Los representantes de las pymes piden abaratar el despido
En palabras del candidato a la presidencia de la CEOE
Reforma del mercado de trabajo para generar más empleo, más flexibilidad en las condiciones laborales y salarios, y reducción de costes, incluido los despidos, son algunos de los planteamientos que el candidato a la presidencia de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), y actual presidente de Cepyme, Antonio Garamendi, quiere implantar.
Una CEOE más influyente y con más participación
Garamendi pretende formar una CEOE más influyente y así lo ha dejado claro en su programa electoral “'De nuevo. Independencia, ética y transparencia” donde explica las medidas que quiere adoptar con el objetivo de lograr una mejor adaptación a las circunstancias económicas. "Una de las principales rémoras de la CEOE en los últimos años ha consistido en ir a remolque de las iniciativas de reforma del entorno empresarial y de criterios ajenos", ha asegurado Garamendi, y por ello, considera que "CEOE tiene que participar activamente como agente social en los debates que afectan a la médula y vertebración de España, como pueden ser la Unidad del Estado, la defensa de la Constitución y la Corona, la lucha contra la corrupción, la promoción de partidos políticos constitucionales, la unidad de mercado, etc. (…)Debemos ir más allá de ser un mero gestor de las relaciones laborales".
Novedades que plantea Antonio Garamendi, candidato a la presidencia de la CEOE
En línea con las novedades que plantea Garamendi, una de las principales es reducir los costes de las empresas, los laborales, los fiscales, los sociales, etc. porque ayuda directamente a los empresarios. También propone reducir las cotizaciones sociales y abaratar el despido individual, para ser una “economía competitiva”. En cuanto a los salarios, el candidato a presidir la CEOE propone una fijación en función de la productividad e, incluso, según el puesto de trabajo, además de reducir la carga fiscal a las que tienen que hacer frente las empresas.
De igual manera, apuesta por aumentar el esfuerzo para reducir la morosidad de la administraciones, por lo que otra de sus prioridades es que quiere racionalizar las administraciones públicas a través de la simplificación de organismos, reduciendo las empresas públicas y las sociedades mercantiles y evitando duplicaciones.