Nadie llegó tan alto: Apple marca su máximo histórico y roza el billón de dólares de valor en Wall Street
Sus acciones se disparan más de un 5% tras anunciar la buena marcha de su negocio móvil y de servicios En el último trimestre vendió 41,3 millones de teléfonos iPhone, un 1% más frente al mismo periodo de 2017
“No podríamos estar más contentos con cómo van las cosas”, dijo Tim Cook, presidente ejecutivo de Apple, minutos después de presentar los últimos resultados trimestrales. Y no es para menos. El crecimiento de la compañía disparó este miércoles las acciones de la multinacional más de un 5%, superando los 200 dólares, su máximo histórico, poniendo a tiro de piedra el hito de convertirse en la primera empresa en Wall Street que supera el billón de dólares de capitalización bursátil. Un hito que globalmente alcanzó la empresa PetroChina en 2007, y una medalla que también buscan apuntarse otras tecnológicas estadounidenses, como Google, Amazon y Microsoft.
Los títulos de Apple se dispararon después de que la compañía batieran las previsiones de los analistas en su tercer trimestre fiscal (abril-junio), gracias a las ventas del iPhone X y al tirón de su actividad de servicios. También tras avanzar buenas expectativas para su cuarto trimestre, cuando la empresa suele lanzar sus nuevos iPhone.
Apple, con un valor en bolsa al cierre del miércoles de 988.400 millones de dólares, ha demostrado de nuevo su capacidad para seguir sorprendiendo al mercado, que ha castigado en los últimos días a otros grandes valores tecnológicos como Facebook, Twitter y Netflix. El fabricante del iPhone registró unos ingresos entre abril y junio de 53.265 millones de dólares (45.580 millones de euros), un 17% más frente al mismo periodo del año anterior, y por encima de las expectativas del mercado, que calculaba 52.300 millones de dólares. Igualmente, logró elevar un 32% su beneficio neto, hasta los 11.519 millones.
La firma alcanzó esa cifra pese a haber vendido solo un 1% más de iPhone en comparación con el mismo trimestre de 2017. En total, 41,3 millones de unidades (por debajo de los 41,8 millones que esperaban los analistas). Sin embargo, el aumento de precio de su popular teléfono elevó los ingresos de su división móvil un 14,4%, hasta casi los 30.000 millones de dólares. El precio promedio de venta del iPhone se situó en 724 dólares, muy por encima de los 694 dólares esperados.
La buena marcha de su unidad de servicios, que incluye negocios como la App Store, Apple Music, Apple Pay o iCloud, también ha contribuido al crecimiento de la compañía. Esta área obtuvo unos ingresos de 9.550 millones de dólares, un 31% más. Este resultado es una prueba más al inversor de que Apple está logrando reducir su dependencia del iPhone, que aún supone en torno a un 60% de su negocio, aunque la cifra tiende a la baja. Algunas analistas apuntan a que Apple podría alcanzar los 48.000 millones de dólares de ingresos por servicios en el tercer trimestre de 2019, adelantándose casi en un año a los planes marcados por la compañía.
Por regiones, todas excepto Japón reportaron a Apple un crecimiento de dos dígitos. En China, uno de los mercados más estratégicos, las ventas subieron un 20% hasta 9.550 millones, y ello pese a la competencia de Huawei, Xiaomi y Oppo.Para el actual trimestre, Apple espera un beneficio operativo de entre 9.950 y 8.050 millones, e ingresos de entre 60.000 y 62.000 millones, lo que supondría unos crecimientos de entre el 14% y el 18%, respectivamente.
Tensiones EE UU-China
Cook restó importancia a las preocupaciones sobre cómo la guerra comercial entre EE UU y China podría afectar al negocio de la compañía. El directivo aseguró que Apple no se ha visto afectada directamente por los aranceles vigentes hasta ahora, pero apuntó que están revisando las implicaciones que tendrán los nuevos aranceles del 25% a productos importados de China por valor de 200.000 millones de dólares que ha anunciado Donald Trump.
Cook, no obstante, se mostró optimista sobre este asunto y dijo que espera que estas tensiones se relajen. Pero quizás esta guerra comercial entre EE UU y China esté detrás de que Apple no consiguiera ayer tocar definitivamente el billón de dólares. Una circunstancia que tampoco parece preocupar a la compañía, que lleva 38 años cotizando. La multinacional debutó en bolsa el 12 de diciembre de 1980 a 22 dólares la acción. En todo este tiempo, ha pasado de valer 0,39 dólares –precio de debut ajustado tras los cuatro splits realizados por la firma– a 200 dólares, un 51.000% más. Los inversores que hayan permanecido desde entonces habrán multiplicado por más de 500 veces su dinero inicial, sin contar con los dividendos cobrados.
Un camino con altibajos
Los números, sin embargo podrían hacer pensar que todo ha sido un camino de rosas, pero no. Apple empezó fabricando ordenadores y sus míticos Mac la convirtieron en una empresa de culto en los años 80, pero estuvo al borde de la quiebra a finales de los 90, con John Sculley al frente y en plena rivalidad con IBM y otros fabricantes de PC. La empresa se reinventó con la incorporación de nuevo en 1996 de Jobs, que tras lanzar el iPod en 2001 se ha mostrado imparable, gracias al éxito del iPhone (se estrenó en 2007), al iPad (2010) y a su apuesta por los servicios (Apple Pay, Apple Music, iCloud) con los que sigue armando un ecosistema apenas sin fisuras.
Aunque la muerte de Jobs sembró dudas en el mercado y se puso en tela de juicio la capacidad de Cook para liderar Apple, el valor de la compañía sigue subiendo. La firma ha logrado atraer a inversores como Warren Buffett; en la actualidad su segundo mayor accionista (tiene un 4,7% del capital). El primero es la gestora de fondos Vanguard.
La política de Apple de repartir dividendos ha resultado también un gran atractivo para los inversores. Según Janus Henderson, Apple es la tercera empresa del mundo que más dinero destina a sus accionistas tras la petrolera Royal Dutch Shell y China Mobile. En los últimos seis años, Apple ha destinado 75.000 millones en dividendo, además de otros 200.000 millones a recompra de títulos.
Apple y Huawei, la cara del móvil; Samsung, la cruz
La fuerte demanda de los iPhones más caros de Apple supone un duro revés para su más directo rival, Samsung, hoy número uno en el mercado mundial de smartphones. El fabricante surcoreano decepcionó ayer a los inversores tras anunciar unas ventas menores a las esperadas de su último Galaxy S9, el móvil estrella de la compañía.
Con todo, Apple se enfrenta a una competencia cada vez más dura en el mercado de los teléfonos inteligentes, que sufrió una caída del 0,3% el año pasado, según los datos de IDC.
Mientras, la empresa china Huawei, que reportó este martes un crecimiento en sus ingresos del 15% en el primer semestre del año, superó a Apple convirtiéndose en el segundo vendedor de smartphones del mundo en el segundo trimestre, según la firma de investigación de mercado Canalys. Apple pasa a ocupar la tercera plaza, tras Samsung y Huawei.