesta de 10.000 millones por el 88% de ASPI, frente a los 9.100 millones que propone CDP. Y es que la ofensiva del grupo que preside Florentino Pérez no tiene aún el marchamo de vinculante. La firma de infraestructuras ha contratado los servicios de Société Générale para estructurar una posible oferta en firme, para lo que aún tendría plazo.
En una segunda carta enviada hoy al consejo de Atlantia, la española afirma que inicia los pasos para tratar de invertir en Austostrade; insiste en su intención de crear el mayor grupo de autopistas del mundo y, ante todo, en su voluntad de actuar en armonía con el gobierno italiano y en posible consorcio con DCP. ACS busca acceso a los libros de Autostrade, analizar su plan de inversión y todo lo relacionado con los aspectos legales de la operación, incluido el plan de resarcimiento por el siniestro del viaducto Morandi, que causó 43 víctimas en Génova en 2018.
ACS ha expuesto por carta a Atlantia que podría firmar un crédito puente hasta recibir el efectivo de Vinci por sus Servicios Industriales
ACS recuerda en la nueva misiva que va a recibir en el cuarto trimestre de este año 4.900 millones en metálico por la venta del área de Servicios Industriales a Vinci. Una inyección que serviría para financiar la toma de Autostrade y que sería cubierta por un crédito puente hasta el cierre de esa operación con el grupo francés.
El consejo de Atlantia quiere revestir de la máxima legitimidad cualquier decisión sobre la venta de ASPI pese a tener autonomía para vender sin contar con la junta. La decisión se debe a la importancia del activo que va a ser enajenado y a que accionistas como TCI tienen expectativas de venta a mayor precio que el propuesto por CDP. ASPI es la mayor operadora de autopistas de Italia, con 3.000 kilómetros de peajes en 12 regiones. Su venta por parte de Atlantia es forzosa tras el citado siniestro en Génova.
El reloj corre ya para ACS, que el pasado día 8 ya señaló al consejo de Atlantia que tendía la mano a CDP para llevar a cabo esta multimillonaria compra.
Alternativas
El consejo de Atlantia va reunirse de nuevo antes del 23 de abril para examinar en profundidad la puja de CDP y elaborar el informe sobre la misma que presentará a los accionistas. Además de evaluar la oferta vinculante, se expondrá el contexto de negocio y los “eventuales escenarios alternativos a la oferta”. Atlantia deja la puerta abierta a un posible rechazo, máxime cuando podría darse una propuesta competidora.
El Gobierno de Mario Draghi ha optado por la cautela tras la aparición en escena de ACS. El ministro de Infraestructuras, Enrico Giovannini, sí ha recordado que Italia cuenta con derecho a veto a una operación corporativa relacionada con Austostrade al actuar esta con concesiones del Estado y un sector estratégico. ACS no ha dejado de insistir en que cualquier intento de compra será en consenso con el Ejecutivo italiano.