La caída de ventas del textil sigue pese a las rebajas y pone en peligro 5.000 tiendas
Unas 2.000 no han reabierto pese al fin de las restricciones
El sector textil continuó en julio con la profunda pérdida de negocio que acumula tras la crisis del coronavirus. Ni las rebajas de verano, que podían haber servido de estímulo, han podido revertir una tendencia negativa que empezó antes de la pandemia y que se ha agravado sobremanera a raíz de la misma, poniendo en riesgo el futuro de miles de puntos de venta si la situación no remonta en otoño.
En julio las ventas cayeron un 22,5%, según los datos hechos públicos por la patronal del sector Acotex, y ya son 10 los meses seguidos en negativo. Esta es una caída algo menor a la vista en junio, del 26%, y también es la más reducida de los últimos cinco meses. Sin embargo es un dato muy negativo teniendo en cuenta el periodo de rebajas y que los operadores debían dar salida al stock que no se vendió durante los meses de confinamiento.
También hay que tener en cuenta que en julio ya no había estado de alarma ni limitaciones en la apertura de los establecimientos. El acumulado de los siete primeros meses del año se salda con una caída del 43,1% de las ventas.
“Las rebajas no han funcionado. Desde que se levantó el confinamiento se hicieron promociones agresivas y eso ha penalizado”, valora el presidente de Acotex Eduardo Zamácola en declaraciones a este periódico.
Futuro de la red
Este explica que la situación es dramática y que el consumidor no tiene ánimo de irse de compras por tres factores: “El miedo sanitario, el problema económico, y que no estamos habituados a ir de tiendas con una mascarilla. Y el que va intenta estar menos tiempo que antes”, dice Zamácola. Este explica que la caída está afectando a todos los operadores, tanto grandes como pequeños, y que el online tampoco está compensando la pérdida de la venta física.
En este sentido, la crisis de ventas amenaza el futuro de miles de tiendas. Según los datos de Acotex,el 15% de los puntos de venta, unos 2.000, no han reabierto sus puertas pese al fin de las restricciones, y están en serio peligro de cierre. Fuentes del sector consultadas por este periódico elevan a 5.000 las tiendas que están en riesgo de cierre si la tendencia se mantiene en otoño. Las perspectivas económicas y la ausencia de turismo hacen que la expectativa no sea positiva.
“Por eso es necesario que se tomen medidas, como aplazar los ERTE hasta finales del año”, reclama Zamácola. Este indica que Acotex mantiene la interlocución con el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, pero que sus demandas siguen sin ser aceptadas.
“Con este descenso tan importante de ventas no nos valen moratorias en los impuestos, tasas, tributos o en las cuotas de la Seguridad Social. Es necesario la condonación de los mismos y la reducción del IVA para incentivar el consumo”, afirma el presidente de Acotex, que insiste en la necesidad de que se tomen medidas relacionadas con el pago de los alquileres. “Cada operador y empresario ha ido llegado a acuerdos puntuales con los caseros, pero si el negocio no repunta no se van a poder cubrir los costes”.
2020 amenaza con ser el peor año para el sector desde que se tienen registros, superando la caída del 11% del año 2008, en plena crisis financiera.
Muchos menos tickets aunque algo más elevados
Menos tráfico. Como analiza el presidente de Acotex, Eduardo Zamácola, la situación en las tiendas es de un menor tráfico y de una caída “muy importante” en el número de tickets. “Cuando acabó el desconfinamiento hubo un efecto champán, la gente fue rápido a sus tiendas preferidas a comprar y hubo un incremento de ticket medio”, explica. Ahora, ese efecto inicial “se ha desinflado y ahora la gente no está entrando en las tienda”, aunque Zamácola explica que los que lo hacen sí intentan aprovechar para comprar algo más en el menor tiempo que pasa en el establecimiento.