_
_
_
_

Las gestoras independientes se mueven a Luxemburgo para vender sus fondos en España

El Gran Ducado permite la contratación de las carteras por parte de particulares La banca bloquea la venta de los fondos españoles de terceros en sus oficinas

Patrimonio en Luxemburgo de fondos de grupos españoles
Carlos Cortinas

El bloqueo de la gran banca a la venta de fondos de inversión ajenos a los de la gestora del grupo es un secreto a voces. La regla general es que los comerciales ofrezcan los productos de fabricación propia, como constató la CNMV en su ejercicio de espionaje (mistery shopping) publicado el pasado febrero.

La trasposición de la directiva europea Mifid 2 para que los mercados funcionen mejor implicará competencia si finalmente se exige asesoramiento de calidad u ofrecer productos de terceros para el cobro de incentivos por comercialización.

Las gestoras españolas ingresaron 2.238 millones de euros en comisiones de gestión, y de esta cuantía entregaron 1.432 a sus comercializadores: más de seis de cada 10 euros se los quedó el vendedor y no el fabricante.

Pero hasta ver cómo queda el panorama normativo, las gestoras independientes se han puesto las pilas y aceleran la mudanza de productos a Luxemburgo para conseguir, paradójicamente, vender en España.

La enésima solución de Economía

 

El ministerio de Economía ha incluido en el borrador de la trasposición de la directiva Mifid 2 una fórmula para hacer accesibles las cuentas ómnibus (cuentas globales con los saldos de los clientes segregados). Así, las posiciones que ya tuvieran los inversores podrán incluirse en este tipo de cuentas y los comercializadores de fondos no tendrán que entregar a las gestoras los datos de los clientes que han contratado esas carteras. Las gestoras no tendrán información crucial de los clientes.

Las gestoras extranjeras sí podían utilizar cuentas ómnibus para vender sus fondos en España. Los intentos por cambiar la situación han sido muchos, pero fue con la reforma de la Ley de Instituciones de Inversión Colectiva de 2013, cuando se reguló su utilización. La mala noticia es que los posiciones existentes de los partícipes no pueden beneficiarse de esta fórmula. La norma propuesta modifica este problema.

Las gestoras españolas acumulan más de 16.000 millones en Luxemburgo. Han quintuplican su patrimonio desde 2012.

 

Más información
Los fondos españoles quintuplican su patrimonio en Luxemburgo desde 2012
Los bancos podrán crear supermercados de fondos sin ceder los datos de clientes

Desde varias gestoras señalan que continúan creando fondos clónicos de best sellers para que los clientes españoles, ya sean altos patrimonios o particulares, puedan acceder a ellos en bancos españoles través de las plataformas de Allfunds, Tressis e Inversis, entre otras.

Las firmas que no tienen redes propias o son de corto alcance han hallado la puerta de atrás para poder entrar en las oficinas de las grandes entidades. “Ahora, pese a que el fondo esté en uno de estos supermercados, el acceso para los clientes de una entidad financiera está vedado, aunque tenga contratada dicha plataforma y el inversor lo pida explícitamente”, señala un gestor. “No quieren competencia para sus productos propios, que son los que más margen les proporcionan”, añaden.

“En mi caso, sí lo ofrecen al gran público con la salvedad de que exigen una inversión mínima monstruosa, muy superior a la que consta en el folleto”, explica el gestor de un fondo de autor de una firma española.

Pero la llave para acceder al minorista es fácil de conseguir, al menos de momento. El mismo producto con sede en Luxemburgo se vende a particulares españoles a través de esas plataformas sin mayores problemas. La migración de las carteras estrella al pequeño país de la zona euro es constante. EDM fue una de las primeras, allá por 2014, cuando lanzó la réplica del EDM Spanish Equity. Una de las razones que adujo fue que el fondo sería “fácilmente contratable a través de las principales plataformas europeas”.

Renta 4 también movió ficha el año pasado y comercializa ocho fondos domicilizados allí con un patrimonio superior a los 130 millones. Cobas AM, de Francisco García Paramés, ha puesto en marcha cuatro fondos clónicos en Luxemburgo, al igual que azValor y otras entidades con productos de gran éxito, como Gesconsult o Magallanes. Algar está en proceso de lanzar una réplica de su fondo Algar Global Fund, el mejor de su categoría con una revalorización en 2017 superior al 25%. Equam Capital es una empresa de asesoramiento (eafi) española que asesora fondos domiciliados exclusivamente en Luxemburgo.

El mantra oficial es que los inversores extranjeros solo compran productos que comiencen su ISIN (la matrícula que identifica unívocamente en todo el planeta a cada producto financiero, ya sean acciones, bonos, fondos u otros productos) con LU. Este arranque identifica los productos con origen en el Gran Ducado. Este argumento es cierto, pero se combina con el factor de venta a pequeños inversores en España y con el de la seguridad que proporciona la normativa luxemburguesa. Allí, desde el principio, se utilizan las cuentas ómnibus –cuentas globales segregadas en función de las aportaciones de cada partícipes–, de forma que los comercializadores de fondos no han de que entregar a las gestoras los datos de los clientes que han contratado esas carteras.

El patrimonio de gestoras españolas en el país roza los 16.000 millones de euros, el quíntuple que en 2012

Archivado En

_
_