Los acreedores ultiman la inyección de la liquidez en Dia a un interés del 9%
Fridman acepta un rendimiento alto para reducir el papel de los fondos
Dia está a punto de respirar tranquila por primera vez en meses. La pesadilla está cerca de terminar. Solo resta que los acreedores inyecten los 380 millones de dinero nuevo y que amplíe capital por 500. Letterone está dispuesto a doblar la apuesta y que los bancos, con los que ha negociado hasta la extenuación, tengan un premio si le acompañan en su misión de reflotar el grupo de supermercados. Quiere que vuelvan a considerar Dia como un negocio y está dispuesto a tirar de talonario. Pagará en torno al 9% por la nueva liquidez, según fuentes financieras. Se espera que el acuerdo se cierre en las próximas horas.
Diez bancos llegaron el pasado 20 de mayo a un acuerdo para salvar Dia. Le renovaron créditos por más de 900 millones hasta marzo de 2023 a tipos de interés del 2,5% en los mejores casos. La estrategia de los siete hedge funds que compraron la deuda a JPMorgan, a Commerzbank y también parte de la de Barclays, con descuentos en el entorno del 40%, pasaba por participar en la inyección de esa liquidez.
Pero la negociación es complicada con estos inversores oportunistas, que exigen rentabilidades en el entorno del 10%. Mientras, Letterone ofrecía un 5%, como publicó CincoDías el pasado 12 de junio. Los bancos se conformaban con menos pero no estaban dispuestos a cubrir totalmente los 180 millones del tramo reservado a los acreedores actuales. El órdago de Fridman, con casi un 70% del capital, es elevar el tipo de interés hasta el entorno del 9% para que la mayoría de las entidades financieras participe en la inyección de dinero nuevo y se reduzca así la aportación de los hedge funds. La primera fecha límite venció el 15 de junio y después se amplió hasta el viernes 21. Las conversaciones amenazaban con eternizarse ante el elevado número de negociadores.
El tiempo corre, y el dinero nuevo es crucial para que se ejecute la ansiada inyección de capital de 500 millones. Se reparará así la solvencia de Dia y los círculos de liquidez del grupo volverán a funcionar.
Esa nueva liquidez se estructuró en dos partes. Una de 200 millones de euros abierta a cualquier inversor y otra de 180 para los 17 prestamistas actuales. Uno de los temas de discusión era el tipo de interés aplicado a cada tramo. Las fuentes financieras consultadas consideran que una posibilidad es que Dia pague el mismo precio a ambos tramos.
Todo el dinero nuevo tendrá prioridad de cobro en caso de problemas. Los 200 millones de euros abiertos al público tenían en principio una duración de tres años, mientras que los 180 millones de los acreedores actuales se dividían en 100 con vencimiento también en 2022 y otros 80, destinados a pagar a proveedores, que serían devueltos en el plazo de un año salvo que Dia siguiera necesitándolos.
Acicates
El aliciente de los acreedores actuales residía en que su participación en el nuevo préstamo eleva de forma automática la calificación de su deuda antigua. Santander, BBVA, Barclays y Société Générale, Bankia, CaixaBank Deutsche Bank, BNP Paribas, ING y Mitsubishi UFJ Financial Group (MUFG) lograrían que su crédito peor calificado subira un escalón en ranking. La pirámide comienza con los 380 millones de euros nuevos, continúa con los préstamos renovados de los casi 900 millones de liquidez que la banca le inyectó el pasado diciembre y termina con los préstamos antiguos. Participar en el crédito que se negocia ahora subiría la categoría del crédito del tercer al segundo escalón.
La primera medida del consejero delegado de Dia, Karl-Heinz Holland, ha sido la de racionalizar los gastos. La cohorte de asesores que trabajó con la cúpula anterior ha sido despedida. Llegaron a estar en nómina los bufetes Uría Menéndez y Clifford Chance, la consultora tecnológica NMR, Morgan Stanley, Rothschild, Oliver Wyman y Boston Consulting Group (BCG), Houlihan Lokey, KPMG y PwC.
Entre octubre y marzo, la factura en asesores de Dia ascendió a más de 35 millones de euros, cifra equivalente del beneficio bruto de explotación (ebitda) ajustado de la compañía en el periodo.