Bruselas ultima el veto a la venta de O2 a Hutchison
La CE buscará esta semana el acuerdo con las agencias de la competencia de Reino Unido
Las autoridades de la competencia de la Comisión Europea vetarán la venta de O2, filial británica de Telefónica, al grupo asiático Hutchison para su posterior fusión con su filial Three, según Reuters, que cita dos fuentes conocedoras del proceso. La operación, valorada en 10.250 millones de libras (unos 13.174 millones de euros), provocaría la reducción del número de operadores móviles de red en Reino Unido de cuatro a tres.
La Comisión Europea buscará esta semana el acuerdo con las agencias de la competencia de Reino Unido en torno a su decisión. Este movimiento es habitualmente una formalidad.
En cualquier caso, otras fuentes del sector recuerdan que Bruselas tiene de plazo hasta el 19 de mayo para tomar una decisión definitiva.
Hutchison afrontó la compra de O2 en un intento de hacerse fuerte en Reino Unido y hacer frente a BT, que recientemente cerró la compra de EE, primer operador de telefonía móvil.
El grupo asiático presentó una serie de propuestas para lograr la aprobación de Bruselas, que en las últimas semanas ha afrontado unas fuertes presiones de los reguladores británicos, tanto la autoridad de la competencia CMA como el regulador de las telecos Ofcom, para que bloquee la operación. En Reino Unido se ha indicado que la transacción provocaría una reducción de la competencia y una subida de los precios para los usuarios.
Además, en este escenario de rechazo británico, la investigación sobre la transacción de O2 ha coincidido en el tiempo con la campaña del Brexit, el referéndum que tendrá lugar en Reino Unido el 23 de junio en torno a la permanencia o no del país en la Unión Europea. Las autoridades británicas consideraban una intromisión la decisión de Bruselas en torno a un sector estratégico como las telecomunicaciones.
Entre sus propuestas, Hutchison ofrece congelar los precios durante cinco años, invertir un total de 5.000 millones de libras en el país y ceder un 30% de la capacidad de red. En este último caso, la empresa mantiene acuerdos con grupos de banda ancha como Virgin Media y Sky. Además, Hutchison vendería el 50% del capital del operador móvil virtual Tesco Mobile, propiedad de O2 en la actualidad.
La operación tiene una gran relevancia para Telefónica dentro de sus planes de reducción de deuda así como para el pago en efectivo del dividendo en 2016. La teleco, no obstante, mantiene varios planes para acometer este escenario que incluyen movimientos como la colocación en Bolsa de Telxius, la nueva filial de infraestructuras.
Además, Telefónica podría vender sus participaciones del 2,5% de China Unicom y del 0,69% de BBVA. De igual forma, la teleco podría emitir bonos convertibles, derechos sobre acciones y deuda híbrida. En este último caso, la operadora podría emitir hasta 5.000 millones de euros, según las estimaciones de Moody’s.
Los analistas no descartan tampoco que Telefónica trate de vender O2 de nuevo a grupos como los citados Sky y Virgin Media (controlado por Liberty), que contarían con el apoyo de empresas de capital riesgo.
De igual forma, y hasta una hipotética desinversión, Telefónica pasaría a disponer de la tesorería de O2, que en 2015 registró un beneficio operativo antes de depreciaciones y amortizaciones (oibda) cercano a 1.800 millones de euros (un 2,2% más).
Con respecto al dividendo, la compañía podría optar por recurrir al scrip dividend. De hecho, en el orden del día de la junta de accionistas de 2016 que tendrá lugar el 12 de mayo se contempla esta opción.