Prolongar los ERTE, asegurar la confianza y mantener la conectividad, las claves para reanimar el turismo
Los empresarios recuerdan que la temporada turística en Canarias no termina en octubre y hay que mantener los puestos de trabajo. Alertan de la subida de precios en los billetes aéreos desde la península.
Canarias está abierta de nuevo por vacaciones desde esta semana para turistas nacionales e internacionales. Su economía espera la llegada de visitantes que permitan remendar el roto causado por la crisis sanitaria. Pero en el sector, del que depende mucho más que un simple 35% del PIB de Canarias, la situación no es nada fácil.
Muchos hoteles no abren aún y esperarán hasta octubre a ver cómo se desarrollan las cosas. Otros han tomado todas las medidas sanitarias recomendadas y esperan ya a sus huéspedes. Aún no se sabe cómo van a responder. Si van a venir en número suficiente para favorecer la recuperación económica o si su propia crisis económica y el miedo a un contagio les va a dejar en sus países.
Hasta que se llegue la solución sanitaria hay que tomar medidas para amortiguar el golpe económico. “La medida más importante es la renovación de los ERTE por fuerza mayor en Canarias hasta el 31 de diciembre o hasta que se recupere la plena conectividad aérea” afirma con rotundidad José María Mañaricúa, presidente de la FEHT.
Las regulaciones de empleo temporales han servido de momento para evitar que muchos empleos se destruyan, pero podrían terminar a finales de verano, justo cuando comienza la temporada alta canaria. Algo que también preocupa a Daniel Celis, presidente del Colegio Oficial de Profesionales en Turismo de Canarias. Cree también fundamental prorrogar los ERTE, pero ve además importantes otras medidas para que salga rentable abrir. “No se está trabajando en la percepción de la imagen del destino en los países emisores, y esto es clave para generar confianza” afirma.
Primero, eso sí, haría falta analizar cómo perciben la situación en los principales mercados emisores. El problema es que el plan del Gobierno para impulsar el turismo, dotado con 4.252 millones, “solo destina un 0,9% a generar confianza en los mercados, cuando en las islas la actividad turística genera siete millones de euros al día en impuestos” señala.
Conectividad
Otra de las prioridades del sector es el mantenimiento de la conectividad aérea. Una vez más, Canarias parte con desventaja por su dependencia de los vuelos. La crisis ha dejado muy tocados a aerolíneas y turoperadores, y la patronal hotelera pide que se asegure que habrá aviones para traer a los turistas cuando se supere la pandemia. “Van a ser fundamentales los incentivos estatales, reducción de tasas aeroportuarias y costes para favorecer la conectividad” sostiene Mañaricúa. Ve también fundamental que se controlen los precios de los billetes “para evitar subidas como las ocurridas recientemente”. Y añade también otra receta para fomentar el turismo, en este caso nacional: Los incentivos fiscales o de otro tipo para favorecer que el turista nacional se quede en España. Es una medida que ya han apuntado desde otras patronales turísticas.
El Colegio Oficial de Profesionales en Turismo de Canarias es partidario, además, de conseguir certificados de sostenibilidad en origen para recuperar la confianza de los turistas europeos, porque “no vale que Canarias cree un sello de Libre de Covid que el turista europeo no reconoce. Pero sí reconoce un certificado de su país o del de al lado”. Del mismo modo, anima a conseguir certificados relacionados con la formación y excelencia del servicio.
Hasta salir de la crisis es previsible que puedan quebrar muchas empresas dependientes del turismo. Según Celis, sobrevivirán “las que ofrecen un producto diferenciado, consolidadas nacional e internacionalmente y las que tengan un fondo de maniobra para hacer frente a las obligaciones a corto plazo, la clave es mantener el empleo hasta final de año”.
Por último, no solo hay que basar la recuperación en recuperar la confianza del turista, sino que también hay que generar confianza en el residente local, el trabajador turístico que se relaciona a diario con personas venidas de cualquier parte del mundo. “La empresa tiene que darles protocolos seguros. Esto no debe precarizar los trabajos sino corregir algunas actitudes. El empleado enfermo no debe temer perder su puesto si se pone de baja”, afirma Celis. José María Mañaricúa disipa las dudas: “Todas las medidas que se han tomado no son solo para proteger al turista, también están pensadas para cuidar a las plantillas y para garantizar el futuro del sector”, subraya.
¿Y los precios?
Subida precio billetes. A la patronal le preocupan las subidas desorbitadas de los billetes aéreos en el momento más delicado. “Personas que viven en península nos han comunicado que han detectado subidas de precios de semana en semana” señala Mañaricúa, que pide al Gobierno que tome medidas para evitarlo.
Ocupación hoteles y rebaja precios. La FEHT calcula que este verano abrirá de un 10% a un 20% de la planta alojativa, cantidad que se irá aumentando conforme lleguen más turistas. De momento la baja demanda ha forzado bajadas de precios “de hasta un 40%” señala su presidente.
Creación de un fondo contingencias. Una de las propuestas del Colegio de profesionales del turismo es la creación de un fondo de contingencia. Se dotaría con parte de los siete millones diarios en impuestos que produce el turismo. Se destinaría a “emergencias como esta, o asociadas al cambio climático… Sostenibilidad a todos los niveles” afirma Celis.