Musk debe cuidar el apalancamiento
Excluir Tesla de Bolsa no es tan arriesgado como parece, dada la fe de los accionistas en el fundador
Elon Musk ya tiene otra forma de entretenerse. El martes anunció que está “valorando sacar Tesla de Bolsa a 420 dólares. Financiación asegurada”. No es tan arriesgado como parece. Pero una compra debería moderar su apalancamiento.
La supuesta oferta de Musk valora Tesla en unos 72.000 millones de dólares. Aunque los reguladores estadounidenses han suavizado recientemente su postura sobre los préstamos apalancados, los bancos probablemente prestarían solo un tercio de eso para mantener la deuda en seis veces el ebitda. Siendo generosos, y aplicándolo a la estimación de Morgan Stanley de casi 6.000 millones de dólares de ebitda en 2022, y restando la deuda actual de Tesla, quedan unos 25.000 millones de dólares para comprar acciones.
Puede parecer que Musk está a 50.000 millones de su objetivo. Pero no va a vender su propia participación del 20%. Y sus accionistas siguen teniendo mucha fe en él. Antes de sus últimos tuits, la acción cotizaba a unas 40 veces las ganancias estimadas para 2020. Eso sugiere que probablemente muchos pequeños accionistas seguirían adelante y aceptarían la oferta de Musk de mantener sus inversiones si Tesla saliera de Bolsa.
Por la misma razón, debería ser capaz de persuadir a muchos de los 20 principales propietarios para que permanezcan en los asientos de pasajeros. Poseen más del 50% de las acciones. Incluso si un buen número eligiera salir del vehículo, hay un montón de otros inversores a quienes cazar. El Public Investment Fund saudí, por ejemplo, ha acumulado una participación de 2.000 millones de dólares este año, según el FT. SoftBank ya ha inyectado dinero en Uber y General Motors, y su Vision Fund cuenta con 100.000 millones de dólares.
Musk se ha mostrado irritado por perder su estatus de irreprochable niño prodigio de Silicon Valley. En mayo se burló de los analistas por hacer “preguntas aburridas y estúpidas”. Tesla es también la acción con más operaciones cortas de las Bolsas de EE UU.
Sacar la compañía del parqué acabaría con muchas de estas molestias. Por supuesto, no resolvería el “infierno de producción” en el que está Tesla desde hace más de un año. Pero es una razón más para evitar las condiciones traicioneras que puede crear un alud de deuda.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías.