Un corredor de fondo
Tarraconense, apasionado por su trabajo, amante del ‘running’ y maniaco de la competitividad, Torres ha sido nombrado nuevo vicepresidente de Nissan Europa
"Sin dinero no se hace política industrial” es una de las frases más repetidas por Frank Torres, hasta ahora consejero director general de Nissan Motor Ibérica. Tras cinco años en este cargo al frente de la compañía japonesa, cambiará el día 1 de abril su despacho, situado en la Zona Franca de Barcelona, por otro en Suiza, en la ciudad de Rolle, en el cuartel general de Nissan Europa. Torres pasa a ser el nuevo vicepresidente y director de programas de la compañía. Tendrá bajo su cargo a todos los directores de programas regionales y será responsable de todos los programas europeos, de la rentabilidad, las ventas y la satisfacción de los clientes de los modelos que Nissan vende en el Viejo Continente.
Nissan ha sido nombrada como la marca oriental número uno en Europa, con 715,623 unidades entregadas en 2015, donde solo en diciembre vendió un total de 61,823 vehículos. Esto significa una cuota del 4%, prueba de la consistencia de Nissan en su participación en el mercado europeo.
Tarraconense de nacimiento (1969), estudió en el colegio La Salle y al terminar decidió mudarse a Barcelona para comenzar sus estudios en Ingeniería Industrial por la Universidad Politécnica. De 1995 a 2007, trabajó en una empresa de ingeniería del sector de la automoción dedicada a la automatización de plantas productivas en todo el mundo y gracias a esta experiencia, obtuvo un buen conocimiento del punto de vista de muchos fabricantes automovilísticos, además de profundizar en el proceso de producción.
Torres se incorporó a la empresa japonesa en 2007 y a lo largo de estos años ha conseguido la adjudicación de cargas de trabajo adicionales para las fábricas españolas, entre las que destaca la del nuevo modelo pick up para Barcelona, que empezó a producirse el pasado noviembre. En 2010 asumió el cargo de subdirector general y a partir de noviembre de 2011 pasó a ser vicepresidente de operaciones industriales y consejero director general de Nissan Motor Ibérica, cargo que mantuvo hasta hace pocos días.
Nissan está aliada a Renault desde 1999, un acuerdo que en 2015 se saldó con una producción de 8,5 millones de vehículos en todo el mundo, un 1% más que el año anterior, según datos de la compañía. La multinacional ha empezado este nuevo año en España con una renovación del 75% en todas las líneas de producto y tiene cubiertos ya los próximos diez años, eso sí, dependiendo de cómo vaya el mercado. España es el primer productor europeo de vehículos industriales y el noveno del mundo. En los últimos años, la industria de la automoción española se ha puesto como ejemplo, dado que mientras que en la mayoría de países europeos se cerraban fábricas y se reducían modelos, en España se ha conseguido atraer la fabricación de una decena más. Nissan España mantiene la previsión de fabricar 200.000 unidades en 2018. Torres reconoce que para las plantas españolas es muy positivo que un español esté en posiciones de decisión europea en la organización. “Por mi parte, desde mi nueva posición, seguiré trabajando para que las operaciones industriales de Nissan en España y el resto de Europa siga en esta senda del crecimiento sostenible”.
La exportación es clave para la industria del automóvil en España y la compañía japonesa ha sido una de las que mejor ha sabido sobrellevar el impacto de la crisis, gracias al esfuerzo realizado para aumentar su competitividad. Se trata de un concepto que Torres siempre tiene muy en mente. “Hemos sido lo suficientemente competitivos para poder exportar”, insiste. Las fábricas españolas disponen de experiencia y de personal altamente cualificado. Gracias a ello han conseguido crecer en fortaleza a la hora de competir, firmando convenios y desarrollando su propia red de proveedores. “Tenemos la capacidad disponible, cosa que no se puede decir de otros países”, señalaba Torres en una entrevista a este diario.
El nuevo vicepresidente europeo de Nissan es un fanático de los retos y una de las cosas que más le gustan de su trabajo “es que se puede hablar con Japón, Estados Unidos, China y Europa en un solo día”. “En Nissan siempre hay un reto que afrontar al momento”, asegura. Tiene muchos buenos recuerdos de toda su trayectoria por la empresa japonesa, pero si tiene que destacar uno, elige la firma del convenio colectivo con los sindicatos en 2012. Torres siempre ha sido considerado como uno de los principales negociadores dentro de Nissan y llevó las conversaciones con el Gobierno y los sindicatos, una cooperación que llevó a crear más empleo en la planta.
Este éxito inicial y los buenos resultados de las operaciones industriales de la compañía en nuestro país llenan de orgullo al nuevo vicepresidente. La plantilla de Nissan en España cuenta con casi un total de 5.000 trabajadores y está asentada en Cantabria, Cataluña y Castilla y León, siendo las factorías de Barcelona, Ávila y las de fundición y mecanización en Cantabria las más competitivas. “Asumí la dirección de las operaciones industriales de Nissan en España en un momento delicado. Pero todos juntos hemos conseguido nuestro objetivo: asegurar su crecimiento sostenible y estoy muy orgulloso de ello”. Torres se imagina el coche del futuro como eléctrico y de conducción autónoma para que los accidentes dejen de ser una amenaza. “El coche eléctrico es el futuro, no hay discusión”.
Además de ser un apasionado de su trabajo, el nuevo vicepresidente europeo aprovecha cuando tiene un hueco libre, y sobre todo en verano, para practicar dos de sus aficiones: leer y, desde hace tres años, participar en carreras de fondo. Según él, su pasión nació de forma espontánea gracias a un primo suyo que le animó a participar en el medio maratón de Tarragona. En tres años ha participado en más de una docena, aunque siempre a su ritmo. Su objetivo es acabar y no parar. Cuando puede desconectar, le gusta evadirse con su familia en el valle de Arán, un valle situado al norte de los Pirineos, su lugar preferido para relajarse y donde suele entrenar. El exconsejero director general de Nissan Motor Ibérica ha encontrado en las carreras de fondo un tiempo de reflexión y energía. Por eso ahora, cuando hace una escapada, a este tarraconense de 46 años que pasa un 30% de su tiempo fuera por trabajo no le faltan en la maleta unas zapatillas de running.