Ángel Ron: “La caída de Popular fue un atropello flagrante”
El banco siempre "ha mostrado su imagen fiel" El banquero carga contra el accionista mexicano Del Valle y contra su sucesor Saracho
El que fuera presidente de Banco Popular hasta principios de 2017, Ángel Ron, ha dado muestras de su excelente memoria y oratoria. En una situación bastante incómoda para el que fuera empleado de Popular durante 32 años, incluido el periodo de su presidencia, ha iniciado su comparecencia en la comisión que investiga la crisis del sistema financiero, incluido la resolución de Banco Popular, "es penoso que los accionistas haya perdido todo sin transparencia, sin justiprecio, fue un atropello flagrante".
El banquero, en un discurso totalmente hilado, ha cargado contra el que fuera uno de los accionistas privados más significativos del banco, y consejo, Antonio del Valle, y contra su sucesor Emilio Saracho, además de contra la Junta Única de Resolución (JUR), de la caída de la entidad.
Ron, que ha decidido despacharse a gusto contra lo que podría considerarse sus enemigos en la entidad, Del Valle y Saracho, ha asegurado que de la noche a la mañana"más de 300.000 accionistas de un banco cotizado, nacido en 1926" perdieron todo, "de repente en una noche (del 6 al 7 de junio de 2017)". Ante ello, Ron considera que hay que encontrar a los culpables, más cuando "los accionistas eran los únicos dueños de un banco que era una sociedad privada, y debido a que el derecho fundamental y que , en el caso de Popular, ha sido conculcado,esto debe tener una reparación".
El banquero ha asegurado que él también ha perdido sus ahorros y los de su familia, un millón de euros. "Soy un afectado" .
Afirmó sobre su gestión que "puede haber un debate sobre su ka gestión fue mejorable o no. Pero esto requiere de una investigación para llegar hasta el final y encontrar responsables".
Sobre el proyecto de Sunrise, el vehículo que quería crear para traspasar todo el lastre del ladrillo del banco, ha asegurado que contaba con el visto bueno del Banco de España, y que fue su sucesor, Emilio Saracho quien lo paralizó no sabe muy bien por qué.
Ha recordado que el banco siempre ha sido solvente, incluso el día de su intervención el 6 de junio de 2017. Ha añadido "no tengo nada que ocultar. Las cuentas siempre han estado bien", "siempre he dicho la verdad y Popular ofrecía la imagen fiel" cuando realizó en 2016 la ampliación de capital de 2.500 millones de euros.
Aclaró que fue, justo con esta ampliación, cuando Del Valle le propuso tomar el control de la entidad al invertir más de 1.000 millones de euros. Considera que fue una oferta legal, pero no ética. Y ha declaro que desde esa negativo, el inversor mexicano inició una campaña de descrédito.
Ángel Ron también explicó que Emilio Saracho estaba dispuesto a montar una tómbola para vender Popular. Sin mencionar su nombre, aunque si se refirió a él como su sucesor, ha explicado que ésta había manifestado en conversaciones con él "incluso en presencia de 300 directivos del banco, no conocer los fundamentos de banco comercial. Esto es como si se conduce un avión comercial como si fuera un caza. El avión llega al aeropuerto, pero la tripulación y los pasajeros mueren porque si se empiezan a hacer descensos en picado, al final, lo que ocurre, y ocurrió es que se pierde la confianza".
Saracho procedía de JPMorgan, y cuando llegó a Popular explicó que él no sabía ni venía a gestionar, lo que sabía "era crear valor". para lo que propuso una ampliación de capital con descuento (sería la cuarta en cinco años, y la segunda en un año o una venta a bajo precio. Saracho, que tomó las rienda de Popular, en febrero de 2017, le dijo antes de esa fecha que la acción de la entidad estaba cara y estaba incluso dispuesto a "montar una tómbola para vender el banco", comentario, "que me resultó especialmente desagradable", ha añadido Ron.
"Me dijo que un principio básico en su labor de banca de inversión era infundir pánico", sobre todo en las autoridades, por lo que quería trasladar la idea de que estaba dispuesto a "estrellar el avión en las puertas del Banco Central Europeo".