Las farmacéuticas alertan de que no hay capacidad industrial para fabricar la vacuna del coronavirus
La patronal mundial avanza que serán necesarias 15.000 millones de dosis. Advierte de que no existen tampoco plantas suficientes de viales
Las compañías farmacéuticas no tienen capacidad, a día de hoy, de producir ni de lejos las dosis necesarias de vacunas para frenar la pandemia de Covid-19. Así lo alerta Thomas Cueni, director general de Ifpma, en un escrito en la web de la propia patronal mundial. Además, Cueni calcula que son necesarias entre 12.000 y 15.000 millones de dosis para la población mundial, para lo que no hay fábricas de vacunas ni de envases suficientes.
“Tenemos buenas esperanzas de encontrar una vacuna de Covid-19 pero los desafíos no deben subestimarse”, incide el director general de la patronal mundial. “Debemos analizar cómo podemos ampliar la fabricación. Como dijo Bill Gates, si solo podemos producir 300 millones de dosis en cada planta, tendremos problemas”, vaticina. De hecho, Gates está impulsando con sus recursos la construcción de fábricas sin que exista todavía la vacuna. Por eso, Cueni refleja que incluso levantando 10 de estas nuevas plantas podría servir solo para 3.000 millones de dosis, insuficiente bajo su parecer, aunque cree que sí podría garantizar el producto a los más vulnerables en una primera fase.
“Siendo realistas, para que todos podamos recibir una vacuna, necesitaríamos alrededor de 12.000 a 15.000 millones de dosis, y hoy los cinco o seis fabricantes de vacunas más grandes producen en total menos de la mitad de este volumen en un año” para otro tipo de enfermedades, advierte. Aunque la población mundial actual sea cercana a los 7.700 millones de personas, algunas de las soluciones farmacéuticas en las que se trabajan están basadas en dos dosis. Esta escasez industrial pone de relieve la importancia estratégica para los países de conseguir suministros suficientes de los futuros productos. En España, por ejemplo, no existe ninguna fábrica de vacunas para uso humano.
En la actualidad, hay 10 vacunas en ensayos con humanos y 126 en etapa de investigación preclínica, según recoge la Organización Mundial de la Salud. Entre las más avanzadas se encuentran grandes compañías como AstraZeneca y Janssen, que cada una de ellas se ha comprometido en aumentar su capacidad de producción hasta 1.000 millones de dosis si consiguen el logro científico. En la carrera también están otros laboratorios como MSD, Pfizer, Sanofi o GSK, y biotecs como Moderna, que ayer avanzó que en julio iniciará la última fase de ensayos con 30.000 voluntarios y aseguró que podrá fabricar hasta 1.000 millones de dosis en 2021.
Centros públicos de investigación y laboratorios farmacéuticos están realizando un esfuerzo sin precedente para conseguir una vacuna en el plazo de 18 meses cuando lo habitual es que puede llevar hasta una década entre la investigación y la producción.
Cueni también avisa de que no solo se trata del problema científico de encontrar y fabricar este producto de inmunización, sino que también será necesario contar con miles de millones de viales de cristal, un problema al que califica como cuello de botella. “Una solución podría ser tener cinco o diez dosis en un vial”, en vez de en frascos monodosis, aconseja. Incluso apunta a que países con bajas rentas van a tener dificultades de almacenamiento debido a que estos artículos se deben conservar a temperaturas de 80 grados bajo cero.
Incide también en otro problema, en saber cómo de efectiva es la vacuna si los países consiguen frenar antes la pandemia. “La realización de ensayos clínicos y el logro de resultados confiables pueden ser más difíciles a medida que los países avanzan para aplanar la curva y los participantes del ensayo posiblemente ya no tengan un cierto riesgo de infección que es necesario para demostrar que una vacuna es realmente efectivo”, opina.