El 55% de los directivos exige una revisión de la reforma laboral
Los datos de la última Encuesta de Población Activa (EPA), correspondiente al tercer trimestre, mostraban que la ausencia de Gobierno desde el 20 de diciembre no ha tenido efecto en el mercado laboral. En esos tres trimestres se han creado 433.000 puestos de trabajo. Y tampoco parece haber impactado en las decisiones de contratación de los directivos españoles. Esa es una de las conclusiones de la encuesta realizada por Adecco a 250 directivos (directores de recursos humanos, presidentes, directores generales y empresarios) entre el 25 y el 28 de octubre en los días previos a la formación del nuevo Gobierno.
La mayoría de los consultados considera positivo haber acabado con ese período de interinidad y cree que tendrá efectos revulsivos en el mercado laboral. Un 76% prevé que el desbloqueo político "será un estímulo para la economía española", mientras que el 63% anticipa que traerá una mayor creación de empleo. Una estimación que choca con las previsiones del Banco de España o los servicios de estudio a los que consulta la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas), que augura que los porcentajes de creación de empleo al 3% se desacelerarán al 2% en 2017.
“La formación de un Ejecutivo no es garantía -ni deja de serlo- de creación de empleo. Son las medidas que ese gobierno ponga en marcha en materia laboral, tributaria, social, de estímulo económico… las que ayudarán a crear o destruir puestos de trabajo en los meses venideros”, remarca Santiago Soler, secretario general de Adecco.
Y una de las que más polémica ha levantado ha sido la reforma laboral aprobada por Mariano Rajoy en 2012, que toda la oposición quiere o bien derogar o bien modificar en profundidad. Los empresarios también se mojan. Un 55% de los consultados considera que el nuevo Ejecutivo debería revisarla. El nuevo presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, se ha mostrado dispuesto a hacer concesiones ante su situación de minoría en el Congreso, aunque en su discurso de investidura sacó a la reforma laboral de las concesiones que podría hacer a la oposición. "Sería un error liquidar las reformas del Ejecutivo", advirtió en su discurso de investidura.