La Fed pierde amigos por los dos lados
La Reserva Federal de Estados Unidos ya se encuentra bajo la presión de los conservadores, ahora los demócratas también podrían volverse en su contra.
Incluso los demócratas están hartos del banco central de Estados Unidos. El grupo Fed Up (harto en inglés), que representa a organizaciones progresistas, asegura que la Reserva Federal está en deuda con Wall Street. En un informe publicado el lunes, la coalición exige una mayor rendición de cuentas y el fin de los dividendos que los bancos del sector privado reciben por el capital que acumulan en el banco central. Fed Up afirma que hay que reformar el banco central para que haya una recuperación económica más equilibrada. En un informe publicado antes de la reunión anual de la banca central en Jackson Hole, organizada por la Fed de Kansas City, el grupo señala que muchos de los directores de los 12 bancos de reserva regionales están conectados a Wall Street.
La Fed también se enfrenta a peticiones de una mayor transparencia por parte de los republicanos. El senador Rand Paul ha propuesto una ley para auditar la institución. En la Cámara de Representantes, el presidente del Comité de Servicios Financieros, Jeb Hensarling, pondrá en marcha un proyecto de ley el próximo mes que podría frenar sus poderes.
El informe de Fed Up subraya el problema al que se enfrenta la Fed debido a sus estrechas relaciones con los bancos que regula. En noviembre pasado, un ex empleado de la Fed de Nueva York se declaró culpable de filtrar información a un antiguo colega pasado que pasó a trabajar para Goldman Sachs.
La dura competencia del senador Bernie Sanders frente a Hillary Clinton para convertirse en el candidato presidencial ha empujado a los demócratas hacia la izquierda. La Reserva Federal y su presidenta Janet Yellen se arriesgan a perder amigos a ambos lados del pasillo político.
