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Entrevista

Herencia: “El liderazgo es difícil de definir”

Óscar Herencia, director general de MetLife en España y Portugal Asegura que el corto plazo es peligroso ya que ocasiona pérdida de oportunidades

Pablo Monge

Óscar Herencia (Madrid, 1968), director general de MetLife en Iberia, tiene una conversación inspiradora y transparente. Le ha marcado el ejemplo de su padre, al que perdió a una edad temprana y en el que piensa cuando dice que un líder es “aquella persona por la que harías algo que no harías por ti mismo”.

R. ¿Cómo entiende el liderazgo y qué cualidades configuran a un líder?
R. Es difícil definir el liderazgo. Pero me marcó algo que leí hace tiempo: “Un líder es aquella persona por la que harías algo que no harías por ti mismo”. Piensa la cantidad de cosas que eso implica. Si eres capaz de conseguir eso, puedes estar verdaderamente orgulloso. Para mí los grandes líderes deben saber rodearse de un buen equipo y con su actitud y capacidad hacerse dignos de liderarlos. La transparencia en la comunicación, la credibilidad y la capacidad para escuchar y seguir aprendiendo son ingredientes claves.
R. ¿Tiene un modelo de líder?
R. Hay cosas que admiro de muchos líderes. En la empresa, siempre he admirado la determinación de Jack Welch y la visión y capacidad de anticiparse a los deseos del cliente de Steve Jobs. En el deporte, hay entrenadores de fútbol que me resultan muy inspiradores, como la capacidad de Luis Aragonés para ir hasta el final con sus ideas y triunfar, Simeone, Vicente del Bosque o Johan Cruyff y Pep Guardiola.
R. ¿De quién ha aprendido más a ser un líder?
R. De mis jefes, de mis colegas, de mis profesores en las escuelas de negocios, incluso de mis entrenadores de balonmano. De algunos incluso aprendí lo que no hacer, que es un aprendizaje valioso. Leo frecuentemente biografías y libros de personajes que me inspiran: políticos, líderes empresariales, deportistas. Trabajando con buena gente se aprende a liderar, pero las escuelas de negocios también me han ayudado mucho.
Para ser un buen líder hay que predicar con el ejemplo
R. En su trayectoria profesional o vital, ¿cuál ha sido su reto más complejo o su mayor fracaso?
R. Siempre he defendido que las dificultades son la mejor fuente de aprendizaje. Quizá el reto más complejo fue la crisis de AIG en 2008, en Portugal, en una cultura y un lenguaje que no era el mío y con una visibilidad mayor de la esperada por muchas razones. Fue un MBA en real, pero hoy solo tengo buenas sensaciones. A nivel personal, el mayor reto fue afrontar la muerte de mi padre, que es y será mi gran referente.
R. ¿Cómo balancea el corto y el largo plazo, la estrategia con los resultados?
R. El cortoplacismo puede ser muy peligroso. Nos hace perder muchas oportunidades. Una empresa sin estrategia y sin visión a medio/largo plazo está condenada al fracaso, pero es evidente que hay que generar resultados. La idea de la doble velocidad, sacando el máximo de los negocios maduros, sin perder la visión para reinvertir parte de los beneficios en iniciativas de futuro, es fundamental.
R. ¿Cómo gestiona su tiempo para cubrir la agenda?
R. Lo gestiono mal. Mentiría si dijera lo contrario. La agenda de reuniones la concentro entre las diez de la mañana y las seis de la tarde. No me gusta obligar a las personas a adaptarse a mi horario. Suelo llegar pronto a la oficina y me quedo hasta tarde. Esas horas adicionales donde no tengo reuniones son horas sin mucho ruido, sin teléfonos, y me permiten trabajar de manera más eficiente. No llego a practicar algunos hobbies que me gustan y a disfrutar más de la vida familiar.
R. ¿Cuál es la importancia de la cultura empresarial dentro de su gestión? ¿Qué importancia concede a los valores y al ejemplo del líder?
R. Para mí es fundamental que la empresa tenga unos valores. Es crítico para que los clientes se sientan representados y quieran darnos su confianza. Es como las personas, solo nos unimos y empatizamos con otros con cuyos valores nos identificamos. Para ser un buen líder hay que predicar con el ejemplo. No se le puede pedir a nadie nada que tú no estarías dispuesto a hacer.
R. ¿Qué importancia le da a las relaciones en su actividad profesional?
R. Para mí las relaciones personales son fundamentales. Las personas son lo mejor que tenemos. Marcan la diferencia. Sin dejar de ser exigente en lo profesional, nunca se puede perder la sensibilidad y la humanidad.
R. ¿Qué le aconsejaría a un recién licenciado para tener éxito en la vida: suerte o sacrificio?
R. Creo que el esfuerzo, el compromiso y la voluntad por no dejar de aprender nunca deberían siempre formar parte de la fórmula para alcanzar el éxito. La suerte, si llega, que te coja trabajando.

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