Pistoletazo de salida al 'brexit': cuál es la hoja de ruta
El 'brexit' duro es el peor escenario para la poderosa City londinense
La primera ministra británica Theresa May ha avanzado hoy en un esperado discurso la estrategia que seguirá Reino Unido en su proceso de divorcio de la Unión Europea. De sus palabras queda claro que abandonará el mercado único europeo, sin paños calientes, pero ha señalado también su voluntad de seguir siendo un "socio comercial y fiable" para sus vecinos europeos. El discurso de hoy es el aperitivo para las conversaciones formales para el brexit, que está previsto comiencen a finales de marzo y que van a marcar un antes y un después para el Reino Unido y también para la Unión Europea.
¿En qué consiste un brexit duro?
Tras la decisión de los británicos aprobada en referéndum de salir de la UE se abrían dos alternativas. La más suave pasaba por garantizar, aunque fuese en otros términos, el libre acceso para las empresas y ciudadanos británicos al mercado comunitario, al modo de la relación que mantiene Noruega con la UE. Aunque ello a cambio de respetar el principio comunitario de libre circulación de personas y, por tanto, renunciar a la soberanía total en materia de inmigración. La otra alternativa, por la que opta el ejecutivo británico, es el denominado brexit duro. May no desea que la Unión Europea siga interfiriendo en su política de inmigración: desea recuperar el control absoluto de sus fronteras. Y desde la UE ya se ha advertido a Londres que si no se respeta la libre circulación de personas no hay opción alguna de seguir disfrutando de otras ventajas del mercado único. En definitiva, habrá que partir prácticamente de cero en la relaciones comerciales.
¿Qué implicaciones tiene un brexit duro?
Sin duda, es la fórmula de mayores implicaciones económicas. La UE supone el destino de la mitad de las exportaciones británicas y la ruptura total con los socios europeos supondrá eliminar el libre acceso británico al mercado europeo. Aun así, May no descartaría seguir contribuyendo económicamente a la UE en programas específicos tras salir del club, lo que se interpreta como un intento por garantizarse el acceso al mercado europeo para sectores clave de la economía británica. May ha señalado que quiere “un acuerdo tarifario” con Bruselas, lo que podría significar algún tipo de pertenencia parcial a la unión aduanera, lo que implicaría la supresión de aranceles aun sin pertenecer al mercado único.
La negociación política será por tanto decisiva. El punto de partida de unos y otros es tajante, eso sí. May avanza que no desea estar “mitad dentro, mitad fuera” de la UE y desde Bruselas se advierte a Londres que no habrá un acuerdo de medias tintas.
¿Cómo están reaccionando los mercados al brexit?
La primera reacción fue demoledora. Las Bolsas se desplomaron el 24 de junio al conocer el resultado del referéndum, el Ibex sufrió la mayor caída de su historia en un día, superior al 12%. Pero la recuperación fue constante en los meses posteriores y, a partir de noviembre, las Bolsas encontraron además un nuevo motivo para las alzas en la política gracias a la victoria de Trump, que interpretaron de forma positiva.
Meses después del referéndum, el impacto del brexit en los mercados se sigue concentrando en el Reino Unido. La depreciación de la libra y el alza de Ftse son la cara y la cruz de un fenómeno que se ha intensificado en espera del discurso de hoy de Theresa May.
¿Qué supone el desplome de la libra?
El divorcio de la UE causó un primer derrumbe de la libra a mínimos de los últimos 30 años, que se han profundizado a medida que crecía la amenaza de un brexit duro y la posibilidad cierta de perder el acceso al mercado comunitario. Esa depreciación de la divisa tiene un claro efecto positivo sobre las empresas exportadoras británicas, a las que hace más competitivas de cara al comercio mundial. Y es su avance en Bolsa por este motivo el que ha llevado al Ftse a renovar máximos históricos gracias al brexit.
Así, en un primer momento, la caída de la libra ha servido para contener el golpe sobre la economía británica, ya que ha reforzado sus exportaciones y dado cierto atractivo a los activos en libras, a pesar de las incertidumbres políticas. Reino Unido no ha entrado en recesión ni se prevé vaya a hacerlo a cuenta del brexit, según prevé el propio Banco de Inglaterra. Es más, el FMI acaba de elevar su previsión de crecimiento del PIB para Reino Unido en 2017 del 1,1% al 1,5%.
¿A qué se debe el alza de la cotización de la libra hoy?
Tras la fuerte corrección previa al discurso de May, la libra ha reaccionado con una fuerte subida a sus palabras. Ha registrado su mayor repunte diario frente al dólar desde 2008, del 2,52%, a pesar de que la primera ministra ha sido tajante en que Reino Unido abandonará el mercado único. Aun así, su anuncio de que el Parlamento someterá a votación el acuerdo final con la UE ha desatado la subida, en la expectativa de que se suavicen los términos de ese acuerdo para ganar el máximo apoyo político posible.
Además, y pese a que habrá brexit duro, May ha asegurado que evitará la "caída por el precipicio" que teme el sector empresarial y financiero si las negociaciones se prolongan más allá de los dos años inicialmente previstos.
¿Qué efectos va a tener el brexit en la inversión en los próximos meses?
La recuperación de las Bolsas europeas en los últimos meses parecía haber dado por superado el impacto del referéndum británico. Pero, la herida se ha cerrado en falso. Aunque el brexit no vaya a sacudir al mercado con la intensidad del primer momento, va a seguir siendo un factor importante de volatilidad, según advierten los expertos. Los temores hacia la salida de Reino Unido de la UE estaban de algún modo adormecidos a la espera de novedades y del inicio formal de las negociaciones de ruptura, que a finales de marzo está previsto comiencen. El proceso se augura largo, con conversaciones que como mínimo pueden durar dos años para prolongarse después. Y el mercado es poco amigo de las incertidumbres, menos aún si acaban materializándose de la forma más preocupante para el inversor, que es la del brexit duro.
¿Cómo influye en la City?
El brexit ha favorecido a las empresas británicas exportadoras pero si hay un sector con verdadero peso en la economía del país y que tiembla con el divorcio de la UE es el financiero. El brexit duro cerrará el acceso al mercado europeo a tantas multinacionales de la inversión que tienen en la City de Londres su base de operaciones para el conjunto del continente europeo. Compañías estadounidenses y japonesas son las primeras que están buscando alternativas en otras ciudades europeas como Dublín o Fráncfort, en una carrera a la que también se ha sumado Madrid.