Cabify sube sus precios mientras los taxistas piden promover "tarifas flexibles"
La compañía reduce la tarifa mínima, pero cobrará más por kilómetro y en momento de alta demanda El usuario conocerá, como hasta ahora, el precio a pagar antes de hacer el viaje
En plena guerra con el sector del taxi y con una dura competencia como la de Uber, Cabify ha decidido llevar a cabo un aumento en la práctica totalidad de sus tarifas. La compañía de alquiler de vehículos con conductor (VTC) anunció este jueves que, a partir de ahora, incluirá un sobrecoste “en momentos de alta demanda”, además de elevar el coste para trayectos más cortos. En concreto, introduce un nuevo precio más alto para los dos primeros kilómetros y sube también los de viajes de entre 2 y 80 kilómetros.
Cabify tenía hasta ahora tres tramos para fijar el precio según las distancias del recorrido: los trayectos inferiores a 20 kilómetros (que cuesta 1,65 euros/km), los que iban de 20 a 80 kilómetros (1,10 euros/km) y si superaba los 80 kilómetros el coste bajaba hasta los 1,05 euros/km.
A partir de ahora, esto cambia. La firma ha introducido un nuevo tramo, que va desde los 0 a los 2 kilómetros y, en este caso, el precio es de 2 euros por kilómetro, es decir, un 21% más de lo que costaba hasta ahora. Igualmente, el coste de los trayectos de entre 2 a 20 kilómetros pasa de 1,65 a 1,70 euros, y los de 20 a 80 kilómetros de 1,20 a 1,25 euros. El precio para trayectos que sobrepasan los 80 kilómetros se mantiene en 1,05 euros.
Cabify, que comunicó igualmente que ha decidido bajar de 6 euros a 5,50 la tarifa mínima, asemeja sus precios a los de Uber, que también llevó a cabo una modificación en sus tarifas el pasado septiembre. Ese mes, esta compañía lanzó un nuevo sistema de precios cerrados para sus viajes, de manera que el usuario conociese de antemano lo que iba a costarle el trayecto. Ahora Cabify contará como Uber con un sistema de tarifa dinámica, pero advirtió que “como siempre, el precio del trayecto seguirá siendo cerrado”.
En una nota, Cabify justificó su decisión asegurando que quiere adaptar las condiciones de su servicio para garantizar su calidad. “En los últimos meses la plataforma ha tenido un incremento exponencial de la demanda que, en algunos momentos, hacía complicado disponer de un vehículo, lo que suponía un mayor tiempo de espera para el usuario”. "Con esta adaptación, respondemos más rápido a las necesidades del usuario y, al mismo tiempo, reforzamos nuestro compromiso con los conductores al equilibrar de forma eficiente la oferta y la demanda", subrayó el director general de Cabify España, Mariano Silveyra.
Los movimientos en las tarifas de Cabify y Uber se producen en un entorno de fuerte tensión con el sector del taxi. Precisamente, los taxistas de Madrid pidieron hace unos días al Ayuntamiento de Madrid promover “tarifas flexibles” con opción de precio fijo para poder competir con las empresas de VTC. En concreto, Fedetaxi ha instado a que se promueva "una modificación pro-competitiva de la Ordenanza Municipal Reguladora del Taxi" para, entre otras cosas, "reformar el modelo de tarifas" promoviendo, en coordinación con el Gobierno regional, "la posibilidad de establecer tarifas fijas en todo tipo de servicios".