Hacienda busca vías de salida para la deuda autonómica
El Gobierno llevará al Consejo de Política Fiscal nuevas medidas de liquidez
La deuda de las comunidades autónomas sigue incrementándose y la tendencia no se detendrá en el corto plazo. Alcanza ya los 232.000 millones, el 22% del PIB, el nivel más alto de la historia. Las autonomías, especialmente aquellas que cuentan con una peor situación, han contado con la ayuda financiera del Estado, que ha suplido a los mercados. Entre el fondo de liquidez autonómico y el plan de pago a proveedores, las comunidades han recibido más de 85.000 millones de euros desde 2012. Un dinero que les ha permitido abonar deuda comercial atrasada, financiar el déficit público anual y afrontar los vencimientos. Sin ese auxilio, algunas comunidades hubieran entrado directamente en bancarrota. Ello es así porque los mercados estaban cerrados o exigían tipos de interés inasumibles.
Sin embargo, el Ministerio de Hacienda es consciente de que la situación de las comunidades autónomas está lejos de ser la idónea y este ejercicio rebasarán nuevamente los objetivos de déficit público. En este contexto, el riesgo de que nuevamente se acumulen las deudas comerciales es elevado y el Ejecutivo baraja fórmulas para reestructurar la deuda y fijar nuevas medidas de financiación.
Rechazo, en principio, a las quitas
Un escenario en el que la Administración central perdone parte de la deuda autonómica es improbable. “No hay nada de eso”, señalan fuentes del Ejecutivo. Cataluña o Valencia son dos de las autonomías que han recurrido con mayor intensidad al auxilio financiero y, en caso de quita, saldrían especialmente beneficiadas. Sin embargo, el resto de comunidades, con Madrid a la cabeza ya han advertido que una medida en este sentido supondría un premio para las autonomías incumplidoras. Sin embargo, la posibilidad de que el Estado asumiera la titularidad de deuda autonómica, una idea que se ha estudiado, supondría a efectos prácticos una condonación.
Reestructuración de la deuda
Que no se plantee una quita, no significa que Hacienda rechace una reestructuración de la deuda que mejore las condiciones para devolverla. De hecho, ello ya se ha producido. En el último Consejo de Política Fiscal y Financiera celebrado en julio se aprobó rebajar los tipos de interés del fondo de liquidez autonómica de 2012, 2013 y 2014 al 1%. Un tipo de interés reducido que entró en vigor el 1 de octubre y estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2015. Según los cálculos de Hacienda, ello permitirá un ahorro de 409,44 millones para este año y de 1.637 millones para el siguiente. Además, las comunidades que se acogieron al FLAde 2012 debían empezar a devolver el principal a partir de 2015, una fecha que se retrasará un año. Ello implica que las comunidades no deberán abonar 2.080 millones el próximo año tal y como estaba previsto en un primer momento. Este tipo de medidas contribuyen a que, por primera vez desde 2004, la partida presupuestaria de 2015 destinada a pagar los intereses de la deuda se reduzca respecto al presupuesto anterior. La mejora de las condiciones financieras permitirá a Cataluña ahorrar 1.774 millones en 2015. El beneficio alcanza los 1.014 millones para Andalucía y los 981 millones para la Comunidad Valenciana. En Hacienda barajan nuevas opciones para facilitar la devolución de la deuda y también medidas para aquellas comunidades que no se han acogido a los fondos del Estado.
Mutualizar deuda
El pasado mes, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, anunció que su departamento estaba trabajando con nuevos instrumentos para facilitar el pago de las facturas autonómicas en el ámbito sanitario. “Vamos a avanzar en una nueva mutualización de la deuda”, señaló Montoro, que aseguró que las autonomías se financiarían a través del Tesoro o a los mismos tipos de interés. El Gobierno de Mariano Rajoy plantea una suerte de FLA para las comunidades que, si bien no tienen problemas para acudir a los mercados, podrían financiarse a tipos inferiores si tuvieran el respaldo o el aval estatal. Actualmente, la legislación ya obliga a las comunidades a acogerse a los fondos de liquidez si el coste supera ampliamente el del Tesoro. Por otra parte, las comunidades con mayores problemas seguirán teniendo detrás el auxilio financiero del Estado para evitar que la carga de la deuda dificulte todavía más el saneamiento de sus cuentas. Todo ello se debatirá en el próximo Consejo de Política Fiscal y Financiera que se celebrará esta semana o la próxima.