Trump veta la compra de Qualcomm por Broadcom por razones de seguridad nacional
La operación estaba valorada en 117.000 millones de dólares El presidente prohíbe "cualquier otra fusión equivalente"
El presidente de EEUU, Donald Trump, ha bloqueado por "razones de seguridad nacional" la adquisición del fabricante estadounidense de microprocesadores Qualcomm por su rival Broadcom, domiciliada en Singapur, en una operación valorada en 117.000 millones de dólares (94.970 millones de euros) que hubiera representado la mayor fusión del sector tecnológico.
La decisión del inquilino de la Casa Blanca se ha hecho pública este lunes mediante una orden ejecutiva emitida al cierre de los mercados en EE UU en la que además de impedir la compra de Qualcomm, la compañía asiática deberá abandonar cualquier plan de compra futuro y también deberá abstenerse de proponer consejeros a los órganos de administración de Qualcomm.
"Existen evidencias creíbles que me llevan a creer que Broadcom Limited, empresa organizada bajo las leyes de Singapur, junto a sus socios, filiales o afiliados, incluyendo Broadcom Corporation, una empresa de California, y Broadcom Cayman, domiciliada en Islas Caimán, adquiriendo el control de Qualcomm Incorporated, empresa de Delaware, podrían llevar a cabo acciones que amenazarían la seguridad nacional de EEUU", declaró el presidente de EEUU para justificar el veto a la operación.
Asimismo, en el marco de esta decisión, el presidente de EEUU prohíbe "cualquier otra fusión equivalente, que se llevara a cabo directa o indirectamente" instando a Qualcomm y a Broadcom a renunciar inmediatamente "y de manera permanente" a la transacción, para lo que deberán certificar ante el Comité de Inversiones Extranjeras de EEUU (CFIUS por su sigla en inglés) que han finalizado la operación en consonancia con esta orden ejecutiva.
Además, los 15 potenciales candidatos propuestos por Broadcom ante la Comisión de Valores de EUU (SEC) quedan "descalificados" como posibles miembros del consejo de Qualcomm, que además tiene prohibido a partir de ahora aceptar la nominación o los votos de ninguno de los candidatos.
Por su parte, Broadcom ha emitido un comunicado tras conocer la decisión de la Casa Blanca señalando que "está revisando la orden" y subrayando su "total desacuerdo" con la afirmación de que la transacción planteada represente problema alguna para la seguridad nacional de EEUU.
Broadcom tenía previsto trasladar su sede desde Singapur a EEUU el próximo 3 de abril, un mes antes de la fecha que previamente había anunciado como parte del acuerdo para comprar Qualcomm, después de que CFIUS obligara a la empresa singapurense a aplazar la celebración de su junta general de accionistas, prevista para el pasado 6 de marzo, con el objeto de iniciar una investigación sobre la transacción.