_
_
_
_

Alimentación y bienes de equipo tirarán del sector exterior en 2017

Las empresas detectan un repunte de importaciones desde la UE La demanda mundial crece tras ocho trimestres de caída

Demanda de bienes en el mundo
Alejandro Meraviglia

Las empresas españolas se preparan para superar el récord de exportaciones que registraron durante el pasado ejercicio. En 2016, las ventas de bienes al exterior superaron los 254.000 millones de euros, un nivel inédito en la serie histórica, y en los dos primeros meses de 2017 han crecido un 12,6% respecto al pasado ejercicio.

Estas buenas cifras se explican por dos factores. El primero es la recuperación económica de los mercados tradicionales europeos (Francia, Alemania e Italia). El PIB de la zona euro cerró el pasado ejercicio con un crecimiento del 1,8% y encadenó dos ejercicios consecutivos bordeando aumentos del 2%. De esta manera abandonaba la senda de debilidad que le llevó a encadenar dos ejercicios consecutivos (2012 y 2013) en recesión.

El segundo factor que explica este repunte es la recuperación de la demanda en el resto de áreas del mundo, como América, África o Asia. Los últimos datos de la Organización Mundial de Comercio, correspondientes al último trimestre de 2016, revelan que la demanda mundial repuntó un 1% anual en el último trimestre del pasado ejercicio tras ocho trimestres consecutivos de descenso.

Más información
Las empresas de alimentación preparan el desembarco en Canadá
¿Qué países han ganado y cuáles han perdido con la globalización?
Las medias verdades de Trump sobre Alemania

Y las empresas más beneficiadas en España por esta mejora serán los fabricantes de bienes de equipo, el mayor exportador con un 18,6% del total de las ventas, y las de alimentación, el segundo sector más exportador junto al de automoción (ambos con un 17,6% del total en febrero, último dato disponible). Las exportaciones del sector de bienes de equipo están muy concentradas en la UE (el 54% del total) y una mejor o peor evolución económica de ese área geográfica es determinante para su evolución. “En 2016 descendió la exportación hacia la UE un 0,4%. Para el periodo enero-febrero de 2017, observamos un incremento del 6,6%”, recalcan fuentes de la patronal Sercobe. Esta organización identifica diez países en los que prevé que la demanda va a crecer más este año. Los mayores incrementos se van a producir en Francia, con un avance anual del 24,6% respecto a 2016, y Alemania, con un 14,7%. De esos diez países siete son europeos. Solo tres están fuera de la UE: China, EE UU y Turquía. En todos está previsto un aumento de las compras, aunque el previsto para China (9,7%) es bastante superior al de EE UU (6,3%) y Turquía (3,1%).

Las empresas de alimentos y bebidas también han detectado un buen comportamiento de las ventas a UE y EE UU, sus dos mercados más importantes por el volumen de compras, aunque destacan el crecimiento en el área mediterránea y en Asia. “Debemos destacar la buena marcha de la zona del Mediterráneo, liderado por el buen comportamiento de Marruecos, Argelia, Italia y Grecia. En el eje asiático, Corea del Sur y Hong Kong han aumentado hasta un 32%, y China hasta un 29%. Estas cifras descubren los esfuerzos del sector por mercados con amplio margen aún de crecimiento y donde hay un interés creciente por la seguridad, variedad y calidad de nuestros alimentos”, recalca Mauricio García de Quevedo, director general de la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB).

Pese a que las estadísticas apuntan en el sentido contrario (las exportaciones han crecido un 7,2% en el acumulado hasta febrero), los fabricantes de automóviles se muestran cautos y preocupados respecto a cómo pueden afectar a sus ventas la salida del Reino Unido de la UE y la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, más conocido como Nafta. “Dada la balanza comercial positiva con Reino Unido, el tercer país en importancia en la UE tras Francia y Alemania, hay preocupación de cómo quede finalmente el acuerdo comercial con este país. Es imprevisible saber qué efecto tendrá ya que no se ha comenzado a negociar y no se sabe que orientación tendrá. Los aranceles y la gestión arancelaria tendrá efecto sobre el comercio con este país”, apunta un portavoz de la patronal Anfac.

México y EE UU están en plena renegociación del tratado que liberaliza sus intercambios comerciales con Canadá, aunque los términos en los que se está moviendo la negociación dista mucho de los expuestos el pasado ejercicio. Desde que Donald Trump fue nombrado presidente de EE UU, las amenazas para construir un muro en la frontera entre México y EE UU o de renacionalizar la política comercial para evitar el crecimiento de las importaciones a México fueron constantes. La realidad ha sido bien distinta, por ahora. “Para España es importante el mercado de EE UU, el segundo más importante fuera de la UE, y el de México, el tercero fuera de la UE, por lo que cualquier acuerdo que avance para impulsar esos mercados tendrá un efecto positivo sobre el sector en España”, recalcan desde Anfac.

Las empresas de bienes de equipo y de alimentación hacen una valoración divergente sobre el acuerdo de libre comercio que ha firmado la UE con Canadá (ahora deberá ser ratificado por los 28 parlamentos nacionales para su definitiva entrada en vigor) y los futuros que están negociándose con Japón y Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay e Uruguay) y que podrían certificarse este año. “El acuerdo con Canadá es una gran oportunidad, ya que se trata de un socio económico muy importante y estable, con un mercado de más de 35 millones de potenciales consumidores”, apunta García de Quevedo.

Este sector es uno de los más beneficiados, ya que el acuerdo, conocido como CETA por sus siglas en inglés, da protección a 23 denominaciones de origen española (aceites de oliva, carnes, quesos, turrones, cítricos y especias) y rompe el monopolio que existía para la distribución y venta de bebidas alcohólicas. Solo los fabricantes y distribuidores nacionales tenían derecho a comercializar sus productos en determinadas provincias, lo que suponía un obstáculo muy importante para los fabricantes de vino. España es el noveno país suministrador de productos agroalimentarios de Canadá, con una cuota del 1,38% del total, y en los últimos cinco años, las exportaciones agroalimentarias de España han crecido un 75%. La consulta Gedeth Network, especializada en desarrollo de negocio internacional, augura que España se convertirá en el próximo gran proveedor de productos gourmet en Canadá. “La ausencia de tradiciones culinarias propias hace que el consumidor canadiense busque cada vez más productos de importación”, destaca Juan Millán, socio de Gedeth Network.

Desde Sercobe apuntan que la libertad comercial con Canadá y Japón supondrá “una dura competencia para nuestras empresas”, mientras que el pacto con Mercosur, al tener un nivel inferior de desarrollo, “puede representar una oportunidad comercial para la entrada de nuevos productos procedentes de los fabricantes españoles de bienes de equipo”.

El comercio exterior, en cifras

España. Una inflación baja, un euro depreciado y la reforma laboral han sido los tres elementos que han permitido ganar competitividad a las empresas españolas frente a sus competidoras. Y esas ganancias se han traducido en un incremento de las exportaciones superior al de otros países y un mayor peso dentro del comercio mundial. Las exportaciones supusieron un 1,82% del total mundial en 2016, un nivel inédito desde 2009, cuando ese porcentaje llegó al 1,83%.

China. Se consolida como el mayor exportador del mundo, con 1,9 billones de euros en 2016, lo que le otorga una cuota del 13,2% de las ventas mundiales. En segundo lugar aparece EE UU, que permanece inamovible en el 9,2% del total mundial, mientras que Alemania es la que más crece entre las tres primeras. Las exportaciones de bienes germanas se incrementaron un 10,7% en 2016 y se situaron en 1,22 billones de euros, lo que representó un 8,5% del total mundial. La distancia entre ambos países en 2015 era de 1,04 puntos en su cuota exportadora mundial y doce meses después se ha reducido a 0,73 puntos.

Arabia Saudí y Rusia. Son los dos grandes damnificados por el desplome del crudo. Rusia ha perdido tres posiciones y se sitúa como el decimoquinto exportador mundial, con una caída de 27.000 millones en 2016. Arabia Saudí se dejó 10.000 millones y cae tres puesto al vigesimosegundo.

Más información

Archivado En

_
_