Salarios como el seguro de paro
Las nóminas más modestas están entre las personas de menos de 25 años El estancamiento y caída de los salarios estrecha la distancia con las pensiones de la Seguridad Social
La intensa devaluación de costes laborales experimentada en el mercado de trabajo español durante la crisis ha concentrado cada vez colectivos más numerosos de trabajadores en las franjas de remuneración más modesta. Hasta el punto de que las diferencias entre los sueldos de tales colectivos y las prestaciones por desempleo o las pensiones de jubilación prácticamente han desaparecido. Así, el 30% de los asalariados con menor remuneración mensual, expresada en términos brutos, percibe menos de 1.216 euros, según la Encuesta de Estructura Salarial que con datos de 2012 de la Encuesta de Población Activa (EPA) elabora Estadística.
En tal franja (los tres deciles peor remunerados) se encuentran nada menos que 4,14 millones de trabajadores (el 28,9% de los que lo hacen por cuenta ajena), con una media aritmética de 787,3 euros mensuales de sueldo. Esta cantidad es inferior a la prestación contributiva media actual, que es de 869 euros brutos al mes, y desde luego menor que los 921,4 euros que suponía la prestación contributiva media en el año 2012.
Ciertamente el tercer decil de la estructura salarial, que agrupa a los 1,44 millones mejor pagados dentro de este colectivo de los peor remunerados, tiene un sueldo medio de 1.109 euros mensuales; tal cantidad sí estaría ligeramente por encima de la prestación por desempleo, pero seguiría en el mismo nivel de la prestación inicial máxima (la que se cobra en los primeros meses de seguro) para cualquier persona con cotización suficiente, que está establecida en 1.087 euros, y por debajo de las prestaciones máximas por desempleo contributivo de quien tenga un hijo (1.242 euros al mes) o dos (1.397,8 euros mensuales). Ahora hay 1,66 millones de desempleados con prestación contributiva, mientras que 550.190 adicionales cobran un subsidio medio de 466 euros mensuales.
El resto del colectivo de los peor remunerados, los dos primeros deciles salariales, con 2,699 millones de trabajadores, cobrarían siempre por debajo de la prestación por desempleo media actual. Si esta está en 869,1 euros al mes, el sueldo medio del primer decil (el peor pagado de todos) es de 423 euros al mes, y el segundo, de 830 euros. Este colectivo de 2,699 millones supone el 18,8% de los asalariados, casi uno de cada cinco de cuantos hay en España.
Lógicamente, la mayor concentración de este tipo de asalariados con remuneraciones similares a las prestaciones de paro se produce entre personas que trabajan a tiempo parcial, pero también las hay de las que lo hacen a tiempo completo. Entre estas, hasta un 18% (2,19 millones) ganan menos de 1.216 euros brutos al mes, y un 8,6% (924.890 asalaruiados) ganan menos de 988 euros.
Entre quienes trabajan a tiempo parcial llega hasta el 91,5% (1,94 millones de trabajadores), y de ellos, la mayoría (1,77 millones) tienen salarios inferiores a los 988 euros al mes. De hecho, la media de remuneración de quienes trabajan con jornada a tiempo parcial es de 687 euros cada mes, frente a los 2.066 euros de quienes lo hacen a jornada completa.
La encuesta de estructura salarial que elabora el Instituto Nacional de Estadística y que sirve de base para esta comparación de rentas primarias determina que el sueldo medio de los españoles es (en 2012) de 1.908 euros brutos cada mes, mientras que el sueldo mediano (aquel que se encuentra en tal punto que tiene justo la mitad de los asalariados por encima y la otra mitad por debajo) desciende hasta los 1.607 euros brutos mensuales.
Pero con el concepto que más se identifican los miembros de este club de cuatro millones largos de mileuristas es con el de sueldo más frecuente, que se sitúa en 1.291,6 euros brutos cada mes, o 15.500 euros cada año. Esta remuneración es el 80,3% del suedo mediano (los 1.607 citados más arriba).
Tomando como fiel de la escala, como valor cien, el sueldo mediano, puesto que es el que marca el eje sociológico que tiene tantos asalariados por encima como por debajo, podemos detectar las verdaderas diferencias de renta en España obtenidas por el factor trabajo, así como su comparación con las prestaciones por desempleo o las pensiones, puesto que ambas variables tienen una procedencia en los sueldos percibidos en activo y las cotizaciones correspondientes.
Así, el sueldo medio es solo un 18% superior al salario mediano, mientras que el sueldo más frecuente es un 80% del mediano. La prestación contributiva media por desempleo está en el 54% del sueldo mediano, pero la prestación máxima para perceptores con dos hijos está en el 87% del citado salario mediano. Además, el salario más frecuente del mercado es solo un 18,8% superior a la prestación máxima contributiva que comienzan a cobrar los perceptores de paro sin cargas familiares, o solo un 14,5% superior a la pensión media del régimen general (aquél en el que se alojan los pasivos que fueron asalariados en su vida activa).
El efecto devaluativo continuo
Pero hay nóminas inferiores a las prestaciones, como hemos observado. Así, el salario medio del 30% de los trabajadores por cuenta ajena peor pagado (esos 4,4 millones que hemos identificado gráfica y popularmente como los mileuristas) es solo del 90% de la prestación contributiva media abonada ahora (869 euros al mes) o solo el 72,4% de la prestación máxima de quienes no tienen cargas familiares (1.087 euros).
La presión de la devaluación interna de costes laborales, un instrumento que ha demostrado una eficacia significativa para recuperar los niveles de competitividad perdidos en los diez primeros años del euro, se ha concentrado en los sueldos medios y bajos, más en aquellos que en estos, según demuestra la encuesta de estructura salarial. Entre los años 2010 y 2012 los trabajadores con salarios en el centro de la franja cuantitativa han pasado de suponer el 45% al 46,4%, mientras que los sueldos más bajos han perdido ligeramente presencia. Y desde luego aquellos salarios del colectivo mejor remunerado han crecido en número, como demuestra también la encuesta de renta y riqueza de las familias del Banco de España, así como la cuantía de sus rentas.
Pero mientras en el salario mediano y medio crecen de forma consistente entre 2006 y 2009, se estanca desde entonces hasta ahora, con avances insignificantes. Sin embargo, no ocurre lo mismo con el sueldo más frecuente de cuantos tienen presencia en el mercado español. Y el descenso es muy pronunciado en 2012 respecto a 2011, ya que pasa de 16.500 euros brutos anuales (1.375 euros al mes), hasta los 15.500 (1.291 euros brutos al mes) según Estadística. En términos netos, tal remuneración desciende hasta el entorno de los mil euros.
Una de las vías de la devaluación salarial interna ha sido el desplazamiento de contratos hacia jornadas reducidas, aunque todavía España presenta una de las tasas más modestas de contratados a tiempo parcial de la Unión Europea. Y este fenómeno se ha cocentrado más entre las mujeres que entre los hombres, y de forma más intensa en unas actividades que en otras, sobre todo en las de los servicios.
Actividad, nivel educativo y empleador
En los tres deciles que concentran los salarios más bajos (hasta 1.216 euros al mes) se concentran el 42,1% de las mujeres, y hasta un 30% lo hacen en los dos con remuneraciones más modestas, con menos de 988 euros al mes brutos. Por lo que se refiere a los hombres, únicamente el 18,9% de ellos tienen remuneraciones situadas en el tercio más modesto de la escala remunerativa.
A medida que echamos la mirada en la escala creciente de salarios, disminuye la presencia de mujeres y se intensifica la de hombres. En el tercio de sueldos más elevados está el 36% de los hombres, mientras que solo el 23,4% de las mujeres. Gráficamente: uno de cada tres hombres cobra más de 2.095 euros brutos al mes, mientras que en tal nivel solo hay una de cada cinco mujeres.
Un análisis por edad revela también que las nóminas más modestas están entre las personas de menos de 25 años, ya que un 66% (nada menos que dos de cada tres) asalariados de esa edad cobran menos de 1.216 euros. El grueso de quienes ganan más de 2.095 euros tiene entre 45 y 55 años en la encuesta del año 2012.
La variable formativa registra los mismos sesgos, con una gran concentración de los asalariados de formación básica en las remuneraciones más modestas; y una concentración más intensa todavía de la formación universitaria entre quienes perciben los salarios más elevados. La mayoría de las nóminas más bajas está en los servicios de restauración, en el servicio doméstico, en la agricultura, en las actividades administrativas y en el comercio.
En función del pagador, en el sector privado hay mayor proporción de asalariados en los tramos más bajos (seis de cada diez hasta la mitad de la escala), mientras que en el público (con un sueldo medio de 2.448 euros brutos, que supone el doble del sueldo más frecuente y el 52% mayor que el salario medio) tiene al 57% del total de funcionarios en el tercio de remuneraciones más altas.
Una comparación con las pensiones
El estancamiento y caída de los salarios ha provocado que sus diferencias con las pensiones de la Seguridad Social se estrechen. La pensión media de jubilación actual es de 984,6 euros brutos al mes (por catorce pagas), y la pensión de jubilación del régimen general está en 1.127 euros. Pero la pensión nueva, la que se causaba al inicio de este año, era de 1.352 euros, y de 1.469 la del régimen general.