Un presidente lógico y logístico
Los inversores pueden estar un poco decepcionados por que John Allan haya sido nombrado presidente de Tesco. Pero junto al marketing, el aspecto más importante de la venta al por menor es la logística. En David Lewis, nuevo consejero delegado de Tesco, cuenta con un vendedor. Las credenciales de Allan en la logística, por su parte, son envidiables. Fue consejero delegado de Exel, empresa logística global con sede en Reino Unido formada por la fusión de Ocean Group y NFC en 1994. Posteriormente trabajó para Deutsche Post que, aunque conocida por ser una empresa de envíos de cartas y paquetes, está en esencia relacionada con la logística.
La experiencia de Allan como director financiero de Deutsche Post será muy útil en Tesco, que está luchando con diferentes formas de fortalecer su balance mientras se enfrenta a la guerra de precios que se extiende por todo el sector de los supermercados de Reino Unido. Es muy probable que las amortizaciones en la cartera de inmuebles de Tesco no tarden en llegar –por valor de 34.000 millones de libras (casi 30.000 millones de euros) en el último informe anual de la compañía–. El valor de sus propiedades se verá amenazado si los márgenes de beneficio se reducen de forma permanente. La duda también rodea al valor de las tiendas más grandes porque los compradores británicos están utilizando las tiendas online y de conveniencia con más facilidad. Tesco podría decidir fortalecer su balance deshaciéndose de las operaciones de venta al por menor en Asia y Europa del Este, o de activos que no son de retail en Reino Unido, como el banco de Tesco.
Allan, que ha presidido un par de tiendas más pequeñas cotizadas en Reino Unido incluyendo Dixons Retail, además cuenta con experiencia como CFO, marca la mayoría, si no todas, las casillas requeridas.