Dia dobló sus pérdidas en 2019 hasta 790 millones
El grupo de supermercados redujo sus ventas a 6.947 millones, su cifra más baja desde 2011
Dia cerró el ejercicio 2019 con una pérdida récord de 790 millones de euros, más del doble que las registradas en 2018, cuando se desató la profunda crisis financiera en la compañía de supermercados. Las ventas bajaron hasta los 6.947 millones de euros, un 10% menos y la cifra más baja desde 2011, cuando la empresa salió a Bolsa. El ebitda ajustado fue positivo en 34,1 millones de euros, comparados con los 376 de 2018.
La compañía explica el fuerte deterioro de su rentabilidad por el "importante descenso de las ventas y también por los efectos de “one-offs” o excepcionales registrados en el período, debido a las medidas implementadas para asentar las bases de la transformación de la compañía a largo plazo". Dia llevó a cabo un proceso de saneamiento de su balance que ya en el primer semestre del ejercicio se tradujo en unas pérdidas de 418 millones de euros.
Entre esos costes extraordinarios, hay que destacar los derivados del cierre de 861 tiendas en durante el último año, sobre todo en España y en Brasil, y el proceso de absorción de 385 tiendas regentadas hasta ahora por franquiciados y que ha tomado como propias. Esto "se ha traducido en un aumento de los gastos laborales y operativos, así como en el reconocimiento de provisiones adicionales en cuentas a cobrar relacionadas". En el caso de España hay que sumar un ERE que afectó a más de 1.600 trabajadores. Además, la empresa reseña "el impacto de algunas iniciativas de mejora logística, que han conllevado el cierre de almacenes para conseguir una mayor eficiencia, y que se ha traducido a corto plazo en un aumento de los costes logísticos, bajas contables adicionales de activos y provisiones por compromisos de pago de arrendamientos a propietarios". Solo los costes de reestructuración se elevaron a 130 millones de euros.
Las ventas comparables, que no tienen en cuenta aperturas o cierres de tiendas en el último año, cayeron un 7,6%, aunque la empresa dice ver aspectos positivos en los últimos meses del año. Por ejemplo, la mayor caída en esta variable la vivió en junio, cuando cayeron un 15,5%. Un retroceso que suavizó en el último trimestre, siendo del 7,1% en octubre, del 5,1% en noviembre y del 5,8% en diciembre.
Todos los mercados de la compañía redujeron sus ventas netas el año pasado. La mayor caída fue en Brasil, el segundo que más ingresos aporta, con un retroceso del 16%. En términos comparables la caída fue del 8,8%. En España los ingresos netos cayeron un 8,2% hasta 4.177,2.
La deuda neta total se elevó a 2.027 millones de euros, cantidad de la cual 705 millones corresponden a los efectos de la norma contable sobre alquileres NIIF 16. A 31 de diciembre de 2019 la compañía contaba con una liquidez disponible de 420 millones de euros
“Reconocer la situación de la compañía es el primer paso para cambiarla. Hemos comenzado 2020 con el trabajo hecho y ha sido significativo y determinante. En el futuro, estamos decididos a construir nuestra propia historia de éxito que se basará en una oferta de proximidad moderna, una propuesta de valor atractiva, frescura, excelencia operativa, un modelo de franquicia beneficioso para ambas partes y una oferta de marca propia excepcional", ha declarado Karl-Heinz Holland , consejero delegado del grupo Dia, en un comunicado.
Pese a las abultadas pérdidas sufridas, Dia aclara en la información financiera publicada que, "A 31 de Diciembre de 2019, los fondos propios de los estados financieros individuales de la sociedad matriz (que son aquellos usados con el propósito de compensar y evitar la disolución legal o la obligación de una ampliación de capital) ascienden a 222,7 millones proporcionando, por lo tanto, suficiente capital disponible" y esquivando de esta manera la causa de disolución.