_
_
_
_
Canarias

El interminable bucle de la vivienda en las islas

A pesar de la caída del número de compraventas y de precios durante la pandemia, la recuperación que empieza a registrarse vuelve a alejar de su acceso los trabajadores

Getty Images

La pandemia trajo aparejada una moderación de los precios, pero la tendencia empieza a cambiar en Canarias: sube el coste, lo que favorece a quienes tenían ahorros y aleja la vivienda de las clases populares, sumidas en los ERTE y sin ingresos suficientes para acceder a ella. 

La compraventa de viviendas se redujo un 3,7% entre febrero de 2020 y el de este año mismo mes de este año, según el Colegio de Registradores de España. La caída se extiende a la concesión de hipotecas, que retrocedieron en todo el país desde las 34.241 computadas en febrero del ejercicio anterior a las 29.800 del actual.

Canarias está en las posiciones de cabeza de ambas variables, con un 14,6% de bajada en el número de compraventas de viviendas (solo superada por Baleares, con un 18,2 de descenso); y un 16,8% menos de hipotecas constituidas sobre ellas. En ambos casos, se trata de unas caídas por encima de la media nacional, que se situó en el 12,8%.

Ese retroceso se vio acompañado por una reducción del precio de la vivienda en las islas. Según el índice IMIE de Mercados Locales de la tasadora Tinsa para el cuarto trimestre de 2020, en las islas se produjo un descenso interanual del 6,2%, que deja el precio del metro cuadrado de vivienda en 1.280 euros. La caída respecto al máximo histórico (alcanzado el primer trimestre de 2008) alcanza el 33,1%.

La situación ha comenzado a cambiar. Según esos mismos datos de Tinsa, ya durante el primer trimestre de este año el incremento en todo el país se situó en un 0,5%, con Canarias en los primeros puestos de esa recuperación. La subida del 4,1% la coloca únicamente por detrás de Baleares y el País Vasco.

Isidro Martín, delegado en Canarias de la Asociación Profesional de Expertos Inmobiliarios (APEI), desgrana algunos de los componentes que han influido en la bajada de las operaciones de compraventa en el archipiélago durante la pandemia, “desde el descenso de las operaciones por parte de los extranjeros, que suponían alrededor del 37% del total, a la caída del alquiler vacacional o el retraso en la aprobación de la nueva ley de vivienda”.

Esas incertidumbres han provocado que también las sociedades de inversión, ante medidas como las posibles limitaciones de los precios del alquiler, detuvieran sus operaciones, o que los bancos hayan endurecido los perfiles de compradores: “Antes se daban, con un sueldo normal, desde 80% al 100% de la financiación. Ahora, con dos buenos sueldos, y si no tienes ahorrado el 20% más otro 10% para impuestos, el banco no te va a financiar”, señala. Eso hace, según este experto, que haya “mucha gente que quiera, pero que no pueda comprar”.

Oportunidades desiguales

Para Luis Vera, subdirector de Renta 4 en Tenerife, el incremento de la morosidad o que muchos trabajadores se encontraran en ERTE, sumado a las caídas de los alquileres vacacionales por falta de demanda, llevaron a una bajada, primero, de los precios de los alquileres de larga temporada, y a continuación, de los de compraventa.

El cambio de tendencia de los precios, que ahora suben, lo explica porque “empezamos ya a quitarnos miedos y vemos que hay oportunidades, además de que los precios pueden llegar a alcanzar niveles previos a la crisis”. Pero no serán oportunidades para todos por igual: “Aquel que va a comprar ahora es el que tenía capacidad de ahorro antes de la crisis, por lo que aprovecharán las bajadas de precios los que tienen la mochila cargada. El que no la tenía antes, tiene menos”. Añade que para poder comprar una vivienda “hay que tener un trabajo que te permita hacer frente a una cuota hipotecaria, y además disfrutar de una liquidez que poca gente tiene”.

¿Cómo afecta esta situación a las clases trabajadoras del archipiélago? Héctor Fajardo, secretario de Organización, Comunicación y Relaciones Institucionales de UGT en Canarias, es pesimista ante la subida de precios de la vivienda que se registra. Apunta que la realidad es que “aproximadamente, el 65% del salario de un trabajador medio se dedica al pago de la vivienda, tanto a alquileres como a hipoteca”. La ampliación del banco de vivienda pública o la regulación de los precios del alquiler son algunas de las medidas que reclaman para facilitar el acceso a una residencia de las “clases populares”, que conforma el grueso de los trabajadores de las islas, indica. Si no, “parece que solo trabajan para tener un techo y algo de comer; una situación cercana al esclavismo”.

Los datos de un sector

Capitales. El índice Tinsa IMIE Mercados Locales determina que la caída de precios en el último trimestre del año pasado, el descenso interanual del precio de la vivienda en Santa Cruz de Tenerife fue del 4,2%, superior al registrado en la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, que se situó en el 2,9%.

Por provincias. El índice de Tinsa para el primer trimestre de 2021 refleja un diferente comportamiento por provincias. Mientras que en la de Las Palmas el incremento de precios fue del 2,6%, en la de Santa Cruz de Tenerife esa subida se situó en el 4,7%.

Portales inmobiliarios. El informe del portal Fotocasa referido al primer trimestre del año revela que el precio medio de la vivienda en Canarias se situó en los 1.814 euros, un incremento del 1,8% respecto al mismo periodo de 2020.

Archivado En

_
_