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Motor

Los concesionarios se autocompran el 10% del mercado de venta de coches

Las entregas que se apuntan las marcas a sí mismas recuperan niveles de 2010

Un concesionario Volkswagen.
Un concesionario Volkswagen.Pablo Monge

El fenómeno de las automatriculaciones recupera fuelle y niveles no vistos desde 2010. Las ventas que las marcas y los concesionarios de coches se realizan a sí mismos alcanza en los nueve primeros meses del año las 82.332 unidades, un 9,6% del total de las matriculaciones realizadas hasta septiembre de 2016, según los datos de la consultora especializada MSI a los que ha tenido acceso Cinco Días. Se han vendido hasta este mes unas 874.220 unidades en total, un 11,5% más que en el mismo periodo del año pasado, según las cifras de las asociaciones Anfac (fabricantes), Faconauto (concesionarios) y Ganvam (vendedores).

El año pasado, estas matriculaciones que los concesionarios se apuntan a sí mismos crecieron un 54%, hasta las 112.173 unidades. Es el primer incremento de volumen de estas ventas desde 2010, cuando crecieron un 31% y recuperan volúmenes por encima de las 100.000 unidades, perdidos en 2011. Representaron en 2015 el 11% del mercado total de ventas de vehículos.

Las automatriculaciones se agrupan dentro de lo que se considera “matriculaciones tácticas”. Bajo este paraguas, aparecen los conocidos como kilómetro cero, que son “vehículos matriculados por las redes para su comercialización inmediata”; los dedicados a la exportación, que compra y matricula una empresa, marca o concesionario para su venta en el extranjero; las flotas de la propia marca para uso de directivos; y las automatrículas puras.

En puridad, estas compras que se realiza el concesionario a sí mismo se dedican para sus vendedores, para tener coches de demostración y prueba para potenciales clientes o para ofrecer coches de sustitución para clientes de taller. Sin embargo, este instrumento se utiliza en múltiples ocasiones para cumplir los objetivos de venta de la marca o para no dejar caer las ventas por debajo de la media del resto de puntos de venta de la marca. También lo utilizan los concesionarios para mejorar su rapel, es decir, el porcentaje que cobra el vendedor por coche vendido. El sector denuncia que “infla el mercado” y su uso desproporcionado pone en riesgo la rentabilidad de los puntos de venta.

Si bien su uso es una constante en el sector, la intensidad ha crecido con los años. Hace 11 años, en 2005, estas autoventas representaban el 5% de todas las matriculaciones. Y aunque caigan en términos de volumen, lo cierto es que su uso es más intensivo cuanto más flojea el mercado.

En 2008, el año que las matriculaciones se hundieron un 30%, las ventas de los concesionarios a sí mismos cayeron un 28% respecto a lo autovendido en 2007. Sin embargo, las 139.931 unidades automatriculadas representaron el 12% de un mercado en caída libre.

En 2009, con las entregas desplomandose un 18% por debajo del millón de unidades, las automatrículas se quedaron en el 10% del mercado. En 2012, cuando se registró la tasa más baja de ventas de coches del periodo, unas 700.084 unidades, las automatriculaciones se quedaron en las 95.722 unidades, un 22% menos que en el año anterior. Sin embargo, esta cantidad representó el 13% de las entregas totales.

Reducción de ventas desde abril

En el año en curso, las automatriculaciones se mantienen en el mismo nivel que el año pasado. Se han automatriculado 82.332 unidades en 2016 frente a las 83. 740 entregas en los propios concesionarios que se realizaron en 2015. Solo supone una reducción del 1,8%.

Con un inicio muy fuerte a principios de año, el volumen dedicado a esta práctica ha ido disminuyendo a partir del mes de abril. En el mes de enero, los concesionarios se compraron 9.937 unidades de sus propios coches, un 51,5% más que en el mismo mes del año anterior. La tendencia al alza se mantiene hasta abril cuando las automatrículas de 2015 ya superan a las de 2016. La diferencia más fuerte se aprecia en agosto, cuando cayeron un 25%.

Rentabilidad de la red superior al 1%

La rentabilidad de los concesionarios volvió a números negros en 2010, después de años perdiendo dinero. El año pasado, según los datos facilitados por Faconauto, los concesionarios consiguieron una rentabilidad del 1,3% sobre ventas. La facturación de las redes ascendió a 28.545 millones de euros, obtenidos por los 4.091 establecimientos que hay en el país. Supone un incremento de los ingresos del 11% frente a los 25.545 millones de euros registrados en 2014. En ese año, la rentabilidad de las concesiones se quedó en un 0,92%.

El número de puntos de venta en España descendió de 4.152 establecimientos a 4.091 a finales de 2015. Sin embargo, se crearon casi el doble de puestos de trabajo que en 2014. El año pasado, se generaron 9.561 empleos en estas redes. El empleo total se quedó, a cierre de 2015, en 146.586 trabajadores.

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