El leasing, vitamina para el crecimiento
Las pymes que recurren al arrendamiento financiero tienen más posibilidades de crecer que las que no lo son, según un estudio de Oxford Economics.
El entorno de crisis económica que ha caracterizado a Europa los últimos años ha derivado en una restricción del crédito, lo que ha llevado a las pymes a buscar otras alternativas de financiación. Y la han encontrado en el leasing o arrendamiento financiero.
Según un estudio de Oxford Economics, el 50,7% de las pymes europeas recurrió a este método para financiar parte de sus inversiones durante 2014, lo se tradujo en 120.900 millones de euros.
En el estudio también se indica que, por regla general, las empresas que se financian mediante leasing tienen mayores probabilidades de obtener crecimientos. Así, del total de compañías que usaron esta modalidad, el 14,5% registró un aumento en su facturación, mientras que solo el 12,3% de las que no son usuarias del arrendamiento obtuvieron resultados positivos.
Asimismo, las pymes que crecieron financiaron casi una cuarta parte de su inversión (23,9%) a través de leasing, mientras que las que no crecieron sólo utilizaron el arrendamiento financiero en el 17,7% de sus inversiones.
El 14,5% de compañías usuarias del leasing vio crecimientos frente al 12% de las que no lo son
Para la elaboración del estudio, Oxford Economics encuestó a 3.000 pymes pertenecientes a nueve sectores industriales de ocho países (Alemania, Francia, Reino Unido, Italia, España, Países Bajos, Polonia y Suecia), que en conjunto representan el 82% de la producción económica total de la UE y el 72% del mercado total de leasing europeo.
En España, Bankia ofrece a sus clientes tres modalidades de leasing: mobiliario (bienes muebles), inmobiliario (bienes inmuebles) y líneas de leasing, con importes a disposición del cliente para que realice las operaciones que necesite.
Entre las ventajas que la banca concede al leasing se encuentran la posibilidad de obtener importantes ahorros fiscales, de financiar hasta el 100% de la inversión, la flexibilidad de cuotas, inmovilización de capital, la posibilidad de conocer los costes desde la firma del contrato, de financiarse a medio y largo plazo, y la opción de comprar los bienes por un valor definido de antemano.
“Con el leasing ofrecemos a nuestros clientes la posibilidad de utilizar los bienes que necesiten para desarrollar su actividad económica sin tener que realizar desembolsos iniciales, a cambio del abono de una renta periódica”, afirman desde Bankia.
“Además, tienen la posibilidad de adquirir el bien al finalizar el contrato por un importe mucho menor y fijado de antemano. También tendrá libertad total de elección tanto de bienes como de proveedores. De esta forma, tendrá acceso a los bienes que mejor se ajusten a su sistema productivo”, añaden.
Pero no a todos les parece una buena opción. Es el caso de Bravo Lofish, una empresa dedicada al diseño gráfico. Como forma de financiación han recurrido al leasing en varias ocasiones, pero a su director general, Francisco Bravo, le convencen más otras alternativas: “A nosotros el leasing no nos compensa y preferimos otros métodos de financiación como el renting”.
Varias son las razones que llevan a Bravo a preferir el renting frente al leasing, entre otras, el tener con este último “todos los servicios incluidos, como el de mantenimiento, el poder cambiar o renovar los equipos cada cierto tiempo, o la deducción del IVA”, precisa.
“Cuando hablamos de informática o automoción la constante evolución de la propia tecnología te obliga a renovar tus equipos cada poco tiempo, ya que pronto quedan obsoletos. De ahí que comprarlos no nos compense”, explica.