Ángel Ron: “Había que coger el toro por los cuernos”
El consejo, que controla el 24%, ha apoyado la ampliación de capital por 2.500 millones de Banco Popular Allianz, que tiene un 3,36% del capital, ya ha comunicado su intención de acudir
Ángel Ron ha vuelto a tener que tomar una dura decisión. Apelar nuevamente a los accionistas de Banco Popular para realizar una nueva ampliación de capital, la tercera en tres años y medio. Ha reclamado a sus inversores en este tiempo 5.495 millones de euros solo por este concepto, cifra superior a su capitalización, que sumaba ayer 3.797 millones, tras dejarse en el día 1.368 millones de euros. Además, debe suspender otra vez el pago de dividendo para este año (ya lo hizo también en 2012) y lo retrasa en principio hasta el próximo ejercicio. La operación de saneamiento de su balance, con unas provisiones de 4.700 millones en tres años, registrará pérdidas contables, que serían cubiertas por la ampliación de capital. Toda una dura experiencia para el banquero. Pese a ello, Ron mantiene la calma, y ha vuelto a lograr convencer al consejo para que aprobase el miércoles nueva macroampliación de capital de 2.500 millones. En una conversación telefónica Ron contesta a CincoDías.
Pregunta. ¿El Banco Central Europeo o el Banco de España le han pedido o recomendado que Popular hiciera esta ampliación de capital?
Respuesta. No. Nadie nos ha presionado para hacer esta operación. La única presión que hemos tenido y tenemos es la del mercado. El mercado nos pedía ampliar las provisiones y las coberturas del banco, y nosotros hemos querido coger el toro por los cuernos y realizar esta ampliación para adelantar el saneamiento y lo que podíamos hacer en tres años adelantarlo a uno. Pero insisto, no nos ha presionado más que el mercado. Queríamos acelerar la normalización de la rentabilidad del banco después de 2016 y elevar la cobertura de los créditos morosos hasta el 50% (ahora está en el 38%).
P. ¿Qué le ha pasado a Popular para volver a tener que reclamar a los accionistas del banco otros 2.500 millones de euros para reforzar su capital?
r. El banco ha tenido en cuenta la necesidad de anticiparse al complejo escenario al que se enfrenta la actividad bancaria. Las entidades llevan varios meses, incluso un año, bajo la presión de las Bolsas, sobre todo por China, las familias se están desapalancando, la regulación sigue presionando a la banca, por sus mayores peticiones, los bancos operan bajo unos tipos de interés en tasas incluso negativas. Existe una serie de condicionantes que se van a intensificar en los próximos meses y que se espera que se mantenga así por un largo periodo de tiempo. Además, el mercado creía que el banco va a ganar poco y que tiene menos provisiones que el resto, y dados estos condicionantes lo mejor era abordar una ampliación de capital. Así, tras un proceso de reflexión largo y después de constatar que hay buen acceso al crédito, apetito inversor por la entidad y un derecho de suscripción preferente a precio ventajoso para el accionista, nos hemos dicho: vayamos para adelante”
P. ¿Los accionistas de referencia han confirmado que acudirán a la ampliación de capital para mantener su porcentaje actual?
r. El consejo de administración de Popular –que controla el 24% del capital– ha aprobado y apoyado la operación. Eso es ya significativo. Allianz (que controla el 3,36%), ya ha comunicado su intención de acudir a la operación. El resto tiene 15 días, según marca el procedimiento, para suscribir la ampliación o no. Pero hay un apoyo notable. Es una oportunidad muy interesante para el accionista, dado el descuento en el precio de la acción. La ampliación está totalmente asegurada y con una buena perspectiva de éxito.
P. ¿Sigue en curso la creación de un instrumento para aparcar una parte de los activos inmobiliarios fuera del balance y crear una figura parecida a un banco malo?
r. Siguen en curso las operaciones mayoritarias de coberturas y de sacar de balance los activos tóxicos, pero se hará más adelante.
P. ¿Siente la presión del mercado o de alguna entidad como CaixaBank para que Popular se fusione o para que sea absorbido por otro banco dada su baja capitalización?
r. No. Ninguna entidad nos ha presionado. Insisto, solo nos ha presionado el mercado. Nosotros nos fortalecemos ante un entorno desafiante. En un futuro ya veremos. Pero ahora no es el motivo de la ampliación. No tenemos ahora mismo proyectos de fusión.
P. ¿Esta ampliación de capital llevará aparejada una reestructuración del banco con cierre de oficinas y ajuste de plantilla?
r. No. Los cierres de oficinas o ajustes de plantilla serán los habituales ahora mismo.
P. Los analistas también han especulado con la posibilidad de que Popular tantee el mercado de EE UU para vender su filial en este país. ¿Piensa venderla?
r. No. Es un banco que nos da un buen retorno. No es una operación que estemos tanteando en estos momentos.
“No necesitará más capital”
El presidente de Banco Popular, Ángel Ron, afirma que la entidad “no necesitará futuras ampliaciones de capital” después de decidir realizar una nueva inyección de capital por 2.500 millones de euros. Con esta ampliación, Banco Popular pretende convertirse en una “alternativa de inversión muy atractiva”, según palabras de su propio presidente, y ha presentado un nuevo plan estratégico hasta 2018 con el que busca reducir en 15.000 millones de euros los activos improductivos y recuperar el pay out en efectivo del 40%. Ron considera que pese al referéndum en Reino Unido, con la posibilidad de que se vote a favor del brexit en las próximas semanas, y las elecciones generales en España, “es un buen momento para realizar la ampliación, ya que entendemos que la situación macroeconómica actual, la reactivación del mercado inmobiliario” y su tasa de morosidad en mínimos de los últimos años “ofrecen las condiciones oportunas” para llevar a cabo la operación. “¿Quién garantiza que en el futuro no se incremente la volatilidad, que aumenten las incertidumbres?”. Ron resumió ante los analistas los objetivos que persigue la estrategia y ampliación de capital presentada. “Va a tener éxito”, porque permitirá al banco acelerar la desinversión de activos no rentables, potenciar las fortalezas de su modelo de negocio y tener capacidad de adaptarse a la situación del sector, “muy compleja en estos momentos”. “Nos permite disipar dudas sobre nuestras coberturas relativas”. El banco se ha marcado como meta llegar a un ratio CET1 fully loaded (cumplidos todos los requisitos fijados por Basilea en 2018) del 12%, frente al 10,8% actual, y alcanzar un ROTE (retorno sobre el capital tangible) superior al 9%, frente al 3% registrado en el primer trimestre de 2016. “Queremos convertir al banco en una alternativa de inversión muy atractiva”, declara Ron.