Los cinco retos de la inversión sostenible en 2019
Los productos ASG no son un nicho: equivalen ya a un cuarto de todos los activos gestionados
La inversión ASG, que aplica los criterios Ambientales, Sociales y de Gobernanza, ha dejado de ser una inversión nicho. Los productos de inversión clasificados como ASG en todo el mundo suman más de 20.000 billones de dólares (aproximadamente 17.539 billones de euros) bajo gestión, aproximadamente una cuarta parte de todos los activos gestionados, según la revista Forbes.
También en España la inversión sostenible continúa creciendo. De acuerdo con el último informe publicado por Spainsif, la Asociación Española de Inversión Sostenible, las inversiones sostenibles y responsables en España han registrando una tasa de crecimiento del 10% entre los años 2015 y 2017, alcanzando los 185.614 millones de euros, lo que representa una cuota del 46 por ciento sobre el mercado nacional de instituciones de inversión colectiva y fondos de pensiones.
A medida que la preocupación por los riesgos climáticos aumenta, junto con la evidencia de que la inversión ESG puede batir consistentemente al mercado, un tercio de los inversores se muestran dispuestos a incrementar su exposición a inversiones sostenibles en los próximos dos años. Al mismo tiempo, el mercado de bonos verdes continúa su expansión, indicando la creciente popularidad de las inversiones verdes entre las compañías, de acuerdo con Refinitiv, la anterior Thomson Reuters.
Por su parte, la casa de análisis financiero MSCI publicaba, también a finales de 2018, una guía sobre las tendencias clave en ASG para 2019, entre las que identificaba 1) Residuos Plásticos, 2) Regulación ASG, 3) Riesgo Climático, 4) Datos y Transparencia y 5) Liderazgo de los Consejos de Administración en la Transparencia ASG, como los temas críticos para empresas e inversores. En términos generales MSCI sugiere que el mercado está orientándose hacia objetivos a largo plazo, más que a retornos a corto plazo, como consecuencia de los temores de que la economía pudiera enfrentarse a otra crisis financiera en un futuro no muy lejano. Aun así, las oportunidades y los retos del creciente mercado ASG continúan siendo ignorados.
Detrás de muchos de los temas de inversión ASG para 2019 hay costes y oportunidades que se pueden haber dejado pasar por alto y que pueden tener algo en común: actuar hoy podría suponer una diferencia el día de mañana. Veamos los cinco temas ASG que MSCI considera como más importantes para 2019.
- Los residuos plásticos: La creciente preocupación sobre residuos puede cambiar el entorno regulatorio durante 2019, forzando a las compañías a abordar su reducción, no ya como una prioridad de marketing, sino como un reto corporativo importante. Con la decisión de China de prohibir la importación de residuos a finales del pasado año, muchos otros países, entre ellos Reino Unido, Alemania y Francia, se han visto forzados a buscar otros destinos para sus residuos o a tomar medidas más drásticas para reducirlos.
- Incremento de regulación ASG para los inversores. Promovido en parte por las directrices del Equipo de Trabajo sobre Información Financiera Relacionadas con el Clima, puede constatarse que la regulación financiera ASG va en aumento, anticipándose que no serán las compañías emisoras las únicas que tendrán que reforzar la información ASG que publiquen durante el año, sino también los gestores de activos y los propios accionistas o bonistas. De las más de 170 medidas regulatorias, o casi regulatorias, ASG propuestas durante 2018, el 80 por ciento tienen como objetivo los inversores institucionales, no los emisores. Y se espera que esta tendencia continúe en 2019, con un mayor número de medidas sobre las funciones y obligaciones de los inversores, que potencialmente impulsarán el desarrollo de políticas de inversión capaces de abordar la ASG de manera más integral, como un riesgo relevante para la inversión.
- Riesgo climático. Como continuación del informe publicado el otoño pasado por el Panel Intergubernamental de Cambio Climático, en el que se señalaban por orden de prioridad los múltiples daños planteados por un calentamiento global por encima de la marca de 1,5 grados, y la tendencia hacia objetivos de emisiones netas cero, los gestores tendrán que velar crecientemente por la viabilidad de sus carteras, teniendo en cuenta los riesgos relacionados con el clima, según sugiere MSCI. Concretamente apunta al mercado inmobiliario, en el que podrían comenzar a aparecer presiones en regiones expuestas a mayores riesgos de clima extremo, erosión e inundaciones costeras, a medida que los inversores toman mayor conciencia del impacto del clima.
- Uso más efectivo de los datos ASG. Una tendencia a la que sin duda está ayudando de forma significativa la revolución Big Data, en tan rápido proceso de aceleración que IBM estimaba recientemente que el 90 por ciento de los datos utilizados hoy se crearon en los últimos dos años. El mayor foco en la ASG y la transparencia ha supuesto también un fuerte aumento en datos ASG, con compañías y gestores de activos crecientemente dispuestos a aprender más sobre sus inversiones y operaciones, como es el caso de la gestora de Goldman Sachs, con su fondo GOLDMAN SACHS GLOBAL EQUITY PARTNERS ESG PORTFOLIO.
- Liderazgo de los consejos de administración en la transparencia ASG. En un mundo en el que las marcas y sus valores son objeto de un escrutinio constante y en el que la cotización de las acciones puede caer repentinamente, como consecuencia de la mayor cobertura dada a los escándalos en las redes sociales, el riesgo reputacional puede resultar difícil de prever para los inversores. Sin embargo, tal como argumenta MSCI, los inversores dispondrán tanto de la voluntad como del poder para minimizar tales riesgos por adelantado. (Véase, por ejemplo, el escándalo Diesel de Volkswagen). Durante el presente año, inversores y gestores de activos están buscando fórmulas para acelerar rotaciones más frecuentes en los consejos directivos, con el objetivo de mejorar su control e índice de diversidad. En esta línea, el fondo de pensiones CalPERS’ de los empleados públicos de California, se ha comprometido a votar contra todos los directivos que excedan los 12 años en el puesto.
A medida que el cambio climático continúa haciéndose notar y la industria gira hacia modelos de negocio con emisiones de carbono más reducidas, los reguladores están haciendo que los inversores piensen más en la forma en que se va a utilizar su dinero. Así pues, los inversores podrían mostrarse cada vez más exigentes con las compañías cotizadas para que evalúen adecuadamente la viabilidad de sus modelos de negocio en un mundo más cálido. Y puede que se muestren dispuestos a votar contra las compañías y directivos que incumplan con el programa verde.
Paula Mercado es Directora de análisis de VDOS