El precio de las casas cayó un 7,8% en 2013 y encadena seis años de ajuste
Bajadas generalizadas de precios en todas las comunidades autónomas Aragón encabezó la lista con un descenso del 11,6%
Sociedad de Tasación ha sido el primer organismo que ha hecho públicos los datos de cierre del mercado de vivienda en 2013. Y ha sorprendido, puesto que la mayoría de expertos habían vaticinado a lo largo del mes de diciembre que el precio de las casas seguiría cayendo, pero con menos intensidad de lo que lo había hecho en los años precedentes del pinchazo de la burbuja. Más bien ha sucedido lo contrario. En 2010, el precio medio de una casa nueva cayó un 3,2% y en los tres años siguientes la depreciación se acentuó con caídas del 4%, del 6,9% y del 7,8%, respectivamente. Así, el precio medio del metro cuadrado se situó a finales de 2013 en 2.039 euros, alrededor de 183.500 euros para una vivienda tipo de 90 metros cuadrados, lo que supone retroceder a niveles de 2004.
En su balance del pasado ejercicio, los tasadores dejan claro que la crisis en el mercado inmobiliario no ha tocado suelo. “En el año 2014 la oferta de vivienda nueva seguirá siendo importante, pese a la considerable reducción en el volumen de viviendas iniciadas. La reciente entrada en el mercado inmobiliario español de fondos de inversión puede inducir a la aceleración en la absorción del stock ya construido, que lleve aparejada cierta reactivación del sector”, concluyen. El apetito que el mercado inmobiliario ha despertado entre los fondos, por los importantes descuentos que se han aplicado, no servirá, sin embargo, para acabar con el abultado stock de vivienda nueva sin vender, cifrado por el Ministerio de Fomento en 584.000 viviendas. Por ello los tasadores auguran que el nivel de la oferta seguirá cayendo para ajustarse al de la demanda, todavía muy pequeño. “Los síntomas de recuperación son muy tímidos y están pendientes de consolidación”, destaca el informe, que resalta que el descenso de precios será menos acusado en las mejores ubicaciones (fundamentalmente grandes ciudades y zonas en crecimiento).
Asimismo, augura que la moderación de la inflación resulta “insuficiente” para compensar las caída de los ingresos netos en una parte importante de las familias, lo que hace previsible que la renta real disponible para la compra de viviendas vuelva a bajar en 2014 respecto a periodos anteriores. “Este efecto se verá potenciado por la incidencia de la elevada tasa de paro y de la incertidumbre laboral asociada, y exigirá un mayor esfuerzo en la economía familiar para la adquisición de una vivienda”, añade.
De hecho, la estadística muestra como durante los seis años de caída, el precio medio de la vivienda nueva ha caído un 38,9% desde que tocó máximos en 2007, al pasar de 2.905 a 2.039 euros por metro cuadrado. Solo en los seis años anteriores, el precio de la vivienda experimentó un crecimiento del 50%, pasando de 1.453 a 2.905 euros por metro cuadrado, lo que muestra que el ajuste en el precio aún tiene recorrido a la baja.
Ninguna comunidad autónoma se libra de las caídas de precios. El mayor descenso corresponde a Aragón, con un ajuste del 11,6%, mientras que el menor se produjo en Asturias, con un 2,5%. Este descenso generalizado contrasta con los datos proporcionados por el INE, en el que avanzaba que el precio de las casas nuevas creció en el tercer trimestre un 0,7%, el primer dato positivo en desde el segundo trimestre de 2010, lo que fue interpretado por los analistas como un punto de inflexión. Nada más lejos de la realidad.
Sin ayudas a la subsidiación de préstamos
El Gobierno defiende su decisión de suprimir las ayudas de subsidiación de préstamos hipotecarios alegando que el contexto general es de caída de los precios de la vivienda y de los tipos de interés, lo que a su juicio es suficiente para “compensar” la pérdida de estas cantidades.
Así se lo hizo saber al diputado de UPyD Toni Cantó, en respuesta a una pregunta escrita relativa a la decisión del Ejecutivo de suprimir la concesión de nuevas ayudas y de las que aún no hubieran sido reconocidas por las comunidades autónomas antes de la entrada en vigor del decreto ley de Medidas para garantizar la estabilidad presupuestaria y de fomento de la competitividad, aprobado en julio de 2012.
Cantó apelaba en su texto tanto a sentencias judiciales a favor de los beneficiarios de estos préstamos subsidiados como al informe de septiembre del Defensor del Pueblo en el que se solicitaba al Ministerio de Fomento que pagara las renovaciones de las ayudas correspondientes a planes de vivienda anteriores al de 2009-12.
Fomento subsidia los préstamos convenidos obtenidos por los compradores de viviendas protegidas acogidos al sistema de financiación para primer acceso a la vivienda en propiedad. En la práctica supone un descuento en la cuota de la hipoteca que el banco opera mensualmente y que tiene una duración de diez años, dividido en dos etapas de cinco años.