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¿Cómo están gestionando las franquicias la pandemia?

Gestión y logística de las franquicias tras el estado de alarma.

Nuestros 180 centros cerraron de la noche a la mañana y nos invadió un sentimiento de incredulidad, que después se convirtió en aceptación y más tarde en desafío y lucha”. Así describe lo que supuso el 14 de marzo para Mery Oaknin, CEO y Socia Fundadora de d-uñas. El estado de alarma fue un varapalo para todas las empresas, y las franquicias no son una excepción. Y es que, tal como destaca Marcos Moure, CEO de Grupo Moure, al que pertenece Elefante Azul las “empresas pasaron de un día para otro de estar al 100% del rendimiento, y proyectando un año muy bueno en cuanto a números, a caer a prácticamente el 0% de actividad”. Esto supuso que las empresas tuvieran que afrontar la situación y paralizar la actividad.

Sin embargo, algunas empresas empezaron a poner medidas con anterioridad al 14 de marzo, previendo lo que podía pasar. Es el caso de Gil Stauffer. Su directora de comunicación y marketing, Charo Álvaro, asegura que en el momento del decreto del estado de alarma “casi la totalidad de los empleados de oficinas estaban funcionando ya en teletrabajo, el personal de movimiento utilizaba gel hidroalcohólico y se tomaban todas las medidas recomendadas hasta ese momento”. Aún con todo ello, aseguran que el 14 de marzo provocó un estado de incertidumbre y desconcierto entre todos los trabajadores.

Las franquicias, además, se enfrentaban a otros problemas. Al ser compañías con establecimientos con distintas ubicaciones, con centros repartidos en todo el territorio e, incluso, como es el caso de Elefante azul, estar formado por empresas de diferentes sectores y cada uno con una normativa y problemática, la logística de las medidas a poner en marcha se complica aún más.

Logística y medidas desarrolladas por las franquicias

Diálogo con los empleados, clientes, franquiciados y proveedores”, fue el primer paso que dieron en Elefante Azul. Al fin y al cabo una franquicia tiene una estructura más compleja, por lo que este tipo de situaciones son más difíciles de afrontar. La comunicación se hace indispensable, pero es complicado desarrollar un plan de actuación tan importante como ocurre en una pandemia cuando se trata de un sistema con una envergadura tan grande como es el que conlleva una franquicia.

En el caso de d-uñas, por ejemplo, que tienen centros en otro países, cerraron los establecimientos de cara al público, pero “no fue así con la central franquiciadora, cuya actividad ha sido y es frenética durante estos meses”. En esta empresa se centraron en intensificar la comunicación entre franquiciados, clientes, master, etc., así como en el desarrollo de un paquete de medidas de higiene y seguridad para proteger a los empleados y poder atender clientes contando con los materiales necesarios una vez se acabara el estado de alarma.

También se enfrentan a normativas complejas, cuando no está bien definida el tipo de actividad. La directora de comunicación de Gil Stauffer subraya que, aunque las empresas de transporte eran consideradas indispensables, “las mudanzas están en una especie de limbo legal que no permitía definir, a ciencia cierta, si estábamos obligados a trabajar o teníamos que frenar la actividad por completo”.

Como ha ocurrido con otros modelos de negocio, a estar obligados a cerrar, tuvieron que realizar ERTEs a la plantilla. Pero en el caso de las franquicias entran otro tipo de gestiones en juego, como los franquiciados. “Les bonificamos con el 100% del canon durante todo el periodo del estado de alarma”, asegura Moure.

Cierre de establecimientos, parada de la actividad, caída de la facturación, ERTEs, etc. las franquicias se han enfrentado a estas situaciones, como cualquier empresa, pero con estas dificultades y gestiones añadidas.

Cómo están respondiendo a la crisis las franquicias

Una vez que se pudo retomar la actividad, las franquicias reabrieron sus puertas, con las medidas de seguridad e higiene necesarias y, en la medida de lo posible, con novedades para poder atraer de nuevo al público objetivo. Por ejemplo, en d-uñas, con el fin de ayudar a los franquiciados se ha intensificado las campañas de marketing y publicidad convencional, así como se han introducido nuevos servicios para llegar a nuevos clientes y se han aprobado descuentos en los royalties.

A pesar de la dificultad del momento, la pandemia ha ayudado a analizar la gestión de muchas empresas e, incluso, a mejorarlas. Desde Elefante azul destacan que han mejorado en los procesos y “somos más eficientes que antes”. También han congelado tarifas y ajustado sus márgenes de beneficios, además de realizar campañas con el fin de transmitir confianza a sus clientes.Del mismo modo, han recurrido a los servicios de traducción profesional para captar más clientes internacionales. Es por ello por lo que han elegido la traducción de páginas web para conseguir llegar a un mercado más global.

La parte más positiva de la pandemia se la llevan este tipo de consecuencias en las que se piensa en los trabajadores y en los clientes por encima de los intereses empresariales. En Gil Stauffer solicitaron un crédito ICO para poder reformar sus instalaciones, fomentar nuevas líneas de negocio, invertir en infraestructuras, etc. Además, también ha provocado mejoras en lo humano, provocando un “hermanamiento entre los empleados”, de manera que “se percibe internamente un ansia por trabajar para que la empresa funcione, para obtener buenos resultados, para poner nuestro granito de arena en la rueda de la economía”.

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