El Consejo de Economistas rebaja su previsión de crecimiento de 2019 por los planes del Gobierno
Estiman un alza del PIB del 2,2% por la aplicación de “medidas procíclicas en plena desaceleración” Consideran que el alza de impuestos, salarios y cotizaciones rebajará el empleo y el consumo
El PIB español creció un 0,6% entre julio y septiembre, según los datos publicados este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE) con lo que el crecimiento del país mantiene su ritmo de los dos trimestres anteriores y mantiene el pulso frente a la desaceleración general de la economía, frente al 0,4% que crece la del conjunto de la UE. Sin embargo, los planes económicos del Gobierno hacen recelar a los economistas de cara a 2019.
Así, el Consejo General de Economistas (CGE), presidido por Valentín Pich, ha rebajado este miércoles su previsión de incremento del PIB del próximo año en una décima, hasta el 2,2%, frente al 2,5% con el que esperan que se culmine 2018.
“Las medidas procíclicas tomadas por el Gobierno en plena desaceleración de la economía, no ayudan a estimular el crecimiento”, advierten desde el CGE, donde concretan que “medidas previstas como la subida de impuestos, del salario mínimo, de las cotizaciones a la Seguridad Social de las empresas, podrían redundar en la pérdida de empleo y en tal sentido en el consumo”, que tiene un fuerte peso en el PIB español, así como causar una “reducción de las inversiones de las empresas”.
Más allá, los economistas subrayan que Cataluña, que tiene un peso del 20% en el conjunto de la economía nacional, ha ido frenando su ritmo de crecimiento hasta equipararse a la media del país, cuando venía superándola.
Por otra parte, el CGE estima que la tasa de paro caerá al 14,75% a cierre de este año y al 14% el próximo, “ahora bien, a costa de que el empleo que se crea es de baja calidad”. En cuanto a la inflación, los economistas mantienen su previsión de que el IPC será del 1,8% este año y del 1,9% el que viene, mientras que las exportaciones se mantendrán en el 3%, y la tasa de ahorro se elevará del 5,3% al 5,5%.
“Factores como la inestabilidad política, la inseguridad jurídica o una política fiscal cortoplacista, pueden poner en riesgo el óptimo crecimiento de nuestra economía e incrementar la desconfianza en nuestro país”, advierte la nota del CGE.