Mejor con tarjeta: la mitad de los españoles reduce el pago en efectivo con la pandemia
Cuatro de cada diez participantes de la eurozona indicaron que utilizaban el efectivo con menor frecuencia desde el inicio de la pandemia, según un estudio del BCE
Más de la mitad de los españoles admite que usa menos el dinero en efectivo para pagar desde que comenzó la pandemia. Lo mismo sucede en otros paises europeos como Irlanda y Bégica mientras que en Estonia, Letonia y Malta menos del 25% dijo lo mismo. Estas son algunas de las conclusiones que se recogen en el Estudio sobre las actitudes de pago de los consumidores de la zona del euro, realizado por el BCE.
El 38% de los encuestados utilizó efectivo para transacciones en los supermercados, el 57% de las transacciones en pequeños comercios para artículos de uso diario y el 63% de las transacciones en restaurantes, bares y cafeterías.
También se preguntó a los encuestados si se aceptaban otros instrumentos cuando se pagaba en efectivo, y si se aceptaba el efectivo cuando no se había pagado con él. En total, el 84% de los encuestados que pagaron en efectivo respondieron que también se aceptaban otros instrumentos de pago, como las tarjetas, en el punto de venta.
Y es que el uso del efectivo disminuye gradualmente y más durante la pandemia, aunque es el instrumento más popular para los pagos minoristas en persona, según una encuesta del Banco Central Europeo (BCE).
"La pandemia de coronavirus ha acelerado el uso de los métodos de pago sin efectivo", añade el BCE.
Los consumidores de la zona del euro prefieren cada vez más las tarjetas para los pagos, si bien el efectivo siguió siendo el instrumento más utilizado a finales de 2019.
Para entender el posible impacto de la actual pandemia en los hábitos de pago de los consumidores, el BCE complementó su estudio de 2019 con una encuesta específica llevada a cabo en julio de 2020.
Cuatro de cada diez participantes indicaron que utilizaban el efectivo con menor frecuencia desde el inicio de la pandemia, aunque la mayoría de los encuestados esperaba seguir con esta práctica después de la pandemia.
Por último, los pagos con un dispositivo móvil (por ejemplo, un teléfono o un reloj inteligente) no mostraron un gran avance, porque más de la mitad (53%) de los encuestados dijeron que no disponían de ese instrumento de pago
