Johnson prosigue su carrera contrarreloj para tratar de aprobar el Brexit
La Cámara inicia este martes la tramitación de la legislación del divorcio, para la que el premier cree contar con los apoyos suficientes
A menos de diez días de la salida de Reino Unido de la Unión Europea, el primer ministro británico, Boris Johnson, sigue determinado en conseguir materializar el Brexit el 31 de octubre, por mucho que los obstáculos que tiene por delante sean muy numerosos. Este lunes, el presidente de la Cámara de los Comunes, John Bercow, le prohibió que sometiera de nuevo a una votación preliminar el acuerdo de salida sellado con Bruselas el pasado jueves, después de que ya fracasara en el intento el sábado, en una sesión extraordinaria que no se celebraba desde la guerra de las Malvinas.
Ello no le impide, aún así, iniciar este mismo martes la tramitación para traducir el acuerdo negociado con la UE en normativa británica, un proceso necesario para que los términos del divorcio puedan entrar en vigor y que tendría que hacerse en tiempo absolutamente récord para que pudiera estar listo en 10 días.
El speaker rechazó que el Parlamento volviera a pronunciarse de forma genérica sobre el acuerdo ya presentado el sábado, considerando que ello “sería repetitivo y desordenado”. Hace dos días, Johnson presentó una moción en la que pedía a los comunes que respaldaran su plan acordado con Bruselas, pero se vio forzado a suspender la votación después de que una mayoría de la Cámara aprobase una enmienda que le obligó a pedir, in extremis, una extensión –la tercera ya–del plazo de salida a la UE, hasta finales de enero.
A pesar del revés propinado por Bercow, el Gobierno arranca este martes en el Parlamento la tramitación y votación del proyecto de ley del Brexit, en el que se tendrá que trasponer el tratado de retirada de la UE a la legislación británica y que el Ejecutivo pretende llevar a cabo por un procedimiento de urgencia para tratar de tenerlo listo antes de finales de mes, por mucho que haya tenido que solicitar la prórroga a Bruselas. No está claro que pueda lograrlo.
Aún así, el ministro británico Michael Gove ha asegurado que el Gobierno cree tener los apoyos suficientes para superar la fase de tramitación del acuerdo, para lo que necesitaría un mínimo de 320 votos. Este martes será la primera vez en la que el premier compruebe si cuenta con una mayoría suficiente. Según FT, Johnson podría pasar esta fase por una exigua mayoría de cinco diputados. En efecto, cerca de una veintena de diputados dimitidos y expulsados de la formación conservadora en verano han anunciado que respaldarán al premier y se espera que otra decena de laboristas partidarios de completar el proceso de salida lo haga también.
No obstante, aunque Johnson supere mañana la votación, no lo tiene todo ganado, ya que tras ello se enfrentaría a un duro proceso en el que la oposición podría presentar enmiendas que dieran al traste con el acuerdo, entre las que figuran posibles condiciones para acceder a la unión aduanera de la UE en un futuro, o condicionar la ratificación final a que el acuerdo sea aprobado en referéndum.
La UE aguarda para pronunciarse sobre la prórroga
Esperar a final de semana. La Unión Europea no ha dicho todavía si concederá o no a Londres una tercera prórroga del Brexit, después de que el premier se viera el sábado forzado por los Comunes a solicitarla. Según explican fuentes comunitarias, Bruselas quiere esperar a ver cómo se desarrollan los acontecimientos esta semana en Westminster para tomar una decisión. En todo caso, el bloque es partidario de evitar una salida abrupta, pero Francia ya presiona para que se exijan condiciones al desbloqueo, como unas nuevas elecciones generales o un segundo referéndum. “No vamos a dar a Boris Johnson seis meses para ver si logra un milagro”, advirtió la responsable para el Brexit del Gobierno francés.