Las ventas de coches diésel se hunden un 48% en Baleares tras el veto al gasóleo
La comunidad lidera la caída de las ventas del mercado de vehículos nuevos, con un retroceso del 26%
El mercado de coches nuevos ha caído en España de manera generaliza en los últimos siete meses, pero es Baleares donde más se está notando la bajada de las matriculaciones, con una caída del 25,9% en los dos primeros meses del año. El retroceso es especialmente importante en los coches diésel, que han disminuido sus ventas un 48%.
“Parte de la caída se explica por el retroceso del canal de rent a car”, señalan desde Faconauto, asociación que representa a los concesionarios, a CincoDías. Esta canal se ha desplomado un 70% en los dos primeros meses de 2019 en Baleares.
El mes de marzo no es fácil de comparar en este segmento, ya que el año pasado la Semana Santa tuvo lugar en marzo (por eso no se incluyen los datos de matriculaciones de este mes, donde las ventas de turismos retrocedieron un 34% en Baleares), una época en la que las alquiladoras suelen comprar coches. “En los últimos años las compañías de rent a car han comprado 20.000 coches de más” y ahora el sector se está acomodando a la demanda, explican desde la asociación. Además, en el motor achacan el retroceso del rent a car a una recuperación de otros destinos turísticos mediterráneos que compiten con España, como Egipto y Túnez.
En Faconauto culparon, a su vez, de la bajada del mercado a las expectativas generadas por la Ley de Cambio Climático aprobada por el Gobierno Balear en febrero, que prohíbe la circulación de nuevos coches diésel a partir de 2025. Los matriculados anteriormente podrán seguir circulando. “Es una medida poco estudiada porque no se ataca a los vehículos de gasolina con motores grandes que consumen mucho más”, señalan representantes de la asociación en Baleares. “Esperamos que si hay un cambio de Gobierno esta ley se eche para atrás”, añadieron. El canal de particulares, que es el que más volumen de ventas genera, retrocedió un 15,5% en los dos primeros meses del año.
Anfac, la Asociación Nacional de Fabricantes de Coches, también ha culpado de la caída a esta ley y pone como ejemplo de buenas políticas al País Vasco, que ha puesto en marcha un plan de achatarramiento “que está viendo sus buenos frutos de inmediato”. “Son estrategias positivas y no prohibicionistas las más idóneas para estimular la demanda de vehículos de bajas emisiones”, señalan desde la patronal.
La caída de los vehículos de combustión (los coches de gasolina también retroceden, pero menos que los diésel, un 22,5%) tampoco se ha traducido, de momento, en una mayor compra de vehículos eléctricos e híbridos enchufables.
Apenas se vendieron 37 unidades de este tipo de coches hasta febrero en Baleares, uno menos que en los dos primeros meses de 2018, según datos de Aedive, la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico. Su director gerente, Arturo Pérez de Lucía, apoya la medida de Baleares que, según explica, fue consensuada con “la mayoría de los responsables de movilidad eléctrica de diversos fabricantes” que coincidieron en “que podrían suministrar sin problemas los coches eléctricos que demanda este plan y que el hecho de que la ley incluyera un calendario, permitía a los fabricantes una adecuada planificación”.
Denuncia contra la legislación balear
“Incumplimiento del derecho de la Unión Europea”. Anfac, la Asociación nacional de Fabricantes de Coches, denunció en enero de este año ante la Comisión Europea y el Consejo para la Unidad de Mercado, dependiente del Ministerio de Economía, la Ley de Cambio Climático y Transición Energética del Gobierno de las islas Baleares, por la cual los automóviles diésel no podrán circular por las islas a partir de 2025 y el resto de vehículos de combustión a partir de 2035 (incluidos los coches de gas e híbridos). “Estas medidas están huérfanas de cualquier respaldo técnico o científico y suponen un claro incumplimiento del derecho de la Unión Europea”, dijeron desde el lobby.