García-Prieto: “Nuestra ambición es demostrar que se puede hacer banca de otra manera”
“Es el momento de cambiar el sector financiero. Hay que poner un propósito al dinero” “Si toda la banca reportase la huella de carbono que genera su actividad, el cliente podría decidir con que banco quiere trabajar”
Triodos Bank llegó a España en 2004. Fue fundada en Países Bajos en 1980. En la actualidad está presente también en Bélgica, Reino Unido y Alemania. Además, opera en otros lugares de Europa, América Latina, Asia y África, a través de fondos de inversión. Forma parte de la Alianza Global por una Banca con Valores, que agrupa a 25 entidades de banca ética a nivel internacional. En España su máximo ejecutivo es Mikel García-Prieto, un banquero totalmente atípico, que va de un sitio para otro con su mochila explicando con entusiasmo lo que es y dónde quiere llegar Triodos Bank. “Es el momento de cambiar el sistema financiero. Si queremos unas finanzas sostenibles Triodos Bank puede ser un buen ejemplo de lo que pueden ser esas finanzas y sostenibles y con valores. Hay que poner un propósito al dinero”, declara totalmente convencido de que si se quiere se puede cambiar la imagen de la banca, García-Prieto (Vitoria-Gasteiz, 1973), director general de Triodos Bank en España y presidente de la Fundación Triodos. Este ejecutivo, a quien le gusta montar a caballo por el campo y cuidar su pequeño huerto casero con sus tres hijos, está vinculado a la entidad desde que el banco de origen holandés decidió instalarse en España.
- R. ¿Se ha puesto de moda la banca ética y sostenible, o solo lo parece?
- R. Sí, ha pasado a estar en la primera línea de las agendas del Gobierno, de la banca, de los empresarios. Es el momento de cambiar el sector financiero. Hay que poner un propósito al dinero. A nuestros clientes les hacemos cuatro preguntas, las tres primeras son las típicas financieras sobre liquidez, rentabilidad..., pero también le preguntamos en qué vamos a utilizar su dinero. Nosotros solo financiamos proyectos que aportan un valor social. Nuestra experiencia nos ha llevado a ser una referencia de futuro para el sector en banca ética y, además, rentable. Invertimos en el sector medioambiental, en renovables, en movilidad sostenible, en construcción sostenible, en eficiencia sostenible, en agricultura ecológica, en el ámbito social invertimos en salud, educación, en el cuidado de las personas mayores, en la inserción social y laboral,…Publicamos todas nuestras inversiones. Todo con absoluta transparencia. A los ahorradores les contestamos qué hacemos con su dinero, y a las empresas les aportamos financiación especializada con compromiso a largo plazo con el desarrollo del sector. Un buen ejemplo es el de las renovables. Nosotros empezamos en 1989 financiando renovables y al día de hoy seguimos. No invertimos solo porque sea un buen negocio, sino porque creemos que es necesario desde un punto de visto social. Eso cambia la visión y los principios de cómo se gestiona el banco.
- R. ¿Están satisfechos con los beneficios y rentabilidad del banco?
- R. Sí. En 2018 hemos ganado a nivel de grupo 38 millones de euros, es un buen resultado, y hemos tenido un crecimiento en los préstamos de un 19%, cuando el crédito a nivel nacional está aún reduciéndose. Es una muy buena noticia para Triodos porque nos muestra un buen espejo de lo que hacemos, y de que en las empresas y sectores que financiamos están en pleno crecimiento. Somos el país de Europa que más producto ecológico produce, y eso es una tendencia para el resto de Europa. Ayudamos a financiar, pero también a transformar la sociedad.
- R. ¿Les ha servido de algo ser el primer banco sostenible?
- R. Ha servido de mucho. Llevamos casi 40 años con este modelo de banca. Para nosotros no es una moda, es una concepción general del banco. Se puede entender el sistema financiero de otra manera. Disfrutamos de una credibilidad que no es un lavado de cara, sino que hemos demostrado que estamos de verdad al servicio de la sociedad.
- R. ¿El beneficio es positivo, pero la rentabilidad es muy baja, el 3,6%?
- R. No cotizamos y esa es una decisión consciente. Nuestra rentabilidad históricamente ha estado entre el 4% y el 6%, cuando la banca estaba en dos dígitos o más, en la crisis bajaron a un dígito o en negativo, y nosotros seguíamos estando en positivo en un 4% o 6% porque nuestro modelo de negocio tiene mucho que ver con la economía real. Ofrecemos de media una rentabilidad del 5% que nosotros creemos razonable. La pregunta es cómo equilibras la rentabilidad con el impacto social, podemos comprar el producto más barato con una cierta responsabilidad, pero el producto ecológico es más caro que el convencional, Cuando preguntamos a los clientes toman la decisión encantados, renunciando a cierta rentabilidad en favor de un impacto social positivo. La fórmula está en ser transparente y en saber explicar el modelo. Por ejemplo, somos la primera entidad en incluir la huella de carbono en nuestros informes. Estamos empezando a contar cuál es la huella de carbono que genera todo nuestro porfolio. Si logramos que todo el sector financiero reporte la huella de carbono que tiene su actividad, los ciudadanos podrán decidir mejor si quieren trabajar con este u otro banco por la rentabilidad o también por el impacto ecológico que tiene.
- R. Ahora otros grandes bancos, como BBVA quieren protagonizar el cambio hacia unas finanzas sostenibles. ¿Puede eclipsarles?
- R. Es positivo, que exista la necesidad de que el sistema financiero quiera posicionarse en la sostenibilidad es positivo porque vamos por un camino de no retorno. Pero lo que también es importante es tener un relato real, no solo trabajar en las finanzas sostenibles para recuperar la reputación perdida. Cuando de verdad quieres convertirte en un banco sostenible tienes que hacer al menos tres cosas: financiar la economía verde, dejar de financiar las actividades contaminantes, y esto es lo más importante, financiar modelos de negocio que generen una redistribución equitativa de la riqueza. Hay que dejar de generar cada vez más desigualdad. Nuestro desafío es conseguir esa misión mixta en tu balance, mientras que el resto de la banca todavía está iniciando el poner recursos al servicio de la economía verde. No es solo contar la historia que hoy toca.
- R. Triodos fue el primer banco en dar una hipoteca verde
- R. En 2013 lanzamos la hipoteca Triodos, que tiene el tipo de interés vinculado a la presencia energética de la vivienda. Cuanto mayor es la eficiencia energética de la vivienda menor es el tipo de interés. Esta hipoteca está funcionando fenomenal, y de hecho, ahora estamos trabajando en un proyecto con la Comisión Europea para crear un estándar de hipoteca verde. Ese rol de pioneros nos permite aportar mucho valor, nuestro objetivo no es crecer por crecer. Nuestra ambición es demostrar que se puede hacer banca de otra manera. La banca contamina de acuerdo a lo que financia a sus clientes. Y eso es medible.
- R. ¿Le ha venido bien la mala reputación de la banca?
- R. Lo que nos ha venido bien es el cambio de conciencia social. La sostenibilidad ya no sea un tema de ecologistas nos ha venido bien. Pero los problemas de la banca nos afectan, somos un banco. Ahora tenemos más de 200.000 clientes en España, ya representamos una inquietud en la sociedad española. Tenemos un camino dentro de la sociedad española muy amplio para recorrer. Para nosotros no es una moda, es una concepción general del banco. El sistema financiero necesita reconciliarse con la sociedad. Y esta es una extraordinaria oportunidad.
- R. ¿Cuál es el perfil de vuestro cliente?
- R. Hace cinco años eran los jóvenes los que traían a sus padres. Ahora hemos pasado de ser el banco de los adheridos defensores del medioambiente a ser el banco del sentido común.