Controlar el consumo eléctrico con la ayuda de una ‘app’

Las compañías independientes ofrecen tarifas personalizadas para hogares y pymes.

La tecnología se está convirtiendo en un aliado de los consumidores no solo para ahorrar energía y reducir su factura eléctrica, sino también para contribuir con la conservación del medioambiente. Las empresas han detectado esta oportunidad de negocio y, gracias a los contadores inteligentes, ahora ofrecen tarifas personalizadas para pymes y particulares. Es decir, en función de sus hábitos de consumo, y que además incluyen servicios de asesoría si desea ser más eficiente.

Para conseguirlo, las compañías se apoyan en plataformas online y aplicaciones móviles que permiten al usuario conocer en todo momento información relevante sobre el mercado –como los precios por hora o los picos de consumo–, su casa o empresa. Por ejemplo, ofrecen datos sobre las áreas o electrodomésticos más ineficientes.

Sin embargo, por el momento, solo pueden beneficiarse de estos contratos los clientes con contadores inteligentes, que miden de forma remota el consumo, y que apenas son 11,9 millones de usuarios, de los cuales 10,19 millones ya están operativos, según un informe de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) de finales de 2014. La idea es que en 2018 estén sustituidos por completo. El sistema de facturación variable entró en vigor el día 1 de julio, aunque se hizo efectivo el mes pasado.

En este contexto, se ha abierto una batalla comercial, donde las eléctricas independientes se adelantan a las necesidades del mercado al brindar sistemas novedosos de autogestión que fomentan una mayor transparencia, el consumo responsable, el uso de energías renovables y el cuidado del entorno. A continuación, exponemos algunas iniciativas.

• Conexión inteligente

La comercializadora independiente Axpo Iberia acaba de lanzar, específicamente para las pequeñas y medianas empresas, su Conexión Inteligente para elevar la competitividad del sector ante el lastre que supone el gasto de luz en la cuenta de resultados.

Un contrato a medida que se adapta al perfil de cada cliente, en el que las pymes pagan el coste exacto por consumo. A la vez, pueden implantar medidas de ahorro, de eficiencia y de gestión sostenible gracias a la asesoría que brinda la compañía.

“Estudiamos su consumo, básandonos en un profundo conocimiento del mercado y el apoyo de herramientas tecnológicas, y después recomendamos la tarifa más adecuada. Con la posibilidad de fijar un techo o suelo”, explican desde Axpo.

Por un coste adicional, no especificado por la empresa, las pymes pueden contratar su herramienta de medición eOpener, que permite a través de internet vigilar el consumo por unidad de producción o áreas de negocio para detectar aquellas ineficientes y crear políticas verdes.

Los datos son en tiempo real, disponibles las 24 horas al día los siete días de la semana, al tiempo que genera informes en Excel y PDF y crea alarmas según sus necesidades. Además, el 100% de la energía vendida procede de fuentes renovables, asegura la firma, que también certifica a las empresas que se comprometan con la conservación del planeta.

• Factor smarthome

La eléctrica independiente Factorenergía presentó el mes pasado su herramienta de gestión energética para hogares Factor Smarthome, que ahorra a las familias más de 200 euros anuales en su factura de luz (el 30%), según un estudio basado en una familia de cuatro miembros con una potencia contratada de 4,4 kW y 3.000 kWh al año.

La tarifa variable ofrece más ahorro, pero requiere más esfuerzos del usuario

A diferencia de Axpo, esta herramienta es gratuita, para clientes y no clientes, pero siempre que tengan una tarifa variable –según las variaciones del mercado–; disponible para iOS y Android.

“Medir, conocer, comparar, actuar” es el lema.

Tan solo con registrarse (nombre y correo electrónico) e introducir información sobre la potencia contratada y el código postal, la plataforma ofrece gráficos con el precio medio por hora, destacando los más altos y más bajos; así como el gasto de cada aparato.

Además, permite comparar su consumo con el de los vecinos, mediante valores promedios,para generar una competencia por la eficiencia. “La tarifa variable ofrece más ahorro, pero requiere mayores esfuerzos por parte del usuario”, afirma Emilio Rousaud, director general de la compañía. Esto implica consumir en horas de menor precio, evitar las horas punta o trasladar algunas tareas al fin de semana. 

Y si quiere recibir recomendaciones personalizadas, solo tiene que facilitar otros datos concretos acerca de la configuración de su casa, como la cantidad de electrodomésticos, tipo de hogar o iluminación, etc., para que la aplicación identifique dónde o qué aparatos consumen más energía.

También cuenta con juegos infantiles que promueven en los más pequeños hábitos ecológicos. “La meta es que un hogar tradicional se convierta en otro inteligente a través de herramientas e información necesarias para crear conciencia y moldear la conducta. Las pequeñas actitudes provocan grandes cambios”, arguye Rousaud.

Cambios de conducta e inversión en aparatos ‘eco’

Ser eficiente supone un cambio radical de conducta. Significa modificar hábitos, adaptarse al mercado e invertir en tecnologías limpias. Según Factorenergía, el precio de la electricidad es más barato por la noche, entre las 24.00 horas y las 8.00.

Esto implica poner la lavadora de madrugada. Pero ¿y si vivo en un piso? La recomendación es hacerse con una ecológica, que emite cero ruidos o que pueda programarse para el horario diurno más conveniente, entre las 15.00 y las 18.00. Incide, a veces, la aportación de las renovables. Si su presencia es mayor, el coste se abarata. La OCU desaconseja las tarifas fijas durante un año.

El internet de las cosas ayudará también a los consumidores a ser más verdes.Es el caso de la firma Wattio, especializada en sistemas inteligentes, que vende termostatos y enchufes que controlan la calefacción y el encendido y apagado de los aparatos del hogar desde un smartphone.

El Ministerio de Industria acaba de ampliar el programa de ahorro y eficiencia energética por 1.400 millones para edificios, alumbrado, empresas o transporte.