Verdú sobre las ‘black’: “No vi algo así en 30 años en banca”
Rato replica que él no hizo entrega de la tarjeta a Verdú.
El juez instructor Fernando Andreu ha tomado declaración este viernes a cinco testigos de la pieza separada del caso Bankia que investiga la posible comisión de delitos de administración desleal y apropiación indebida por el caso de las tarjetas black.
El primero en declarar, que se ha alargado durante casi dos horas, ha sido Jaime Terceiro presidente de Caja Madrid entre 1988 y 1996, predecesor de Miguel Blesa al frente de la entidad.
Terceiro ha asegurado, según fuentes presentes en la sala, que en su época se utilizaron tarjetas para gastos de representación dentro del circuito ordinario de la caja, a diferencia de las black, bajo contrato y requerían justificantes.
Las tarjetas, con una finalidad puramente de representación, tenían un límite de 600 euros mensuales que no fue necesario ampliar en sus nueve años de presidencia, ha sostenido, dado que el gasto medio rondaba los 250 a 300 euros.
Según Terceiro el gasto era cuidadosamente controlado e incluso se negaron los cargos de comidas de los viernes por la tarde y se discutieron hoteles que superaran las tres estrellas, ha ilustrado.
Varios de los imputados de esta semana habían apuntado que fue Blesa, a su llegada en 1996, quien aprobó el uso de las tarjetas para gastos personales, si bien otros de ellos han declarado que nunca hubo cambios en el uso de las visas.
Tras Terceiro ha entrado a declarar el que fuera consejero delegado de Bankia Francisco Verdú, quien junto a el directivo Íñigo María Aldaz, y el presidente de Caja Madrid Seguros Esteban Tejera, que también declaran hoy, fueron los únicos que teniendo una tarjeta no hicieron uso de ella. También declarará hoy el responsable de auditoría de Bankia Iñaki Azaola.
Verdú: "No había visto algo así en 30 años en banca"
El segundo testigo en declarar, el más categórico de este viernes según fuentes presentes en la sala, ha sido el exconsejero delegado de Bankia, bajo la presidencia de Rodrigo Rato, Francisco Verdú, que nunca usó la tarjeta black.
En apenas 20 minutos de comparecencia, Verdú ha aclarado que ni siquiera abrió el sobre que contenía la tarjeta black, su contrato y el PIN, que le fue entregado personalmente de las manos de Rodrigo Rato en febrero de 2012.
Este le aclaró, según Verdú, que podía usar la tarjeta para lo que quisiera con un límite anual de 75.000 euros –pese a que en el contrato se estipula 68.000- en un momento en que su salario había sido reducido drásticamente por el límite de retribuciones impuestas a las entidades que habían recibido ayudas.
La fórmula, entiende Verdú, habría servido para burlar estas limitaciones si no se hubieran descontado los gastos de la tarjeta de su sueldo –que se redujo a 600.000 euros anuales- lo que obviamente no hubiera ocurrido por la black no aparecía contemplada en el paquete retributivo que aparecía en su contrato.
"No había visto algo así en 30 años en banca", ha declarado Verdú, uno de los únicos cuatro de los 86 titulares de tarjetas black que nunca hizo uso de ella, aclarando que ya le habían entregado una tarjeta de representación.
El que fuera número dos de Bankia ha asegurado que decidió no usar la tarjeta y que así se lo comunicó inmediatamente a Rato advirtiéndole de que se trataba de una mala praxis bancaria. Rato aseguró ante el juez que no había mantenido conversación alguna al respecto con Verdú.
Rato replica a Verdú
Minutos después de hacerse públicas las declaraciones de Verdú, Rato ha declarado a Efe que él nunca le entregó la tarjeta en mano a Verdú dado que “no era su función”. “Si dada su profesionalidad, experiencia y su cargo de consejero delegado no actuó, cabe suponer que no le dio ninguna importancia”, ha añadido Rato.
La fianza por la salida a Bolsa
Verdú, para el que el juez Andreu solicitó el pasado viernes parte de la fianza civil solidaria de 800 millones de euros impuesta también a Bankia, BFA, Rato y otros directivos, por la presunta falsedad en las cuentas de la salida a Bolsa de la entidad, tiene previsto entregar hoy un recurso contra esta medida cautelar.
Aunque Verdú consignó aquellas cuentas, aduce que lo hizo solo 13 días después de haber desembarcado en Bankia, con lo que se habría encontrado toda la documentación ya preparada, con el visto bueno de Banco de España, CNMV y el resto de altos cargos de la entidad.
Los otros testigos
Tras Verdú ha declarado el responsable de auditoría de Bankia, Iñaki Azaola, que ha aseverado que alguien de su departamento le entregó tres hojas con los gastos de los exdirectivos de Bankia a comienzos de 2014 y que fue este hecho el que activó la investigación.
Por su parte, el exconsejero Íñigo María Aldaz y el expresidente de Caja Madrid Seguros y actual consejero delegado de Mapdre Esteban Tejera han declarado que nunca hicieron uso de uan tarjetas black porque, de hecho, no recibieron más tarjeta que la que les entregaron para gastos de representación. Es decir, que solo Verdú, y el fallecido Felix Manuel Sánchez Acal recibieorn la tarjeta black y no llegaron a usarla.
Norniella trata de evitar la fianza
José Manuel Fernández Norniella, el que fuera mano derecha del expresidente de Bankia Rodrigo Rato y titular de una de las tarjetas black, ha tomado medidas para tratar de evitar la fianza civil que viene requiriendo el fiscal a los imputados.
En concreto, Norniella consignó ayer en la cuenta que tiene abierta para ello a Audiencia Nacional los 175.000 euros que gastó con esta tarjeta opaca al fisco con la que 82 exconsejeros y directivos de Caja Madrid y Bankia hicieron gastos injustificados por valor de 15,2 millones de euros entre 1999 y 2012.
El exconsejero de Bankia trata así de evitar la imposición de una fianza civil, solicitada por el fiscal para todos aquellos imputados cuyos gastos no sean achacables a una labor institucional o que no hayan devuelto aún el dinero.
Norniella ya habría tratado de devolver el dinero a la Fundación Caja Madrid tras estallar el escándalo, informa Efe, si bien esta institución no aceptó el dinero de ninguno de los imputados.
Primeros recursos a la fianza por la salida a Bolsa
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La fianza civil solidaria de 800 millones impuesta a los responsables de salida a Bolsa de Bankia, a la entidad y su matriz, comenzó a ser recurrida por los afectados el viernes. El exvicepresidente José Luis Olivas, que consideró la medida “absolutamente desproporcionada”, reclamó su retirada o su rebaja a los 33 millones de euros que representan los solicitantes. El exconsejero delegado Francisco Verdú arguyó que llegó a la entidad solo 13 días antes de que le dieran a firmar las cuentas de la salida a Bolsa y el expresidente Rato que estas contaban con el visto bueno de los supervisores. La Audiencia Nacional admitirá más recursos hasta el martes.
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