Sareb integrará su negocio residencial en una gran promotora cotizada
La entidad aportará 800 millones en suelos y promociones en la mayor operación de la entidad El 'banco malo' busca convertirse en socio minoritario de la sociedad inmobiliaria conjunta
Sareb ha iniciado un camino no explorado en su corta vida. El conocido como banco malo está estudiando la posibilidad de entrar de lleno en el negocio promotor de viviendas junto a un socio del sector a cambio de aportar suelo a una sociedad conjunta. Así lo aseguran a CincoDías diversas fuentes conocedoras del proceso que acaba de iniciarse.
La Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) ha iniciado un proceso para deshacerse de suelo y promociones en curso por alrededor de 800 millones de euros, según indican las fuentes, lo que se trataría de la mayor transacción de la historia de la entidad.
Pero en esta ocasión, los responsables de Sareb buscan utilizar una fórmula novedosa, que consiste en aportar el valor de los terrenos al capital de una gran promotora, cotizada o que en un futuro esté en Bolsa, a la vez que entra en el negocio de la promoción residencial para captar el alto margen de rentabilidad del negocio de construcción de viviendas.
La operación está en fases iniciales y distintas fuentes explican que el tamaño de la cartera de suelo que Sareb quiere poner a la venta todavía podría variar, así como la fórmula para entrar en el capital de la inmobiliaria que gane el concurso. Desde la entidad se declinó hacer comentarios.
¿Qué es Sareb?
Sareb es una entidad privada creada en 2012 al que se traspasaron los activos tóxicos de los bancos que recibieron ayudas públicas. El compromiso de Sareb es liquidar esos inmuebles y préstamos adquiridos antes de 2027. El 45,90% del capital pertenece al Estado, a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), y el resto está en manos privadas —un total de 32 entidades entre las que se encuentra Santander, Caixabank, Sabadell y varias aseguradoras.
En cualquier caso, Sareb entraría en el capital de la promotora con el interés final de que la empresa conjunta cotice en Bolsa, lo que en un futuro permitiría el banco malo desinvertir con facilidad en el mercado, igual que por ejemplo han hecho Santander y BBVA en el caso del regreso a cotización de Metrovacesa.
La intención de la entidad es entrar como accionista minoritario, cediendo la gestión, en una de las grandes inmobiliarias que protagonizan actualmente el nuevo ciclo alcista en la promoción de viviendas.
Se trataría de una operación muy similar a lo que Santander y BBVA hicieron con Metrovacesa, a la que en los últimos años han engordado aportando suelo de sus balances a cambio de participaciones en el capital. Por ejemplo, en julio pasado los dos bancos inyectaron 1.100 millones en terrenos en una ampliación de capital no dineraria de Metrovacesa.
Entrar en el capital de una promotora permitiría a Sareb, según explican las fuentes, beneficiarse del ciclo alcista de la vivienda, ya que este negocio aporta elevados márgenes de rentabilidad en el desarrollo de las viviendas, mucho mayor que la simple venta de carteras de suelo.
La idea se concretaría en la integración de todo el negocio residencial y de desarrollo de suelo de Sareb en una promotora, ganando en un socio a largo plazo.
Al proceso únicamente se han invitado a un número limitado de candidatos a erigirse como aliado estratégico de Sareb, alrededor de seis potenciales socios, según las fuentes.
Se tratra de la mayor operación desde la constitución de la sociedad en 2012
El perímetro de los activos, de alrededor de 800 millones, convertiría a la operación en la más grande realizada por la entidad presidida por Jaime Echegoyen. Hasta ahora, la mayor venta directa ha sido la llamada cartera Eloise, por 553 millones, adquirida por Goldman Sachs. En inicio, Sareb había considerado incluso una aportación mayor, de hasta 1.200 millones, pero los expertos consideran que sería de mucho más difícil digestión para un socio.
De hecho, los candidatos para integrar los activos de Sareb son muy escasos por el volumen de la operación. Las miradas se posicionan en las grandes empresas cotizadas del sector como Neinor, Aedas y Metrovacesa, además de otras promotoras respaldadas por fondos internacionales y que actualmente no están en Bolsa. En este último caso, se debería analizar la fórmula para que esa empresa acabe en el mercado para facilitar la liquidez que permita a Sareb desinvertir en el medio plazo. En ese caso la lista es mucho más extensa: Aelca (Värde), Vía Célere (Värde), Gestilar (Morgan Stanley), Q21 Real Estate (Baupost), Inmoglaciar (Cerberus), Habitat (Bain Capital) o ASG Iberia (Activum).
Respecto a los plazos que la entidad se ha marcado, las fuentes apuntan a un cierre de la operación para antes del verano, aunque se reconoce la dificultad del proceso para cerrar todos los posibles flecos de la negociación para encontrar un socio estratégico.
Los plazos también pueden estar marcados, según fuentes del sector, por la intención de Sareb de adelantarse a otras grandes operaciones de suelo que se esperan para los próximos meses.
Es el caso de Blackstone, que adquirió el 51% de la cartera del ladrillo proveniente de Popular, unos activos valorados en 10.000 millones de euros. También se espera los movimientos de Cerberus, a través de Haya Real Estate y de Anida —tras hacerse con el 80% de la cartera de BBVA valorada en 5.000 millones— y, por último, de Bain Capital, con ladrillo de Liberbank.
¿Qué ha hecho Sareb en inmobiliario?
Promoción. Sareb comenzó a un ritmo menor la construcción residencial con el desarrollo de promociones en curso heredades por la entidad o de viviendas desde cero en algunos suelos, concretamente en algo más de 4.400 casas. Algunas de estas promociones en pleno desarrollo podrían incluso incorporarse ahora a la operación de aportación de activos a un socio.
Socimi. La entidad también prepara la próxima salida de su socimi Témpore Properties al Mercado Alternativo Bursátil. Dispone de activos por 175 millones en viviendas y trasteros destinados al alquiler.