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Telecos

Telefónica calcula un coste de 1.600 millones en su plan de bajas

Analiza la transferencia a Telxius de sus más de 50.000 torres El programa de salidas podría extenderse a cerca de 4.200 empleados

Santiago Millán Alonso

El consejo de Telefónica ha dado esta mañana luz verde al plan de bajas incentivadas para 2019 y que podría afectar a más de 4.200 personas, tal y como publicó ayer CincoDías. La cifra supone más del 16% del total de la plantilla que la teleco tiene en España, que al cierre de 2018 superaba las 25.300 personas. Para afrontar este proceso la compañía realiza una dotación de 1.600 millones y calcula un ahorro de 220 millones a partir de 2021. Según la compañía, también prevé un efecto positivo en generación de caja desde el primer año.

Según fuentes sindicales, a este nuevo PSI (Plan de Suspensión Individual) podrían acogerse exclusivamente la plantilla nacida en 1966 (cerca de 2.200 personas) o en años anteriores (unos 2.000 empleados más). Así se posibilitaría la adscripción de aquellas personas que en su momento declinaron participar en los anteriores ERE o PSI. Según fuentes del mercado, estos cálculos están basados en una aceptación al plan de bajas de cerca de 2.800 personas, si bien, al ser voluntario, no se puede precisar cuál será la cifra final de salidas. El plan estará abierto también para personal fuera de convenio.

Con esta medida, según fuentes sindicales, la dirección pretende un ahorro de la masa salarial futura con el que paliar la difícil situación económica que atraviesa el grupo Telefónica en España y con el que trata de recuperar la confianza de los inversores y accionistas.

El posicionamiento sindical se hará efectivo en la reunión de la mesa de negociación del II Convenio de Empresas Vinculadas (CEV) que tendrá lugar mañana día 11 de septiembre. Los sindicatos mayoritarios de Telefónica, UGT y CC OO, van a exigir que el nuevo plan de bajas voluntarias en España tenga las mismas condiciones que las establecidas en el anterior programa, como condición para firmar. Entre otras requisitos, advierten de que se deben mantener los principios de voluntariedad, universalidad y no discriminación establecidos en planes anteriores. 

De igual forma, plantean que se mantenga la garantía de no aplicación con carácter forzoso de los artículos 51 y 52c del Estatuto de los Trabajadores; la no segregación o externalización de actividades que afecten al empleo con carácter forzoso; la no deslocalización de actividades y recuperación de actividades de mayor valor para asegurar la viabilidad de todas las provincias; así como el establecimiento de incrementos salariales que representen una mejora de poder adquisitivo de la plantilla. En este último punto, la compañía ha ofrecido un aumenta salarial del 1,2% anual por cada año que se mantenga vigente el nuevo convenio. 

Este plan laboral, que la compañía va a trasladar a los sindicatos mayoritarios en el marco de la negociación del convenio de empresa, incluye un plan de formación de la plantilla para afrontar las nuevas necesidades de la compañía (digitalización, robotización y automatización de procesos).

Torres de móvil

Además, el consejo, cuya convocatoria adelantó dos semanas el presidente, José María Álvarez-Pallete, ha analizado fórmulas para mejorar la cotización de la compañía. Telefónica ha decidido acelerar "los planes de monetización de sus torres" y aumentar sus sinergias. En concreto, analiza desprenderse de una parte de sus torres en los próximos 12 meses, entre las que baraja su incorporación a Telxius. No obstante, la compañía no descarta la venta de emplazamientos a otras compañías en alguno de los mercados donde tiene presencia.

En un hecho relevante remitido a la CNMV, Telefónica explica que opera una cartera 130.000 torres de telefonía en todo el mundo de las que 68.000 son en propiedad. La operadora explica que Telxius, su filial de infraestructuras, es propietaria de aproximadamente 18.000 emplazamientos y los aproximadamente 50.000 restantes son propiedad de otras filiales del Grupo Telefónica. Más del 60% de estos emplazamientos están ubicados en los cuatro principales mercados donde opera la compañía, España, Reino Unido, Alemania y Brasil.

"En términos comparables de mercado, esta cartera de aproximadamente 50.000 sites podría generar unos 830 millones de euros en ingresos y unos 360 millones en oibda, pudiendo requerir 25 millones de euros en inversiones de mantenimiento sobre una base pro-forma anual", señala Telefónica. La teleco creó en 2016 Telxius como un operador de torres, propietario de 18.000 emplazamientos además de los cables submarinos de la compañía. Tras una frustrada salida a Bolsa, dio entrada a KKR con el 40% y después, la sociedad de inversión de Amancio Ortega, Pontegadea, adquirió un otro 10%.

Además, en el Reino Unido, Telefónica cuenta con alrededor de 7.000 torres a través de su participación del 50% en CTIL, cuyo socio es Vodafone. Ambos socios ya han indicado que manejan planes para monetizar estos activos.

En Alemania, Telefónica es propietaria de unos 19.000 emplazamientos. La compañía cita la búsqueda de sinergias con otros operadores locales como otra de las soluciones para rentabilizar estos activos. 

La publicación de estos planes en un hecho relevante remitido a la CNMV ha tenido su correlato directo en la cotización. La compañía se ha dado la vuelta en Bolsa y sube en torno a un 0,2%. Finalmente, han cerrado la jornada con una subida de casi un 0,4%, hasta 6,68 euros. Desde su precio mínimo anual (y de los últimos 22 años), registrado a mediados de agosto, las matildes se han revalorizado cerca de un 13%.

El plan se ejecutará en 2019

En un mensaje enviado a los empleados, Emilio Gayo, presidente de Telefónica España, defiende el convenio colectivo firmado hace cuatro años, que han permitido a la teleco realizar grandes avances además de dotar de estabilidad durante este periodo, “haciendo que nuestra compañía vuelva a la senda del crecimiento”. Ahora bien, el directivo señala que la compañía tiene que ser más ambiciosos y evolucionar hacia una compañía más digital, más flexible y más preparada para los desafíos futuros. “Una compañía que además apueste por su principal activo: el talento interno y la motivación de los equipos”, afirma.

Gayo señala que en los próximos años más de la mitad de las ventas se producirán a través de canales digitales y cada vez más usuarios se relacionarán con Telefónica a través de la aplicación digital Mi Movistar. En paralelo, dice, continuará la modernización de la compañía con nuevos despliegues de fibra y el apagado progresivo de la red de cobre y de las primitivas redes de telefonía móvil. “La llegada del 5G y de todos los servicios digitales asociados va a suponer un reto, además de una gran oportunidad para nuestra compañía”, afirma Gayo, quien añade que “hemos de estar preparados para garantizar la sostenibilidad de nuestro crecimiento futuro y capturar esas oportunidades”.

El ejecutivo dice que la empresa ha propuesto a los representantes de los trabajadores, en el marco de la negociación del nuevo convenio colectivo de la compañía, negociar un ambicioso “plan de talento” que se basa en tres pilares fundamentales. En primer lugar la adaptación de las habilidades del talento interno, reskilling y upskilling. “Queremos ser ambiciosos y esperamos que más de 6.000 empleados participen en programas de reskilling, con un foco prioritario en el desarrollo de perfiles críticos en áreas como seguridad, robotización, analytics, desarrollo web, consultoría de negocio, capacidades en TI o metodología Agile. Además, habrá programas abiertos para la mejora de sus habilidades (upskilling) dirigidos a todos los empleados de la compañía”, afirma.

En segundo lugar, habla del nuevo marco laboral, que debe impulsar la flexibilidad, la diversidad y nuevas formas de trabajo. “Se persigue que el nuevo convenio dote de un marco de estabilidad laboral para los próximos años, siguiendo lo conseguido con el anterior, permita una gestión más flexible, con iniciativas como la simplificación del esquema de categorías profesionales, y avance de manera decidida en la diversidad y en las nuevas formas de trabajo”, indica Gayo.

En tercer lugar, el ejecutivo alude a la evolución de la plantilla, con el Plan de Salidas Voluntarias. “Se propondrá a los sindicatos implementar un plan de suspensión individual voluntaria (PSI) a ejecutar en el ejercicio 2019”, dice Gayo, que precisa que está ideado para mayores de 53 años. “Tendrá carácter voluntario y no incluye al colectivo de directores. Sus condiciones concretas se supeditarán al desarrollo de la negociación con los representantes de los trabajadores”, indica. Gayo añade que Telefónica seguirá apostando por atraer nuevo talento y empleo joven mediante el programa becas Talentum entre otros y así poder incorporar nuevos perfiles acordes con las nuevas necesidades.

Sobre la firma

Santiago Millán Alonso
Es periodista de la sección de Empresas, especializado en Telecomunicaciones y Tecnología. Ha trabajado, a lo largo de su carrera, en medios de comunicación como El Economista, El Boletín y Cinco Días.

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